Qué hora es
No son ni siquiera las 12 del mediodía y ya tomé 4 tazas de café y tres malas decisiones
un cigarrillo y leí un poema de Bukowski
trato de encontrar un silencio en el último disco de mi banda favorita y una canción que me ayude a llegar a las 3 de la tarde
doce menos 20 y ya me perdí de nuevo
hoy.
Espero
Los días van cambiando como cambio yo a la vez que las horas también cambian por efecto del tiempo
¿Será también el tiempo el que me hace cambiar?
o los días
o las horas
minutos
segundos
todos
ninguno
¿Seré yo quien me hago cambiar?
más allá o un poco más acá
¿Habrá cambiado mi destino?
o sigue siendo él mismo
o no
o sí
ya volvió a cambiar
y yo con él
o sí
o no
más allá siempre o más acá nunca
no sé. O sí
supungo
espero.
Homo sum
Homo sum: humani nihil a me alienum puto
sufro
gozo
lloro
río
porque soy
opuestos que se reflejaban dentro mío y me hacían ver lo que fui
me ocultan eso de lo que soy y no soy capaz
dos partes de un todo que no va a ser uno porque así soy
no estoy partido ni separado
complementos de un todo que no va a ser jamás uno porque desde siempre y hasta siempre fue y será [ seré ]
miles.
Abril y la luna llena
Si la mañana tarda en llegar no es su culpa.
Así es mejor para los amantes,
quienes sueñan con no amanecer en la ciudad para no volverse,
de nuevo,
esclavos.
Se quedan bajo las sábanas un ratito más, enredando sus piernas,
formando raíces de las que se sostienen para no caer ni salir volando.
La mañana está tardando demasiado pero no importa
porque las cosas han cambiado de lugar,
de forma,
de espacio.
Despacio
esos amantes vuelven a encontrarse y se tocan.
Con los dedos dibujan sus contornos,
figuras sin sombra que se reflejan en sus propios ojos.
El miedo se ha escondido en el armario porque siente terror ante semejante acto de pasión.
Ahí donde la piel se tiñe de blanco, llega un beso.
El lugar exacto.
Los amantes juegan a ser uno durante la mañana,
la tarde,
y la noche.
Iluminadas por la luz de la luna, criaturas de otros mundos corren por la habitación
y festejan.
Las cosas siempre cambian en abril.
Es mejor vivir en abril porque Abril sonríe y llora con la misma facilidad.
Siguen acostados, escondidos, y en silencio.
Nunca un silencio dijo tanto.
Sus manos se encontraron a medio camino y, con esas mismas manos, crearon la paz que tanta falta les hacía.
Abril hace que las cosas sean bellísimas
Las cosas cambian.
Y ahora,
Abril, estás durmiendo en mi lado de la cama.
Luces de Navidad
Cuando por fin quiten las luces de Navidad solo quedará el frío
se ha hecho tarde y cada vez estoy más lejos
lo sabés más que cualquiera en esta ciudad
cuando por fin quiten esas luces de Navidad me quedaré solo
lejos
con este sol que se apaga.
Recurso poético
Hoy me siento mejor
capaz de convertir una hoja seca tirada en el suelo en un recurso poético de la vía pública que no muchos pueden ver
y así con todo
menos la nostalgia.
Días tristes y de calor
Los días tristes y de calor me desgastan
erosionan capa a capa mi cuerpo
me hacen más pequeño de lo que ya soy
pero siempre necesitamos días tristes y de calor para sacarnos de encima lo que nos ensucia
lo viejo
lo roto
además, al día siguiente, el frío y una sonrisa suelen ser suficientes para volver a empezar.
Opuestos
Con el tiempo, cae lo que en un principio es fijo
se derrumban los gigantes que siempre estuvieron de pie
se hunden los que volaban
los libres atan sus propias cadenas
nadie es todos
y nada se hace algo de eso que siempre y nunca fuimos
y sin embargo, somos esto y aquello que se ve pero sigue escondido
tan escondido que está a simple vista
¿No lo ves?
los opuestos no existen en ningún mundo.
Sentimientos de domingo
Estoy lleno de sentimientos de domingo que me llevan,
me traen,
alzan y dejan caer
es un círculo constante
un ciclo
la nostagia ya no es buena compañera
me encierran sentimientos que parecen ser eternos
sentimientos de domingo que sólo encuentran final en el lunes.
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