POR SI ACASO

Vaya pronto que tiene papá. Sé que no tardará ni un minuto en pedirme disculpas pero antes de que vuelva debo tomar una decisión. Tras darme un sonoro bofetón sale alterado del comedor dando un portazo y dejándonos ahí sentados con la boca abierta. En ocasiones parece un auténtico hombre de Cromagnon. Reconozco que con la voz fuerte y amenazante me advierte varias veces que no juegue con el móvil en la mesa. No puede verme toqueteándolo.

-¡No es para tanto mamá! ¡Que más le da si juego una partidita entre plato y plato!

-Tu padre ha tenido un mal día cariño, no se lo tengas en cuenta. Hoy es su cumpleaños.

Al final de la cena le damos los regalos pero yo decido no darle el mío por si acaso. Le he comprado un Smartphone de última generación.