Poesía instantánea.

I-El velero:

Cuando me dices «te quiero»,

me siento como un velero

que se aleja en el mar.

Tu aliento queda lejos

y no me puede alcanzar.

Otras veces el «te quiero»

atrae al pobre velero.

Nuestras miradas se cruzan.

Yo vengo

y tú ya estás.

II-La pantomima:

Toma un beso,

me sabe a hueso.

Ya vendrás,

de lo mío pedirás.

Toco lo hueco,

detrás hay más.

No me lo das

pero me pides

que sea sílfide.

Esto es un trato

y así todo el rato.

Nos mira el gato

y aún hay más.

No quiero que pares

llegó mi oportunidad.

Dime qué quieres

y yo haré con ello

un collar para mi cuello

que no me quitaré jamás.

Toma uno, toma más.

Todos ganan y tú te vas.

III-Niño:

Eres pequeño y risueño.

Cuando te despiertas

se abren las puertas.

Paso las horas observando,

a tus ojos escuchando.

Tu gesto me seduce,

ya no tengo valor.

Tu llanto me dice

que no tengo corazón.

Te llamas niño

que es parecido a cariño.

Yo te daría un sol y una luna.

Tu me das…

ser como ninguna.

IV-Sola:

Quito el precinto.

Se vacía el recinto.

Sola.

Ser mujer es nacer para perder.

Ellos.

Batallas ganadas,

banderas rasgadas.

Ellas.

Mirando al puerto,

saben que está muerto.

Sola

Triunfa lo sencillo

como un anillo.

V-El huerto:

Me bebería un río.

Me bebería un mar.

Si así consiguiera

la felicidad.

Saberte cerca me aterra,

no sé si estoy dispuesta.

Son tus gestos conocidos

los que bloquean mis sentidos.

La vida no es placentera

si tengo que viajar en patera.

Cuando llego a puerto

me he muerto.

Todo porque me miró un tuerto.

Ahí te dejo mi huerto.

VI-Sin nombre:

Me voy de tu lado.

Algo ha pasado.

Te has congelado.

Imagino qué dirás.

Ya no pienso más.

Lo tengo que parar.

Luego vuelvo a verte.

Todo es diferente.

No se parece a lo que merece.

Tienes otra identidad.

Yo sólo salí a pasear.

VII-La huella:

Has heredado mi risa.

Solo por eso, te mereces un beso.

Caminas como tu padre,

también tiene su parte.

Lo demás es una amalgama,

mezclado en una palangana.

Linaje y azar.

Esa sombra no es la tuya,

la reconozco al pasar.

VIII-La clave:

Entre lugares del pasado

hay miradas perdidas.

Caminar es más fácil

si llevas cogidas de la mano

las miradas del tiempo.

IX-Gotas de sueños:

Con una gota de sueño

crearía

un mar,

un río,

un cielo.

No estoy sola

que los demás

me miran,

me señalan,

me llaman loca.

Y volaré

y moriré sola

y soñaré.