Aferrada al pasado. 
III El viaje que aún no he hecho «Cuando mi abuela murió, se fue todo con ella».
Dejé de comer todas las comidas que ella preparaba. Las rosquillas, el pan blanco, las patitas de cerdo con pipianes, los nacatamales, las sopas con torta de pescado seco y más..Pensaba que si las comía, la tricionaba, no encontraría su sabor y no me iba a trasladar a mi niñez, al tiempo que estábamos con ella. Nunca la dejé ir y siempre que la recuerdo lloro! Este gran amor que siento por ella, me tiene aferrada al pasado.
OPINIONES Y COMENTARIOS