perder la inocencia
El columpio crujía bajo mi peso, como si también estuviera cansado de los años. Solía pasar tardes enteras balanceándome mientras buscaba formas en las nubes. En aquellos días, el mundo era sencillo: el cielo azul, las risas de mi madre en la cocina, el aroma a lavanda en el patio..todo parecía eterno. Pero el verano...