Es un día gris. Literalmente. Un cúmulo de densas nubes rodea como una cúpula la ciudad entera.
La luz del sol se ha tornado una especie de melancolía lumínica, una oscuridad que brilla lo suficiente para dejarnos ver, mas ese brillo es agonía solar, un suspiro que nunca termina. Los recuerdos de antaño nos encasillan dentro de una cinta de ocho milímetros. El color es una reconstrucción de la memoria, no está ahí en realidad, es un fantasma resurrecto que la mente vierte sobre los diferentes tonos de gris.

Etiquetas: gris lluvia melancolía

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