Vivo en una bombilla.

Me adentro en mi bombilla, la corriente no pasa y se encuentra oscura, yo no ilumino a algo, yo muero en la desesperación y bebo el alcohol de la desorientación, mis gritos no aportan, grito hacia el interior pero es tan agudo que termina explotando mis oídos, las manchas de mi pared son formas imaginarias de algún objeto, solo imagino un mundo donde me sienta mejor, alguien encendió la bombilla y la luz amarilla apareció, tan fuerte y radiante que a mis ojos mato, las heces de los moscos pegadas desde el exterior logro observar, vivo en la bombilla de la soledad. Es tan pequeña y aquella habitación tan amplia es, quisiera estar afuera y conocer pero mi corazón se niega a perder lo que consiguió y es aislarse de todo para no sentir dolor. En esta bombilla no existe el amor.