» Los efectos de una triste borrachera»
Todo empezó con una noticia que leí el 7 de noviembre del año pasado cuando estaba atravesando uno de los tantos períodos difíciles de encierro en esta horrible pandemia:
En 2022 quiso salir de gira y hoy, el cantante de UB40 «Astro» está muerto.
De 1978 a 2013, Terence Wilson fue miembro de la banda de reggae más exitosa del mundo. UB40 vendió más de 100 millones de discos con el cantante conocido por su apodo Astro. El año que viene Wilson quería volver a salir de gira. Pero ahora ha fallecido después de una breve y grave enfermedad. Tenía 64 años.
🎶 «RED, RED WINE» 🎶
Desde entonces, cada vez que escucho la canción que bailé con entusiasmo en mi juventud y todavía hoy me sigue acompañando cuando voy al volante del auto, pienso… pienso… que la vida… ¡se cobró caro conmigo!
He comenzado a sentir miedo por todo, temor de decir algo equivocado, o, peor, decir lo correcto y que no me entiendan, como si yo hablara en otro idioma. Tiemblo y dudo tanto que los demás lo notan.
De pronto me volví débil y todos se aprovechan de mí.
¡Una loca! murmuran, ¡una desubicada que no sabe lo que dice!
Los que me conocen desde hace tiempo, piensan que con los años se me estropeó el cerebro, que me sigo creyendo joven, capaz de hacer cualquier cosa.
¡Mire si en este siglo van a existir las «bisagras acodadas» para reponer la que se le rompió a la puerta del armario de mi cocina tan centenario como yo!
– ¡Es hora de hacer una reforma doña! Ponga puertas de material sintético y saque esas ancestrales de madera de pino que tiene…. muy finas y bien terminadas sí, pero ¡de otra época!
Lo gracioso es que las «bisagras acodadas» ¡existen todavía!
En un comercio del barrio, un muchacho de veintipocos años me entiende, me ayuda y me enseña como colocarla cuando ningún carpintero profesional quiere hacerlo. Y yo pongo manos a la obra con mucho temor, pensando que quizá esta vez no me quede bien.
Pero puedo, puedo una vez más y entonces, muy bajito, le cuento a alguien que mi puerta quedó estupenda.
Lloro mucho. Paso las noches angustiada. El doctor me dio una pastillita para ayudarme a descansar, pero cuando quedo dormida «a prepo» me atormentan las pesadillas.
A menudo pienso que voy a morir pronto porque ya no tengo más nada que hacer.
Me siento una anciana tonta que no le importo a nadie, una mentirosa que ni siquiera sabe defenderse.
Me he convertido en una mujer que prefiere estar sola y en silencio para no molestar a los demás.
¡Yo que siempre dije la verdad ahora nadie me cree!
¿Oportunidades? Las tuve y muchas. Amigos y familia también. Pero los años pasaron y poco a poco fui perdiendo todo. Vivo una realidad muy triste y eso es mi desgracia.
Hoy, cuando me faltan unos días para cumplir mis sesenta y cuatro años, siento un gran vacío, como si mi mente estuviera nublada.
La música sigue sonando alegre como antes, pero para mí ya no es lo mismo. El tiempo pasó y los desencantos se sumaron… fueron muchos… demasiados.
Total … ¿para qué seguir hablando si me dicen que nadie me va a creer? ¡Soy una mentirosa que quiere simular lo que no es!… ¡ja ja! Es preferible reír que seguir llorando ¿no?
¿Será «el vino rojo» , «el red wine» de la canción que de tanto escucharla y nunca tomarlo me hace decir estas cosas?
Me mataron de golpe y para siempre un día, hace poco, clavándome un puñal de duras palabras en el fondo del alma.
Creo que por fin llegó la hora de tomarme toda la botella del red wine. Elijo un vino tinto, VUDU, muy uruguayo. Un «olvidapenas» para emborracharme antes que yo también cumpla los sesenta y cuatro como Astro, intentando dejarla vacía antes que él termine de cantar su canción.
Al menos, inspirada en su música, podré contar lo que me está sucediendo, escribiendo a mi manera como hace tiempo lo hago, segura que esta vez nadie lo va a leer.
Rojo, vino rojo,
mantente cerca de mí.
No me dejes estar sola,
está rompiendo en pedazos
mi deprimido, deprimido corazón.
«Red red wine»- «Vino tinto»
UB40
*Esta canción fue escrita, interpretada y grabada originalmente por el cantautor estadounidense Neil Diamond en 1967. Está incluida en el segundo álbum de estudio de Neil, Just for You. La letra se narra desde la perspectiva de una persona que descubre que beber vino tinto es la única manera de olvidar sus problemas.
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