Política humana

Aviso

Enfoque al natural

Escupiendo: espuma, sal y arena; 

revienta el mar sus fuerzas,

suscitando la espuma;

rastro del mar sobre la arena. ...

Endeble, él agua ondea;

de repente semeja, 

la filantropía retórica

de un viejo pusilánime en la orilla, 

mirando espacio y vida; 

sin la emulación en las venas, 

su sangre se torna aforisma, 

parece tratarse de una bestia. …#bocadillo

Dulce miel, en recipiente sucinta,

cual panal vacua, 

no queda abeja para catar, 

ni dulce miel para castrar; 

recalcitrante, el viento no se va

y si se va, él, volverá. … #bocadillo

Melosa resbala la desiderata

de lo que se quiere o añora; 

pero que difícil resulta

obtener realidades sin lucha.

La tempestad execrable, se acumula

 y ella nos insulta, vilipendia, 

azotando nuestra humanidad

con el largo brazo de la indolencia. ...

Mar sereno, lleno de tristeza; 

viejo pescador, sedicente, sobre las peñas. 

El murmullo del mar 

es breve y magistral; 

allega mil temas

en uno solo,

en el único tema que puede importar: 

Sobrevivir.

Cual sucinda en pleno cielo,

cual alondra alegórica; 

ideales inhóspitos se cuelan 

para producir la guerra; 

en otrora, Girondinos, lo era; 

un ser aprensivo, en la postrera

el símbolo de una nueva querella. 

Indulgente del laico, respuesta 

sin influencia religiosa; 

al fuego la hagiografía

y en las llamas el curato se humilla.

Los aforismos, que mal terminan 

y los cambios nos arrojan, 

expeliendo la exacerbación fanática. ...

Surge el émulo o la  émula

y en los ambages de la hipocresía

oprobiando, al hermano en la reyerta

y la mujer escaldada, 

por la desdicha de ser hembra.

El azul se vuelve gris, sobre el mar; 

ahitar es confuso, ahora, 

se sumerge el cielo en el agua 

y no hay llanto sobre las montañas. ...

Cavilar en el arcano glaciar

de los hemisferios, importuna; 

no hay garante para las ínfimas

criaturas de la sociedad; 

el efluvio emana de la ansiedad 

y la impaciencia revela: 

xenofobia incircunscripta. ...

En la Grecia antigua, la anfictionía;

en la moderna, asambleas; 

en las generaciones venideras, 

sólo Dios, sabe, lo que venga.

El chauvinista en la frontera, 

fallecería en el germen del suicida

y la latinidad agoniza desde ya

en la mezcla de las lenguas.

Recordando, del río, el cristal;

ese que en Prusia, originó historia 

de una humedad misteriosa

bañando al Prusiano la ropa. 

Acaso, se puede llamar germanófila  a la  tierra, 

por ceder a los Alemanes, un lugar; 

entonces, también de los Venezolanos es amiga

por darnos a  Venezuela y sus maravillas.

Duros fueron los años del fascismo en Italia

y las experiencias demuestran

nuestro ahíto por la autonomía.

Sabiamente la naturaleza

con su dicotomía de lo convencional, 

paradigma ese mar,

mar que arroja a nuestra faz: 

espuma, sal y arena; 

cual escupitajo, el viejo sobre la peña. 

Alza el joven, la frente tostada 

y acepta el convite de la mar.

La sobrevivencia, 

se resume en convivencia.

Somos tontos idealistas 

quemando nuestras penas

con muestras mismas injusticias.

El viejo pusilánime, en la orilla; 

un viejo pescador, sedicente, sobre las peñas; 

el grito ensordecedor de las olas: 

sobrevivir, sobrevivir es la alondra. 

Ínfimas criaturas, aquellas que no escuchan. 

Joven de frente tostada, 

sale al echar las cartas; 

cielo bebido por las aguas 

grises, azuladas de una mar revuelta. 

El murmullo del mar es breve, 

sucinta mil temas en uno solo

y lo repite con vehemencia, 

cual alondra en frente del celeste

sobre un amplio mar.

Mueren los sonidos

                 en el silencio 

ese que nos da que pensar.  

(Política humana)