Nuevo principio activo descubierto el cual afecta directamente al cerebro proporcionando una sensación permanente de bienestar. Los supuestos beneficios están relacionados con la activación de determinadas zonas del cerebro encargadas de la sensación de alegría y euforia, permitiendo así alargar dichas sensaciones en el tiempo.
Los expertos determinan que para una eficaz y eficiente aplicación se tendrá que administrar dicho principio desde la más temprana infancia hasta bien entrada la vejez alargándolo todo lo posible —siendo lo ideal hasta poco antes del fallecimiento—. De esta manera será un complemento de uso continuado y sin interrupciones lo cual «es un bajo precio a pagar por una vida llena de sonrisas» anuncia uno de sus descubridores. Lo catalogan como el «descubrimiento más feliz de todos los tiempos», garantizando el final definitivo de cualquier sensación de malestar y desasosiego. La industria farmacéutica ve con muy buenos ojos este hallazgo y cubre de alabanzas el trabajo de estos expertos en felicidad, como los han catalogado. El colectivo coaching toman nota y anuncian futuras aplicaciones de dicho medicamento.
Pese a la afirmación de los investigadores de la casi inexistencia de efectos secundarios, voces contrarias a su comercialización postulan que «no se pretende otra cosa que el enriquecimiento de las farmacéuticas a costa de la dependencia de por vida a dicha pastilla» En la misma línea crítica aducen determinados sociólogos y psicólogos que a largo plazo dicha aplicación continua supondría un estancamiento humano: «aprender y madurar no es otra cosa que dejar atrás la ingenuidad de pensar de que el mundo solamente estaba hecho para mi y mis deseos» afirman. Recalcan también la posibilidad de que la sociabilidad se viera interrumpida por resultar una «molestia». Estas declaraciones han sido consideradas como excesivamente pesimistas y exageradas por parte del equipo que cubre la investigación tachándolos de «pesimistas contrarios al progreso de la felicidad individual» y que si dicho malestar permanece «yo mismo les recetaré una buena dosis de alegría» afirma un coaching experto en felicidad.
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