Te podrías perder en el brillo de sus ojos, si los miras fijamente es como si supiese lo que estas pensando. Cada arruga de su piel es como si contara una historia de su vida. No puede hablar, pero no le hace falta, pues con su mirada ya lo dice todo. Seguramente su día favorito es el domingo, pues nos reuníamos todos para ir a verla y después olvidamos que existe por 6 días. Hace unos años era el peor día para mi, no podía dormir hasta tarde por que tenia que levantarme para ir a verla. Ahora, sentado junto a ella mientras escucho el ruido del respirador intento recordar todos los momentos vividos junto a ella. Apenas tengo recuerdos, supongo que 54 días al año no son suficientes. Mi madre me llamó esta mañana, entre lloros me pedía que salvase a mi abuela. Mientras la observo pienso que en otro tipo de guerra me pondría en medio de una bala y ella, que cogería el fusil y cargaría contra cualquier enemigo que se atreviese a tocarla, pero en esta no puedes escuchar esas balas, el enemigo podemos ser todos, me miro al espejo cada mañana, preguntándome si voy cargado de esa munición que esta matando a tantas personas, entre ellas mi abuela.
He contado 16 camas, todas con personas mayores de 60 años, seguramente abuelos y abuelas, no paro de preguntarme si ellos también ven a su familia 54 días al año. La cama 11 se acaba de quedar vacía, siempre espero que la respuesta sea ´´se ha recuperado´´ pero casi nunca lo es. La mayoría de estas camas se quedaran vacías en unos días, y esas personas pasaran esas ultimas horas solas, luchando por vivir, como lo han hecho siempre. Antes la excusa era el tiempo, hoy es esta guerra en la que luchamos, espero que mañana no existan razones para verlos solo 54 días al año. Estamos tan acostumbrados a olvidar el pasado, que dejamos que todo caiga en el olvido. Ojala que cuando todo esto acabe y nos sintamos indestrutibles e inquebrantables no lo olvidemos todo.
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