La conciencia en viaje

Si pensás en responsabilidades, los días son eternos. Cuando disfrutas, el tiempo no alcanza. La historia conocida. La conclusión inevitable: el ser humano organizado en sociedad. El consuelo: un mínimo descanso para quienes cumplieron con su responsabilidad, aunque con la limitación económica que en cualquier parte del mundo te hace sentir más cansancio, marginalidad, resentimiento. Si no puedo ser como aquel ser humano organizado, entonces no existen más que los días eternos que en principio mencioné.

Hace mucho tiempo que sufro, pero poco que entiendo porqué. El factor que todo lo modificó fue la conciencia. Por eso me alimento como lo que soy, un ser humano de manual. Al igual que vos, necesito trabajar, dormir, vestirme, descansar. El costado inaceptable, el que piensa sin parar, el que se sienta a escribir esto, se alimenta de otro modo, pero eso quedará para una futura oportunidad. Y vos, ¿qué relación tenés con tu conciencia?