El veintidós ya es historia, como el amor que por ti sentía. He dejado atrás esa angustia repentina de cumplir años y no notar mejorías. Me encuentro plena, llena de gracia, viviendo mi aventura. Te has marchado y te agradezco profundamente, con usted era un poco dura. Viajando por el mundo he conocido nuevas personas y culturas. Tal vez piense que estoy escapando, aunque simplemente estoy contemplando la naturaleza que emerge en cada paso. Es por ello que digo: adiós a los veintidós y bienvenido el nuevo mundo. A partir de hoy, solo me concentraré en sentir algo más profundo.

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