Dos ancianas en un vagón del metro
Rosita – Según Gugle, nos tenemos que bajar en la siguiente estación.
Cidalia – Mmm… ¿Estás segura que pusiste la dirección correcta? Porque la última vez que vine donde la Margarita, estoy segura que me bajé en la última estación y de ahí caminé un par de cuadras hasta su casa.
Rosita – Estoy segura, mira la pantalla tú misma.
Cidalia – ¡Bah! Debe ser un error, mejor nos bajamos en la última estación.
Rosita – ¿Y si te equivocas? Quizás fuiste donde la María Elena esa vez porque ella vive cerca del centro. Mejor bajémonos en la siguiente como dice el programa, si estas cosas no se equivocan.
Cidalia- ¡Estoy segura que era la Margarita la que vine a ver esa vez!
Rosita- ¡Pero si la Margarita vive lejos del centro!
Cidalia – ¡Te digo que no!
Llegan a la estación que Google Maps indica.
Rosita – Ya llegamos ¡Apúrate, bajémonos!
Cidalia – ¡Que aquí no es!
Rosita –¡Te digo que sí! (Empuja a Cidalia hacia afuera)
Cidalia – ¡Oye!
Se bajan ambas.
Cidalia – ¡Qué eres porfiada! ¡Ahora tendremos que esperar el siguiente tren!
Rosita – No, ahora tenemos que seguir las instrucciones de Gugle. Dice que debemos salir por el lado derecho y caminar 2 cuadras.
Cidalia – Quizás a donde nos está mandando… yo no pienso hacerle caso, mira que el otro día me llegó un video a mi wasap, donde advertían que los delincuentes ahora mandan direcciones falsas para asaltarte.
Rosita- ¡Ay, pero si puse la dirección que nos dio la Margarita!
Cidalia – Pero perfectamente pudieron interferir el teléfono, si hoy en día los delincuentes están más peligrosos que nunca. El otro día a la vecina de la Silvita, le entraron a robar a la casa mientras estaba en el trabajo y dijo que le dijeron, que los ladrones supieron que no estaba porque tenían acceso a la cámara web que ella tiene.
Rosita – ¿De dónde sacas esas cosas? Estás como la Eliana. Yo creo que la vieron salir no mas y se aprovecharon de meter, si siempre han sido así.
Cidalia – Alla tú si no crees, pero me han llegado varios videos al wasap de este tipo de cosas, yo no confío para nada en ese tal gugle.
Rosita – Esto te pasa por estar todo el día viendo esas cosas que te llegan a wasap, te pones paranoica.
Se les acerca un joven.
Joven – ¡Buenas tardes! Soy estudiante de periodismo y estoy haciendo una encuesta para una clase. ¿Les podría hacer algunas preguntas?
Cidalia – Buenas tardes joven, pregunte no más.
Se escucha el próximo tren acercándose.
Rosita – Nos encantaría joven, pero tenemos que irnos porque ahí viene el metro.
Cidalia- ¿Y no habías dicho que nos teníamos que caminar por acá?
Rosita – (Nerviosa) ¡Es que me equivoqué al poner la dirección!
Cidalia – ¡Yo sabía! Perdone joven entonces, ojalá le vaya bien con su encuesta
Joven – No se preocupe, ¡Que tenga un buen día!
Llega el metro y ambas se suben.
Cidalia – ¡Viste, viste! Yo te dije que teníamos que seguir adelante
Rosita – ¡No! ¡Solo te hice subirnos porque estoy segura que ese chico nos quería asaltar!
Cidalia – ¿Pero cómo? Si era un joven no más y estaba bien vestido.
Rosita – ¡Así se visten ahora! Lo vi en las noticias el otro día.
Cidalia – ¡Tan miedosa que saliste! Eso te pasa por estar viendo las noticias todo el día.
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