Ramón Cano Campillo.
Calle de las almas libres. s/n
“Llevo tu luz y tu olor por donde quiera que vaya” y sí…eras cantor y embustero, gustándote el juego y el vino…con alma de marinero…
Querido papá, ese viaje a lo largo y ancho del mediterráneo que tanto deseaste durante toda tu vida realizar de puerto en puerto y que no pudiste llevar a cabo…este viaje te lo dedico a ti, llevándote a cada rincón conmigo, pisando cada piedra de estas antiguas y hermosas ciudades de viejas culturas que nos hablan, pueblecitos de barquitas marineras y arenas blancas, voy con tu paso firme en mi recuerdo y los ojos bien abiertos, para colmarme de todo lo que ambos amamos y anhelamos juntos conocer, para llenarme de cada contorno en fachadas blancas, colores caprichosos en su cielo, olores a especies y flores, gentes y cultura. Para llevármelas conmigo y podertélas contar algún día, no solo a través de estas letras sin destino más que en el de mi alma…esa alma que aún hoy acunas en la barca que conforman tus brazos rodeándome desde que nací…y donde antes encontraba el sueño y ahora, te encuentro a ti en ellos… Te amaré siempre.
OPINIONES Y COMENTARIOS