«Lluvia»

Una, otra y otra tras la otra,

cayendo, chocando y huyendo

sobre mi llorón tejado.

Rechinan, gotean y rebotan

sobre mi hogar mojado

las gotas, constantes que caen

desde el cielo inundado.

No para el rugir grisáceo

del cielo roto retumbando,

Y la gotita insistente

deja mi mente divagando.

Una, otra y otra tras la otra,

rechina, gotea y rebota

el chorro de la nube rota,

suplicando en lo nublado

que no pare la lluvia ahora.

«Relámpago»

Vi a las paredes iluminarse

con los fugaces resplandores de la noche,

y como si se tiñeran de estrellas,

en unos pocos segundos

los instantáneos paisajes

con la penumbra, se volvieron moribundos.

«Hojas»

Voló suave la verde

sobre el leve viento veraniego,

ondeándose vulnerable

entre vagos, movimientos

invisibles y volátiles,

la irremplazable e inigualable

envolviéndome en sosiego.

«Tus huracanes»

El viento se llevó tus palabras,

las reacias que escuché cortadas

entre la ventisca salvaje

de nuestra ultima conversación.

Tus ráfagas nevadas de recuerdos

que al parecer solo atesoré yo,

me golpearon tan duro y de frente

que casi rompiste mi corazón.

Desgarraste nuestras raíces,

esas ultimas para nosotras,

justo antes de perderlo todo

en esta inminente devastación.

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