Clase de Geografía Humana

CLASE DE GEOGRAFIA HUMANA

  Expongo en este medio, como me han pedido, una de las últimas clases que impartí en el Instituto de Educación Secundaria donde trabajaba hasta mi inesperado despido.

CAYUCO

  El cayuco es una canoa de fondo plano construida por el vaciado de un tronco de árbol, a veces un tronco de palmera, normalmente una frondosa de madera blanda como la ceiba. El vaciado puede hacerse mediante herramientas metálicas como hachas, machetes o azadas.

Debido a la difusión que proporcionan los medios, los cayucos son famosos en España. Los emplean los inmigrantes ilegales para acceder, intentar acceder, a Europa, a través de Canarias desde Marruecos, Sahara, Mauritania y Senegal.

Ayer llegaron 9 cayucos a las Islas Canarias, con un total de 647 personas, 72,11 por embarcación, cifra que supera el récord del pasado sábado cuando arribaron 456 a bordo de 6 embarcaciones, lo que supone 76 inmigrantes por unidad flotante. Si bien, la densidad hombre/centímetro cuadrado (rodilla con rodilla, sentados a modo de trenecito) ha descendido ligeramente, el total absoluto va creciendo de manera progresiva.

Recordemos que a mayor densidad mayor riesgo de hundimiento.

Los cayucos al ser demasiado frágiles o pequeños, o sobrecargados (rodilla con rodilla, sentados a modo de trenecito, 40, 70, 115, 160 varones, mujeres, mujeres embarazadas, jóvenes, se ha identificado a algún menor) perecen con frecuencia en mar abierto.

        Nuevas propuestas de estudio:

– Calculen ustedes la velocidad de hundimiento de un cuerpo de peso medio, desde la superficie del mar abierto al fondo, al fondo abisal.

– Estimen ustedes la densidad de muertos por metro cúbico en el mar, en este mar nuestro.

– Imaginen, dibujen nuestro fondo marino después.

– Concluyan con una observación distante sobre los supervivientes.

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 Transcribo la redacción que recibí de una de las alumnas:

Los africanos que sobreviven a sus travesías en cayucos caen sobre el centro de Madrid con sus paracaídas blancos. Despliegan sus telas con cuerdas que recogen rápidamente para salir pitando cuando viene la policía que está obligada a salvaguardar el orden y a los comerciantes del lujo.

Ellos no venden lujo, ellos venden la imitación del lujo que nos podemos pagar los que tenemos imitación de sueldo, de buen sueldo. Nosotros, a los que los bancos envían mails, SMS, avisos, cartas, ofreciéndonos préstamos. Saben que somos esos cientosdemilesque si queremos un pequeño sueño lo tenemos que pagar a plazos (confianza troceada, capricho pequeño en pequeñas cuotas, en cómodas cuotas como ellos les llaman, los bancos, nuestros dueños).

Los africanos que sobreviven a sus travesías en cayucos caen sobre el centro de Madrid con su mercancía de pacotilla para los clientes de pacotilla que sólo podemos pagar al tun-tun, a tocateja, lo caído del cielo en paracaídas blancos.

Micaela Quesada

Mayo de 2020