Así de fácil fue el olvido para dos amantes que un día juraron amarse. Él nunca dijo una palabra, y ella, cada noche, esperaba, porque sabía que ya había hecho todo a su alcance y no le correspondía, por decencia a sí misma, decir algo. Pero, como todo quedó en manos de él, no pasó...
Seguir leyendo
26
1