Ya no lo quiero intentar

En verdad tú eras quien ponía mi cielo azul, cuantas veces no quise gritar tu nombre a toda voz. Solo asienta tu cabeza si los planes han cambiado, por favor. Incluso mi orgullo parece ser una alfombra mientras sonríes parada en ella. Si lloras, prometo que me iré al amanecer. Aún tengo una dosis de amor, sólo déjame hablar. Tú me das aire para respirar, y parece mentira, pero sé que sientes algo más. ¿Será odio? Perdóname si me resisto a verte lejos. Ya nada es igual, todo lo que no te dije y lo que estuvo demás. El tiempo vuela y van tres días sin verte. Diez días. Ya son mil días sin verte y me sigues engañando al sonreír. Hoy quédate. Como te extraño, ¿Serán los años? ¿Qué nos apartó de nosotros? Sigo escribiendo y tu soñando. Abre tus ojos, no dejes todo atrás. ¿Por qué un final feliz? Prefiero una historia sin fin… Volvamos al principio en Frías. Niegas sin razón, sigues siendo mi interruptor de la pared. No sabes lo hermosa que eres. Un poco de tiempo contigo es todo lo que necesito, y es todo lo que puedo tomar. Sigo escuchando lo último que dijiste.