OMNIPRESENTES A LA VELOCIDAD DE LA BANDA ANCHA

Comunicación + Tecnología = dios

Sin dudarlo la comunicación hace parte del lenguaje, del verbo, de la palabra expresada, visualizada y  materializada por tal razón el hombre a transformado y modificado la sustancia de  Dios  a través de la tecnología facilitando de manera saturada el poder de adquirir todo sin la pausa de la ausencia, la omnipresencia manifestada en nuestra existencia

Estar presentes en todas partes a la vez,  el verbo presente frente a los ojos de los feligreses, con el libre albedrio de construir una torre de babel que alcance los pies de Dios, sin la confusión de los dialectos por que tenemos la facultad de un traductor incorporado por si el Dios celestial nos quiere confundir.

Había una vez un hombre que quiso estar en todos los lugares del mundo; en todos los bolsillos, bolsos, carteras, billeteras, en los salones de clase, en los hospitales, bancos, cementerios, en las selvas mas recónditas, quiso estar en todos los rincones a los que pudiese llegar y otorgarnos al mismo tiempo el don que solo Dios posee, la omnipresencia.  «Cuanto espacio vacío encontrara sin limitaciones», es tanto su poder que puedes estar en todos los continentes hablando con millones de personas al mismo tiempo, todo digital, de la mente a los dedos y de los dedos a las letras, en todo los idiomas, con imágenes reales y táctiles.

A Dios todo poderoso no lo podemos ver, ni tocar, solo en metáforas encontramos la respuesta a su existencia, el hombre con la gran duda creo este nuevo dios tan real y material, el cual existe sin necesidad de fe, si, hablo de religión, por que Dios o dioses los hemos sostenido por medio de la religión  que como pulpos atraen millones de masas para un bien común, pero este dios tecnología al cual todos adoramos por su infinito conocimiento por que me hace dios,  mas no hijo de Dios. A diferencia de las otras religiones, la tecnología como en la nueva era podemos ser dioses omnipresentes a la velocidad de la banda ancha. 

Después de muchos años la religión cae en el fanatismo, así mismo sucede con este nuevo dios, le ofrendamos nuestra vida, sin darnos cuenta de la evolución o tal vez consecuencias de estos actos.

Dios tecnología que diariamente nos consagra y como rutina matutina  en vez de rezar un padre nuestro, encendemos la biblia digital, para encontrarnos con nuestro gran ego y ser Dios por unas horas.

El hombre que quiso ser Dios y nos quiso hacer dioses, no conforme, creo no solo un mundo, si no un espacio sideral en el cual navegamos diariamente por millones de mundos paralelos, viajando por el maravilloso mundo de las ideas hechas  ha imagen y semejanza del hombre,  la idea como autora principal de todo lo que existe por medio de la comunicación y la tecnología la podemos convertir en lo mas infinito dentro del tiempo y el espacio.

Pero el problema de todo los dioses es que sin la energía no pueden existir. Entonces no podemos subvalorar estas dos palabras dios  tecnología las cuales sin nuestra energía o sin la energía eléctrica, térmica, química, nuclear, radiante, cinética, solar  etc. no podrían existir, es tan sencillo si desconecto mi computador en este instante de seguro este dios ya no existe.

A través  de los tiempos la velocidad acompañado nuestro ritmo, como la tecnología en el transcurso de los años y por medio de nuestra herramienta, las manos codificamos los procesos que antes eran de años a segundos.

Concluyo con unas cuantas preguntas :

A donde queremos llegar?

Que quiere hacer este hombre a parte de ser Dios?

Si era tan sencillo vivir en la desnudes del edén, que paso realmente ese día en el que Adán y Eva decidieron pensar?

Entonces la historia del hombre que quiso ser Dios y nos quiso hacer dioses termina con un simple  “click».