(lo infraordinario)
Erase una vez un pueblo de gentes alegres, tiendas y calles concurridas.
Después, anegado por el pantano se sumergió en el olvido.
Ahora, con la sequía, emerge pidiendo justicia.
(lo infraordinario)
Erase una vez un pueblo de gentes alegres, tiendas y calles concurridas.
Después, anegado por el pantano se sumergió en el olvido.
Ahora, con la sequía, emerge pidiendo justicia.
OPINIONES Y COMENTARIOS