“FINAL FELIZ. NOVELA NEGRA MAFIA CHINA Y CORRUPTOS”
(Una novela que nunca se publicará).
DEDICADO: a mis tres mujeres.
ADVERTENCIA:
Las expresiones obscenas, los comentarios xenófobos, el lenguaje duro, los modismos, expresiones coloquiales o jerga deben de entenderse por el/ la inteligente lector/a dentro de un contexto puramente literario de Novela Negra.
Las ideas o comentarios que algunos personajes expresan en el desarrollo de la trama de la novela no representan necesariamente la opinión del autor y están enmarcadas en el contexto puramente literario de una obra de ficción.
2. “El garrote es una razón de madera” (Sócrates).
Él: -Ya sé lo que tengo que hacer.
Ella: -Tú siempre sabes lo que tienes que hacer.
Él: – Y tú siempre intentas sonsacarme.
Ella: -Es cierto.
Él: – Soy detective.
Ella: -…y es tu trabajo.
Él: -Exacto.
Ella: -Y yo no puedo nunca dejar de intentarlo.
Él: -Prueba otra vez.
Ella: -No.
Él: -Ten cuidado.
Ella: -Tú también. Lávate, hueles a sangre.
Él: -Tengo que irme.
Ella: – Ámame con ardor en el peligro.
Sexta planta del Palacio de Justicia, en Calusa. Al otro lado del río. Edificio color colilla. Despacho lleno de legajos. El Fiscal lleva trabajando desde las 8, como un reloj suizo. La gente piensa que él disfruta mandando gente a Trullolandia a piñón fijo. En realidad él piensa que:
“En las cárceles nunca tienen oportunidades los que merecen una oportunidad”.
ODIA AL DELITO, COMPADECE AL DELINCUENTE.
De las paredes cuelgan títulos Universitarios. Doctorados. Foto con el Rey. Condecoraciones. La Biblia en pasta. Cuatro metros cuadrados repletos de libros de Derecho Penal. Puerta de roble con éste cartel.
ANGEL DE AVALOS
FISCAL ANTIDROGA.
“Ven de vacaciones: te irás en libertad con cargos”.
El setenta y cinco por ciento del hachís de Europa se detecta y decomisa en España -medita el Fiscal Antidroga.
Está rodeado por su equipo de colaboradores de la EADA. El grupo de élite de la Guardia Civil dedicado a la lucha antidroga. Lo mejor del Instituto Armado. Llevan tres de ellos 48 horas sin dormir. Viven de cafeína y emparedados resecos. Expertos en comida recalentada.
-Somos Campeones de Europa en Hachís, -dice el Fiscal, con pesar. Y medalla de Plata en Coca, -dice a su equipo.
Levanta su cabeza patricia, impecablemente peinada con escuadra y cartabón.
-Y la Cocaína penetra en todos los estratos de la sociedad. Ya estamos entre los cinco países europeos con máximo consumo de anfetaminas y drogas de síntesis. En Ibiza se colocan con pirulas y pastillas que ni se conocen en otras partes del mundo, como el Nexus o el Dragon Fly. ! ¡Esto es una maldición! Vaya un año que llevamos. ¡¡¡Este país se ha ido al carajo!!!
Sus hombres asienten. Le seguirían al mismo Infierno sin vacilar. De hecho, eso es lo que hacen todo el año. A tres de ellos les huelen las patillas a azufre. Cumplirán con su deber, obedecerán hasta morir.
El Fiscal está orgulloso de sus hombres, que le veneran
Y confundirían al mismo Satanás.
-¿Cómo no os he detectado?
-Veníamos disfrazados.
-¿De qué?
-De hijos de puta. Estás detenido, Satán. Acompáñenos al talego; cabo Romerales, léale sus derechos.
Todos los días, sus agentes EADA, camuflados como heroinómanos y hechos unos pintas, detienen camellos, muleros y traficantes de poca monta. Pero el Fiscal de Ávalos sabe que es sólo la punta del Iceberg. Hace unos minutos le han informado de la movida de anoche. Y de los dos tipos orientales detenidos con diversas sustancias. El Fiscal sabe que se enfrenta a una hidra de siete cabezas. Imposible de erradicar, salvo voluntad política de acabar con las mafias.
En el último “Caso Salmonete”, se detuvieron por blanqueo de dinero, tráfico de drogas y otros delitos a Wen Ha, alias “Luis el Yeyé”, Haio, Yuexiong, Kadn y al cabecilla, Gao Ping. Al lugarteniente, también llamado “Luis Ye-Yé” le encuentran 140.000 euros y el libro contable con las cuentas y transacciones. El Yeyé tiene más de treinta años de residencia en España dedicado a negocios de todo tipo, algunos incluso legales. Ojo, que como imputados también estaban, al menos inicialmente, el conocido actor de cine porno al que la polla le llega a las rodillas y tres parientas de la Nobleza de España. La implicación de las amigas lejanas de la Realeza dura 24 horas antes de ser eliminadas de todas las publicaciones, hasta las electrónicas. Y como decía Mayra en el “1,2, 3 responda otra vez”: “hasta aquí puedo leer”. Secreto de Sumario. Me duele la pelvis de tanta ansiedad.
El Fiscal tiene su despacho lleno de fotos de narcos entalegados. Viste traje azul raya diplomática; de tres piezas. Chaqueta, chaleco y pantalones. Camisa blanca de cuello duro. Cabellos blancos peinados con raya y gomina. Le falta un monóculo para parecerse a un general prusiano arengando a sus tropas. Un Guderian animando a sus soldados y dándoles cera a las tropas francesas en Sedan. Patricio romano. Porte señorial. Ojos azules, limpios y brillantes.SED LEX. DURA LEX.
-Buen trabajo el de anoche, les dice De Ávalos.
La sonrisa de sus hombres es contagiosa,-ahora ir a dormir un poco, -les dice.
Sabe que tiene poca dotación de gente. Necesita refuerzos.
Hace una llamada y pide refuerzos al Comisario Jefe Caturla. Sus hombres tienen que dormir. Tienen los ritmos circadianos a la virulé. Caturla, das Komissar, le promete ayuda.
-Mandaré a dos de mis mejores hombres, dice.
El Fiscal imprime a sus hombres el sentimiento de lo necesario de su trabajo. Es capaz de sacar lo mejor de cada uno de ellos. Sus órdenes son claras, sencillas. Duro como el corindón, pero humano y empático. ODIA AL DELITO.COMPADECE AL DELINCUENTE. Sus armas son tres libros: El Código penal, La ley de Enjuiciamiento Criminal y la Biblia.
El Fiscal sospecha de que la corrupción ha entrado de lleno en la ciudad. No se entiende que les hayan desaparecido en sus narices seis toneladas de Cocaína que estaban pendientes de ser destruida. Es un “inside job”. Un trabajo desde dentro. ¿Cómo podían saber exactamente en qué nave estaban los fardos de droga? ¿Cómo sabían que iban a ser destruidos en cuestión de horas? ¿Cómo puede una pequeña camioneta entrar dentro del mismo Puerto sin ser detectada? ¿Por qué no hay Policía Portuaria a las cuatro de la mañana? Los intrusos entran, pasan el control de la barrera portuaria. Abren la puerta del almacén con una ganzúa de tungsteno y pillan los fardos con droga. En media hora, salen de najas. Seis toneladas. Valor de puesta en el mercado, dependiendo de las fluctuaciones. Ponle a 50 euros el gramo. Calcula. Según el FBI: 140.0000 millones de euros que llegan a paraísos fiscales por droga cada año. Las cifras superan a un hombre honesto. ¿Por qué no han quedado imágenes grabadas en las cámaras? ¿Quién está detrás de éste golpe? ¿Por qué hay una caída en el sistema informático? Demasiados errores. El Fiscal de Avalos pone la mano en el fuego por los Guardias Civiles del grupo EADA. Sabe que puede confiar en ellos a muerte. Pero no lo tiene tan claro con otros estamentos. Y sobre todo una información clave: ¿Cómo sabían que la droga decomisada iba a ser destruida en cuestión de horas?
Esto echa un pestazo a corruptos que tumba de espaldas. No sería la primera vez que un capo chino de la droga se va de rositas. “Remember Caso Emperador”, con el Chino Gao detenido y luego, por un tecnicismo judicial, se le libera. “Voy a por tabaco, Señoría, ahora vuelvo”, dice el chino, que vuelve a creer en los Reyes Magos. La última vez que lo ven está en Las Vegas, junto con un clónico de Elvis Presley, moviendo las caderas y jugando Black Jack juntos.
Nos han hecho la jugada de la cabra. Seis mil kilos de cocaína. Esto apunta directamente a gente con acceso a los sumarios y a las Actas de destrucción. Magistrados Jueces, Secretarios Judiciales, Auxiliares de los Juzgados, Agentes Judiciales. A eso súmales policías portuarios, funcionarios del PIF (Puesto de Inspección fronteriza), estibadores autorizados, vigilantes jurados y técnicos de aduanas. ¿Uno? ¿Dos? ¿Media docena? Usaron una camioneta pequeña. Para llevarse los fardos con la coca. Curioso: no hay grabaciones cuando penetra la furgoneta en la dársena. No hablamos de un robo al descuido, dos barritas de hachís que se pierden en una Comisaría llena de gente. Hablamos de SEIS toneladas. Un plan cuidadosamente establecido. Curiosa caída de tensión en los sistemas de vídeo vigilancia. ¿Cuánto puede valer seis mil quilos de coca del 80-90 % de pureza a precio de mercado? Lo suficiente para comprar voluntades. CRAAAAAAK. ¿Lo escuchas? Es tu conciencia profesional y tu dignidad, que se rompe y se va por la cloaca. Has aceptado un soborno. Bestachung. Soborno. Mordidas. ¿Cuántos están implicados? La corrupción es como una mancha de aceite.
El fiscal Antidroga mira un amanecer resplandeciente desde su despacho. Anticípate a los contrarios. Acorrala e intimida. Solución: Pon micros. Barre frecuencias de radio e intenta discriminar, entre toses eléctricas, el rastro de los ladrones. Intercepta ondas cortas. Sobrecarga los circuitos. Intimida legalmente, todo legal. Usa las cámaras de vigilancia de yates y embarcaciones próximas al lugar de los hechos. Usa a los chivatos. Sospecha de tres magistrados. No concuerdan sus trenes de vida con los 4200 euros que gana un Juez con diez trienios de ejercicio profesional. Una minucia para la mafia China. No se explican yates, viajes a Islas Caimán, Belice y otras prebendas. El Fiscal antidroga ha tomado la decisión de usar micrófonos para barrer el espacio radio ecoico y someter a un discreto seguimiento a dichos magistrados.
Mira a su equipo. Luz cenital amortiguada. Son cinco agentes de la EADA, al mando del sargento Farnesio de Esteban. La mayoría provienen de una juventud airada. Sus nombres, como “los Trece de la Fama” de Francisco Pizarro en la Isla del Gallo, son anónimos.
-Señores, dice De Ávalos, el último boy-scout, -estamos perdiendo la batalla contra las drogas. Hay que darlo todo.
Les pide novedades. No les aprieta más de lo justo. El Fiscal es un hombre prudente y sereno. Transmite un profundo sentido de la Justicia. Se empapa de los sumarios y se lee todos los informes. Impregna la habitación con su Estatura Moral. Anima a los melancólicos, refrena a los imperiosos. Impetuosos, perdón. Controla, modera. Deja estela.
-Estos tipos traen la melánge, la sustancia base, la efedrina. El polvo naranja.
-¿La Melánge?
-Efedrina. La llamamos así en metáfora con las novelas de la saga Dune, de Frank Herbert. A partir del polvo naranja, los chicos malos la transforman en metanfetamina. El polvo anaranjado lo traen molido de China. La melánge, la especia. Naranja embriagadora. Luego el polvo naranja lo procesan aprendices de brujos orientales en la bañera de un chalet. Y sale el cristal. Ale hop!! Sacamos el crystal de una chistera y ya tenemos zombies babeando y pidiendo otra dosis.
Les enseña el informe del FBI y de la Agencia Europea Contra las Drogas, que avisan de que España es el Paraíso de los narcos.
Les explica el tema:
-Los chinos cultivan el arbusto, una mata, la Efedra equisetina en grandes extensiones, como el sorgo o la soja. Luego recogen la efedrina en forma de polvo naranja, pegajoso. La traen en barcos. Tenemos un Puerto con casi tanto movimiento como el de Rotterdam. Cada barco llega con cientos de contenedores. Cada capsulita con efedra mide 2 centímetros. Muy difícil de detectar-
Luego la fase final. La transformación por el método “nazi” en metanfetamina. El llamado “cristal”. La droga que transforma a hombres en vampiros. Ese último paso se hace ya en Europa.
-En un laboratorio clandestino. La cocinan aquí, para abaratar costos, -dice con gesto serio.
El Fiscal Antidroga está convencido de que en Calusa hay uno o varios de éstos laboratorios clandestinos. En un país hecho para turistas, cualquiera puede camuflarse como turista.
-¿Dónde tendrán el laboratorio clandestino?, pregunta a sus hombres. -¿Dónde?
El Ministerio Público sospecha de que las bandas usan para “cocinar” el crystal una serie de sustancias llamadas precursores. El fósforo rojo, el Piperonal y otros nombres raros.
-Son como los ingredientes para hacer una buena paella, remeda el sargento EADA, Farnesio. Se pagó un Curso en la DEA de su propio bolsillo. Es la mano derecha del Fiscal. Tiene el cuello como un toro y las venas se le inyectan al hablar. Parece un carbonario incitando a quemar escuelas en una tenida masónica.
– Exacto: Para detectar los laboratorios clandestinos tenemos que ir a vigilar los precursores, -dice el Fiscal.
– Podrían usar también el Vicks vaporubs robándolo o sacándolo de farmacias en cantidades brutales, extrayendo la Pseudoefedrina y luego cocinándola a Efedrina, pero les saldría carísimo y necesitarían más de 200 envases para sintetizar un gramo, por lo que no les sale rentable.
El fiscal toma nota de pedir un barrido de los albaranes de compra de todas las industrias que vendan agentes precursores, como el piperonal o el fósforo rojo, que se puede comprar libremente en droguerías y mayoristas. Todos los que compren más de cincuenta gramos son sospechosos. Cursa las órdenes oportunas.
–Zu befehl!!! (A la orden). Dos agentes pegan taconazo y salen derrapando a cumplir escopeteados las órdenes.
El fiscal se dirige al resto del equipo: Trabajaréis en tres equipos. Espero dos agentes de apoyo que nos presta el Comisario Jefe Caturla.
-¿Dos civiles?, pregunta amoscado uno de los agentes.
-Afirmo. Ellos se encargarán de ir a los locales donde los chinos extorsionan a comerciantes y empresarios.
Es la parte más sencilla de la investigación.
Los otros dos equipos harán el seguimiento a zapato de nuestros tres sospechosos. Los tres jueces de los que sospecho. La información sensible que permitió que nos robasen 6 toneladas de coca en nuestras narices no puede venir más que de un topo bien situado. Vosotros dos, -se dirige a Farnesio y Romerales, -os encargareis de los seguimientos con micrófonos inalámbricos grabando aleatoriamente en espacio radio ecoico, además pondremos micros en los coches y vosotros dos haréis una vigilancia, un stake out, colocando dispositivos de escucha en sus chalets.
-Llevará tiempo conseguir las oportunas órdenes. Hay mucho corporativismo mal entendido, murmura Farnesio, lacónico.
Cuando cayó la banda en Usera, la UCO seguía a los sospechosos hasta los aseos de mujeres, donde se realizaban las transacciones. Cayeron dos mujeres: la Doctora Huang y Lingfen Yi, de 45 y 32 años, respectivamente.
Mirada de plomo en el Fiscal: nos inundan con polvo de efedra. Lo meten en contenedores y no damos abasto. Estos chinos son más listos que los ratones coloraos: podrían dar clases de química en la Universidad de Cornell. Son los modernos alquimistas modernos.
El Fiscal se relaja:
-El proceso es peligroso. A veces el laboratorio explota. Es nuestra baza. Nuestra ventaja.
-¿Nuestra ventaja?, dice Esteban.
-Sí. Porque si el laboratorio salta por los aires, o se incendia, llama mucho la atención. Atentos las salidas de los Bomberos. A las explosiones. A los incendios en lugares poco usuales. En zonas aisladas y poco comunicadas. Especialmente en zona rural. Avisen al centro de Coordinación de Emergencias, el 112, que nos mantenga al corriente día a día de todos los incendios, explosiones y movidas con fuego que surjan.
-Si tuvieseis que montar un laboratorio clandestino para fabrican metanfetamina, ¿Dónde lo pondríais?, les examina el Fiscal. ¿Dónde?
-Lejos del núcleo urbano. En el extrarradio. Lejos de miradas curiosas.
-¿Y Los olores? , ¿Cómo los disminuiríais?
-Camuflados, buscando sitios pútridos. Casas de campo cerca de agua estancada. Acequias, arrozales. Zonas pantanosas, huertas, naranjales.
– Buena idea. ¿Y Los humos?, ¿Los malos olores? Cocinar esas sustancias echa un pestazo a huevos podridos.
-Colocaría chimeneas con fumarolas o salidas camufladas, a más de cien, doscientos metros o más de la casa principal. Trabajaría por las noches. Alquilaría naves o chalets o locales alejados de la actividad, pero en zona industrial para justificar el trasiego de material, furgonetas, etc.
-Efectivamente, tarde o temprano, les pegará una explosión. Estallará un chalet en donde Cristo perdió el mechero e indirectamente, sabremos algo. Ahora quiero que piensen. Por mera estadística. La DEA dice que se irán a tomar por saco si no compran reactivos de calidad y controlan la reacción. Además estos procesos químicos sueltan un pestazo de mil pares de cojones. Y los malos olores y los humos podemos detectarlos.
– Habrá que estar atentos a los informes del SEPRONA. Incendios, asaltos, sucesos en zona rural.
-Exacto. Y pedir los informes de actuaciones y servicios realizados en el Condado de Calusa en los últimos tres meses. Trabajo, concentración y compartimentar la información. Cada binomio a un tema.
Pregunta a sus hombres.
-¿Dónde os instalaríais si quisierais pasar desapercibidos y que nadie os detectase? Meditad y pensad las 24 horas. Mañana nos reunimos de nuevo.
Ahora, dormid algo. Os lo habéis ganado. Yo espero a los refuerzos. Creo que nos mandan unos cracks.
Salen en tropel. Marea de civilones que se precipita hacia el dintel de la puerta.
-Un momento, un momento: última cosa, -apostilla el Fiscal.
-¿Qué?
-Nos mandan una mujer, una Psicóloga número uno de su promoción. Para hacer el perfil psicológico del cabecilla de la Banda. Estos orientales son inescrutables. Nos mandan a una chica lista. Guapa, primera de la clase. No les dice lo esencial:
-Es una mujer con vulva diplomada en artes marciales. Es una mujer que pisa fuerte por la calle. De las que marca las puertas con su culo. De las que, buscando al hombre de su vida, encontró al hombre de su tarde.
Gritos de júbilo. Picoletolandia alborozada. Tenemos una mujer en el grupo. ¡¡¡Ya era hora de romper tanta misoginia!!! Uno de los agentes está a punto de celebrarlo como en Beirut, pegando un tiro al aire; y saca una pistola con un cañón con un calibre de acero digno del acorazado “Iowa”. Le frenan.
-Ya era hora, esto es otra cosa.
-Que suerte tener una chavala en el Grupo. ¡Por fin!
– ¿Es que yo no soy guapo?
-Tú eres muuuuy feo.
– Tú eres aún más feo con los pantalones bajados.
Cuando sepan que se llama Mía, la hija del Fiscal, Don Ángel de Ávalos, se les borrarán los estúpidos comentarios machistas.
Para celebrarlo sale el agente Armand, que es un poco místico. Aficionado a leer sobre esas cosas: El Ying y el Yang. Postura del Loto a la hora del almuerzo, mirando a Bangkok. Pelado al rape lleva a veces un mono naranja y va dando botes como un Hare Krishna.
Si todos los agentes fueran como él, en vez de Casas- Cuarteles tendrían que construir pagodas.
-Mi Fiscal. ¿Quiere un té ecológico de los míos?, -aumenta el karma.
-No, gracias Armand, le responde, -tomé uno ayer y todavía tengo la saliva verde.
-¿Dónde tendrán el laboratorio clandestino?, -musita el Fiscal.
3 “Absténganse de entrar quienes no sepan Geometría” (Inscripción situada a la entrada de la Academia de Platón.
Los jirones de luz de los primeros rayos de sol del amanecer entran delicuescentes por la ventana, reflejándose con prístina claridad y desvelándonos los dos cuerpos enlazados.
Luz cenital, con dos maromos soplándose la nuca, y acabamos antes.
Dos policías sobando; durmiendo entrelazados. Juntos, pero no revueltos. Apartamento y depósito de basura de las lorzas: Camarasa. Ciento cuarenta kilos de grasa cayéndole por las caderas de ánfora. Montllor es un flacucho esquizoide que lee compulsivamente a Kundera. Debe dinero a la mitad de los libreros de Calusa.
Es un apartamento de dos habitaciones. Oleadas de ropa desordenada. Cocina sucia. Sofá cama con manchas de todo el espectro de colores. Camarasa sufre síndrome de Diógenes y recoge todo el material pornográfico que encuentra. Miss Agosto es una chica en bikini de las Bahamas, con los colores azul, blanco y negro felpudo, de la enseña nacional. Suciedad excesiva, incluso para un recién divorciado, como Camarasa.
-Os concedo a libertad, dice el juez que los descasa.
Una ceremonia mucho más divertida que el bodorrio.
La ex mujer de Camarasa recobra su libertad y escapa a las Antillas Holandesas con un nubio campeón de maratón sexual y con una tranca de dos dígitos. “Que le den al Gordo”, quiero a un hombre sensible, -dice.
Dos cucarachas surfean entre la mierda al ritmo de los Beach Boys.
Los dos policías, chatarra del lumpen, amancebados en el sofá tatuado de manchas de vómitos de la curda de la noche anterior. Poster de Miss Septiembre operada y volcánica. Ni Torrente, ni hostias. La Realidad supera a la Ficción.
Miss Diciembre tiene tatuada una esvástica en la ingle. Hakenkreutz a la altura del apéndice.
¿Resacón en La Vegas? Dejémoslo en “Cogorza en Calusa”.
Priápico y somnoliento Montllor ve en su celular el mensaje del Jefe:
Venid a Comisaría cagando leches.
Bolsas violáceas bajo los ojos de Montllor, que parece que se ha levantado de un ataúd transilvano. Ha dormido muy poco, vigilando que Camarasa no se asfixiara tragándose su propia lengua bloqueándosele la vía respiratoria.
Camarasa luce ojos escrofuláceos y tupé alborotado. Ha dormido de un tirón y sus enzimas prodigiosas metabolizan todo el alcohol bebido la víspera, meando colonia en el Tigre. Tiene buena cara. Ha soñado que por fin se atreve a decirle a su jefe a la cara: “Eres un pedazo de mierda y a tu mujer se la folla Rin Tin Tin”.
El Comisario Jefe espera en su despacho de Comisaría del Marítimo. Espera enfadado a que lleguen esos dos tontos muy tontos. Ha llamado a Montllor y Camarasa, les está llamando de todo, menos bonitos.
El Comisario Jefe J. Caturla ha llamado a capítulo al dueto patético de Quijote y Sancho. Bueno, en realidad les ha llamado de todo, menos bonitos. El Jefe está presionado por el Gobernador. “Ese soplanucas del Gauletier me tiene frito”, murmura. Quieren detenciones rápidas. Fotos de los chicos malos con las gemelas puestas y entrando en Comisaria a “tocar el piano” (a que les tomen las huellas dactilares).
Refunfuña y piensa en mantener su trabajo, como sea. Es pelota vocacional. Medita en voz alta.
“NO pienses. Sobrevive. Como decía el birmano, Enic Blair. El cri-mental es ubicuo. No hay nada más grave que el cri-mental. Obedece al Gran Hermano. A Enic Blair también le llamaban George Orwell. Le metieron un tiro en el cuello estando de parranda en el Frente de Aragón, allá por el 1937 y tuvo que salir de najas antes de que los agentes de Stalin le matasen, como a Andreu Nin, pero sobrevivió”.
El binomio Camarasa / Montllor, se pone en marcha. Bajan al bar de abajo, el único que acepta al Gordo. Dentro del bar hay un cartel que dice:
“Se insultará a quien no fume”. Es un bar con gente corriente que desayuna anís del mono y tortas de chicharrones. Camarasa es un asíduo. Tienen un poster de ZP, el responsable de la ley anti tabaco y un póster de Bambi donde lanzan los dardos, enfadados, los parroquianos.
Combaten la resaca con Alkasetzer disuelto en Agua Evian y Canada Dry.
Camarasa hace el papelón del arrepentido.
-No volveré a beber. Me he equivocado. Lo siento mucho. No lo volveré a hacer más.
– ¿?
Montllor pasa de trifulcas. Ha dormido poco, leyendo a Baudelaire, poeta maldito. Oda al Semen Seco y chorradas similares.
Montllor la tiene pequeñita. Montllor echa de menos a su mujer, que era también pequeñita en todo, menos en la cama.
Le espeta, triunfal, al gordo:
-Tranquilo, que no nos hemos enrollado. Sólo dormimos juntos, jilguero.
-Uff, que alivio, dice Camarasa. ¡Un breve pensamiento! ¡¡¡Hijo de Freud!!!
-Apresura, nos espera el Comisario, le dice Bela-Lugosi
Camarasa, aliviado, suelta efluvios de abrótano macho y recobra la compostura. Por un segundo pensó que él y Montlllor le pegaban a la misma tecla y que les iba la marcha por la puerta de atrás. Como Aquiles y Patroclo, como Alejandro y Hefestión, como Bob Esponja y Patricio…En un intervalo lúcido post resaca comprende que hay que apresurarse.¡¡¡ El jefeeeee no esperaaaa!!!
-Reunión a las ocho y media en Comisaría, date prisa. ¡Que no llegamoooooos!
Salen del bar. Eslalon hacía el coche. Esquivan peatones sonámbulos como autómatas en dirección a sus curros. Multitudes que parlotean y murmuran mantras antes del desayuno. La España que trabaja. La vieja España de gente que sufre. El rugido de la multitud que pide taxis, sube al transporte público y trepan al andamio. La minoría que todavía tiene trabajo y mantiene el putiferio funcionando.
Toda esta perífrasis para decir: Viandantes diligentemente yendo al trabajo”. Punto. Jesús, con lo fácil que es decirlo del tirón…
Llegan a Comisaría. Hace pico-esquina al lado de la Plaza del Arsenal de la Marina Española. Edificio Color verde pistacho. Imitación barata de Art déco. Tufo a zapatillas sudadas. La llamada alarma social está creciendo por horas. El Baranda suspira. Sus mejores hombres están comprometidos en otros casos de corrupción y alzamiento de bienes. El tiene que recurrir a esos dos patanes: el gordo y el flaco. Mejor: cuando tengan que rodar cabezas recibirán las tortas como San Sebastián las flechas.
El Comisario jefe es pragmático. Conoce su oficio. El sospecha que la Mafia china está sobornando. Que hay un gigantesco sistema de blanqueo de dinero posterior. Que las entidades suizas del tipo UBS apantallan movimientos raros de dinero. Pero sobrepasan sus escasas competencias. Pone la mano en el fuego por sus agentes, pero no lo tiene tan claro con otras personas. Mira el Caso GAO PIN. Se pasó por el forro del muaré a la Justicia y a la ley de Enjuiciamiento criminal, que es del siglo XIX.
That´s life in the big cities: El tonto paga impuestos al Camarada soplillos. ¿Hacienda somos todos?
Mientras espera a los dos pelaos, relee el informe de la DEA encima de su despacho. Con gesto serio. El Comisario jefe ha sido siempre un acomodaticio. Siempre a bien con el Poder. Medra y crece laboralmente apoyado en chivatos, soplones y pelotas. Se rasca el escroto en señal de respeto mientras lee el informe con el sello del águila calva de Yanquilandia.DEA: Drug Enforcement Agency.
Los de Miami Vice: Cochazos de lujo, Pink Flamingo y música electrizante.
Comisario jefe: un Seat león, un periquito en casa y un casete de Los del Río.
Vaya birria.
El Comisario es un currante nato. Estudió en Colegio Público Todo matrícula de honor, con becas y luego hizo carrera en la Policía siendo servil y lisonjero. Vincalero. Toda una vida en sepia leyendo a Cunhal. Cara de esclavo turco a soldada de Napoleón. Rostro color limón. Su mejor apoyo para dirigir la Comisaría Marítimo, es el Agente Pelota. Pelota. Un profesional de dar la coba a los jefes… Un tipo con cara de veterinario triste de pueblo. Redonda cara de pan, con los mofletes rojos, como el abuelo de Heidi. Un individuo mendaz que pulula por los billares tocándoles el culo a los adolescentes. El Comisario no quiere problemas. Líos, los justos.
– Agente Pelota, contrólame que la gente no haga jaimitadas,- le dice.
–Yes, sire, dice el otro, doblándose y haciéndole la proskinesis, tocando el suelo con la nariz.
El Comisario está en un destino cómodo. Comisaría del Marítimo, en Calusa. Objetivo: doce años cotizando mas para ser jubileta. Regar las flores. Leer. Jugar petanca en pista cubierta. Dominó. Poco mas y luego un veintiuno por ciento de IVA para pagar el chaleco de madera final. RIP. Sic transit gloria mundi.
Todo iba bien. Hasta que nos inundó la tercera epidemia de Cocaína en España. Maldita droga. Maldito parné. Como la copla. Y el Gobernador, presionando. Resultados. Detenciones. Ruedas de prensa. Asociaciones de vecinos pidiendo drogadictos fuera de las calles.
El Comisario se asoma perezosamente a la ventana: Ve gentes vestidas de Hare Krishna tocando el tambor en los pasos de cebra, dando saltos y pidiendo opio libre para todo el mundo. Una chica bolivariana vestida con el uniforme: gorrita, coleta, pistola y culín; hacía gestos para cortar el tráfico. Señores: el tráfico de drogas no se corta así.
En la Comisaria han detectado cosas raras. Empresarios chinos de gran poder económico blanqueando en formas diversas. Muleros que llevan pequeños paquetes de dinero -nunca más de 3000 euros- a Andorra. Súplicas de dolor y plegarias. Madres que piden ayuda para desenganchar a sus hijos. Remesas de euros mediante la cual los empresarios chinos vulneran a la Hacienda Pública y no pagan sus impuestos. Comisario olfatea peligro. Pero además hay un informe del mismísimo FBI. El Comisario piensa que esto se está yendo de madre. Parece como si el problema de la droga fuera de hace unas horas, de ayer, cuando en realidad esta es la tercera epidemia de Cocaína desde los tiempos de la Democracia. Y los americanos ahora van de moralina. ¡¡¡Hijos de la masonería especulativa!!!
Una carta del FBI. Se recibió hace una semana. Escrita en papel cebolla, cuidado con la rima. Papel con su sello de agua y entregada por UPS pidiendo urgentemente resultados. ¡¡¡Ellos exigiéndonos a nosotros resultados!!! El Nuevo Orden Mundial. Un jeta masón con guantes blanco toca una campanita de plata en una tenida en la Logia de Boston, le dan el apretón secreto, pega un golpe de tecla a su ordenador y a mí me mandan un marrón del quince a mí, ¡¡¡A miiiiiiiii.!!!! El Comisario s e pone aún mas amarillo. Sus rasgos de jenízaro mameluco se agudizan.
Lo nunca visto. ¿Les pido yo a ellos la fórmula de la Coca Cola? Pues que dejen de dar la brasa, hombre.¡¡ Copón de Quéntar!!
Relee el papel: Informe conciso sobre aumento en Calusa del tráfico de sustancias sometidas a fiscalización. Vías de penetración desde Extremo Oriente. El PIB Chino crece un 5 % anual. ¿Incluimos los negocios sucios? El Congreso Americano ha aprobado la Ley de Reforma de Sustancias Controlables. Y los americanos quieren que todos meen contra la pared a la voz de mando. La suya, claro.
Los de Quántico van sobraos. Desde que hicieron el “Silencio de los Coderos”, caminan sobre las aguas. Se han subido a la parra. Hannibal Lecter y los adornos minimalistas de Hollywood hicieron el resto. Tienen veinte aspirantes por puesto. Todo el mundo quiere ir a Ciencias del Comportamiento, poner poses chulas con corbatas de encaje, beber bebidas de cola con gesto afectado y chupar cámara. Decid su frase en el guión: Arriba periscopio. Con una taza de café humeante en las manos y haciendo un escorzo del lado bueno a cámara. Rodando. Película blanco y negro. Submarino USA entrando en bahía de Tokio. 1945. Si, si, si, mil novecientos cuarenta y cinco. Por la popa yo te la hinco; nueva rima peligrosa. Torpedos de popa disparados, señor. Aye, Sir. El submarino useño vuela por los aires al barco mercante nipón Sesheiko maru, mandando a tomar viento, viento divino: kamikaze, a seiscientos infantes de marina japoneses que iban de refuerzo a Iwo Jima. Barco hundido. Júbilo yanqui en Vistavisión. Los yanquis dan grititos de hurra, y viva Franklin Delano y su abuelo calvo y masón, Benjamin Franklin, el del pararrayos. Los marineros yanquis dan grititos y se dan cachetes en las nalgas. ¡Ay bribón!, Kevin José, me pones a trescientos. Y nosotros, los europeos, de atrezzo, comiendo hamburguesas y Coca-Colas light bajas en sodio.
– Nos chulean-
Briefing:
DEA (Drug Enforcement Agency).
· DETECTADO AUMENTO ACTIVIDADES ILEGALES TRAFICO EFEDRINA DESDE EXTREMO ORIENTE. NUEVOS PATRONES DE PRODUCCION. TO KNOW HOW. IMPLICADA MAFIA CANTONESA AUMENTADO VOLUMEN INGRESOS DEL CINCO POR CIENTO RESPECTO A 2013-
· CULTIVO GRANDES EXTENSIONES DE LA PLANTA EFEDRA EQUISETINA EN LLANURAS MANCHURIA Y VALLE YANHZE Y EN PENINSULA DE YUNAN.
· EXTRACCION ALCALOIDE METODOS ARTESANALES-BAJO COSTE Y USANDO MANO OBRA BARATA / VEASE DOCUMENTO A-56: CAMPESINADO. “I loved Mao”.
· EN EUROPA Y NORTEAMERICA LOS DETALLISTAS USAN VICKS VAPORUBS Y NUTRACEUTICOS CON ALTO CONTENIDO PSEUDOEFEDRINA.RENDIMIENTO MUCHO MAS BAJO Y COSTES MAS ALTOS. 15,89 DOLARES FLUIDONZA.
· 5000 ENVASES DE NUTRACEUTICOS NECESARIOS PARA OBTENER 3 GRAMOS EFEDRINA. PRINCIPIO ACTIVO.
· PRECURSORES A DETECTAR: FOSFORO ROJO, VAINILLINA, MECAGOENLAMINA Y ACIDO IODHIDRICO.
· METODO SINTESIS NAZI.
· ALTA INFLAMABILIDAD. RIESGO EXPLOSION MODERADO-ALTO.
· DETECTADOS TRIADAS.
· USAN NUMERACION ARABIGA Y CODIGOS INTERNOS PARA EVITAR DETECCION. Adjunto se remite para su conocimiento y efectos que proceda archivo CON FOTO DEL SOSPECHOSO DE SER EL CABEZA DEL DRAGON, A.K.A GRAN SHAILO. china.jpg. HERMANO MAYOR.
· NOMBRE: HUANG. SHAI LAO.
· CONFIRMAR RECEPCION
· DEA TESTING SER VICE
· PARA COLORIMETRICAS CONFIRMATORIAS. USO RESTRINGIDO.
· REMITIR A AFB MC LEAN, VIRGINIA.
AFB: Air Force Base.
Base aérea Mc Lean, Virginia. (La más próxima a Quántico).
“Estos no usan SEUR, coño”, -piensa Caturla. ¡Vaya poderío!
Fdo. Agente Especial
Johnny B. Good.
Pensativo y meditabundo, el comisario no nota que han entrado su peor pesadilla.
Trompicándose entran binomio policial. Zipi y Zape. Camarasa y Montllor.
Camarasa anadeando sus lorzas de grasa y soltando salivazos y el vampiro psíquico, Montllor, de uno noventa y tres. El Gordo viste camisa blanca arremangada y llena de manchas de tomate, barriga cervecera y pantalones bombachos, mocasines marrones.
Montllor lleva una cazadora vaquera, camisa azul mahón, pantalones de lino dos tallas por encima y zapatos sucios. Y un cromosoma de más.
Dos tontos muy tontos. Jackass y su compinche. Vaya par de chiflados.
Se asoman como unos repartidores de helados y ni piden permiso para entrar. Montllor está ceniciento y místico, lleva cuatro bustaid pasados de fecha en su bolsillo del pantalón y la Imitación de Cristo, de Thomas de Kempis en el bolsillo de la cazadora. Como amuleto para evitar la bronca matutina. El Jefe deja informe sobre la mesa. El despacho es de estilo danés moderno. Colores claros. De Ikea. El jefe visualiza como sería perder su empleo y ganarse la vida vendiendo libros puerta a puerta. Aumenta su enfado.
-Señores: llegan tarde. Tenemos un problema serio. Es año electoral. La opinión pública se está calentando. La gente se cabrea. Drogas por doquier. Los beneficios de la droga siguen en alza. Lean esto. Y lloren. Señala el Informe de Johnny el Guitarrista. La cuenta de cabelleras cortadas va a aumentar si no espabilamos. Corrección: si no espabilan.
No para de divagar. Compartimentos de la información. Elecciones en seis meses.
Visualiza a zombies adoctrinados que extienden la Buena Nueva:
” Montorovsky for Presidente. 2015”.Hostia puta. El soplillos asalta la Bastilla. Lucha contra Viva Simón y sus batallones sans culottes. Yes, we Scan. A los refugios.AU! ¡AU! ¡AU! Inmersión, inmersión.
-¿Jefe está Vd. Bien?
-Admirable, Camarasa. Ha superado su récord: llega cuarenta minutos tarde. ¿Algo que decir?
-¿?
Camarasa visualiza a su jefe, crucificado por el Ku Kux Klan en Biloxi, Dixieland. Ardiendo como una tea. Encima de una cruz. Jefe flambeado. Pato laqueado. ¿Qué ha dicho de un chino? No hables, que sube el pan.
-Señores, la impregnación de la droga en la sociedad es alarmante. Y éste tipo es uno de los narcos.
Comisario saca una foto. Con Zoom. Rostro borroso. El chino se movía más que el negro de Boney M. Rostro borroso. No se ve una mierda. El archivo china.jpg falla más que las escopetas de la feria.
El jefe cambia de registro. Se pone lacrimógeno. Peret y el Comisario Caturla cantan un dueto. Interpretan dos minutos treinta segundos del conocido éxito: “Una lágrima cayó en la arena”. Usemos un toque lacrimógeno.
-Sois mis muchachos. Mis chicos de oro. Paco y Jordi. Mis pequeñines, interpreta. Les llora. Les suplica.
-¿Mande, jefe? ¿Todo bien? No pican. No hay nada más peligroso que un Jefe que les llame por su nombre de pila.
El comisario recobra colores y se recompone. Fin de la escenografía.
-Tenemos un Jefe de Banda narco de posible nacionalidad China vendiendo droga en nuestra ciudad. Y son ustedes mis mejores hombres. Les necesito para que capturen al menda éste.
Les vuelve a enseñar la puta foto. Muy borrosa. Un rostro oriental con un gesto como de dolor. Como si al chino de la foto le hubieran pasado un papel de lija por las almorranas.
Montllor baja su rosario en cámara lenta. Ha funcionado. No hay bronca. El Jefe debe estar puteado para estar tan cariñoso. “Somos sus mejores hombres. Hijo de Diógenes. Manda narices: capturar al sobrino de Fu Manchú”.
Das Komissar recapacita. Cara de mameluco cargando a caballo, atravesando con la lanza a prusianos en Jena o Austerlitz, pasando a cuchillo a madrileños en Príncipe Pío el dos de mayo. Su voz se endurece y parece un D ´annunzio desmedido y salvaje.
-De hecho son los ÚNICOS hombres que tengo disponibles. Quiero que vayan inmediatamente a visitar al Fiscal Antidroga. Allí se pondrán a sus órdenes y en coordinación con el Grupo EADA de la Guardia Civil, vamos a iniciar una investigación de altísimo nivel para detener a unos traficantes de etnia oriental que, al parecer, han entrado en nuestra querida ciudad y pretenden inundarla con sus drogas y sus hediondas vilezas. Ojo, que el Fiscal es más recto que la picha de un novio. No me hagan tonterías. ¿De acuerdo?
Y con displicente tono castrense y breve, les enseña la puerta.
-¡¡¡Aire, aire!!!
Camarasa y Montllor estaban incandescentes y radiactivamente irritados.
-¡Qué manera de tratarnos!
-¡Abusón, asaltacunas. Hijo de la Gran Libitina!
Nuevo embarque en el coche, sumergiéndose en la servidumbre del código de la circulación.
Circulan por Calusa apantallándose contra los coches, violentando algunas normas y recibiendo cariñosas observaciones de los otros conductores. Camarasa lleva una cola de zorro atada en todo lo alto de la antena del buga. Pone el loro con una de Bob Dylan. “Los tiempos están cambiando, ou yeah” Luego una cuña publicitaria de la Gran Coalición. Es la melodía pegadiza de pre-campaña. El sensiblero mambo de “Todos p ´alante, con el Comandante”. Soflama con el triple grito de ¡Simón, Simón, Simón! Tengo a Bolívar en mi corazón. Tutuá-tutuá-tutuá.
La Gran Coalición. Una sorprendente alianza contra natura del Partido Yes, We Scan, con los neonazis de Amanecer Pringado. La política hace extraños compañeros de cama. Esta Grösse Koalition hace que el bipartidismo se rompa y los bolivarianos lleguen al Poder.
Consecuencia 1: la gasolina baja un tercio. Los superpetroleros traen el oro líquido desde Maracaibo. Caen los precios.
Consecuencia 2: Los supermercados se abastecen de productos básicos que se dan gratuitamente a la población más necesitada.
Consecuencia 3: Se prohíben los culebrones y el Sálvame de Luxe. El presentador de Sálvame se exilia en Miami y lanza tremendas diatribas contra Camarada Koletas.
Consecuencia 4. Se establece como Día Nacional el 5 de Marzo, aniversario de la muerte de Hugo y del Hombre de Hierro, José Stalin.
La Gran Coalición. A Montllor no le sorprendería pronto encontrase al bombero de Farenheit 451 quemando libros.
Ray Bradbury, Orwell, ¿Dónde estáis cuando os necesitamos?
Camarasa apaga la radio.
La Fiscalía está al otro lado del río, al este. Les queda un buen rato.
Hay que hacer tiempo. El asunto ilustraba la dicotomía de cómo Comisario ilustraba la venta de droga como cuestión moral. Dualidad onda partícula. Amor, odio. Os quiero, os amo. Entelequias fuera. Trabajad duro y salvad mi culo. Pero en clásica maniobra de bloqueo controlado de la información, los manda con el Fiscal Antidroga y prefiere ver escándalos sexuales (por favor, que aparezca uno, le ha faltado decir) en los periódicos desviando opinión pública y salvando su silla.
Montllor suelta el géiser de la memoria y no recuerda a Jefe tan blandito desde mucho tiempo atrás.
Llegan por fin al Gran Palacio de Justicia. Grande palazzo, piccola Iustizia, reza el lema. El edificio tenía infinitas combinaciones cromáticas de luz. Todas ellas libres de impuestos, según el Gauletier de Calusa. Fachada de diseño, desconchándose. Rostro de cariátide de la Tuerta de la Venda y la Balanza. El Mundo se mueve como una exhalación hacía la IV Epidemia de Escepticismo. Nadie cree ya en la Justicia. Salvo De Ávalos. El Fiscal incorruptible. A Robespierre también le llamaban el incorruptible, y metieron su cabeza en una caja.
Aparcan a la americana. Con un par. Dejan un cartel que pone: “Neocatecúmenos en prácticas”.
Un gorrilla, con calcetines blancos y manchas de huevo en la camisa, les mira. Tiene la suficiente dignidad de no pedir. Montlllor, en un raptus ideatorio, le da un billete nuevo de diez euros. Entrará en ciclotimia depresiva días después cuando se quede sin blanca.
Pasan por cordones de seguridad. La alarma del Arco de Seguridad de la entrada pita. Pero pasan por el arco detector de metales. La prótesis de titanio de Montllor hace que pite la alarma. Pasan por los pelos y tirando de placa. De ésas que dan en las cajas de cereales Kellogs.
La Fiscalía está en la sexta planta del Palacio, un edificio color colilla, con arbotantes churriguerescos y un broncíneo Sísifo hace compañía a la estatua de la Justicia. Sísifo para recordar a los sufridos ciudadanos lo que cuesta ganar un pleito y los múltiples intentos para conseguirlo. Uno de los azulejos de bronce les cae a diez centímetros. El palacio de justicia literalmente, se cae a trozos. La erosión, la proximidad al mar mediterráneo y el aire salobre de Calusa hacen el resto. Al arquitecto que diseñó la fachada le quieren demandar por chapuza pública.
Peregrinación a la sexta planta sin ascensor, que está averiado. Camarasa echa la pota. Hasta las primeras papillas. Al final los excesos del prive de anoche se pagan.
Midriático y jadeante, llegan a su meta.
Puerta barnizada. Cartelito que pone.
Ángel de Ávalos. FISCAL ANTIDROGA.
Montllor se queda paralizado mirando la puerta.
Hay puertas por las que la persona que tú esperas no entra jamás.
Montllor palpa a Kempis en su bolsillo delantero. Camarasa agarra su pata de conejo. Están acojonaos. Ambos suspiran, se encomiendan al Santo Ángel Custodio, el patrón del Cuerpo. Tocan en la puerta y entran.
Nada más entrar, Montllor ve al fiscal sentado en su escritorio. Montllor tiene buena pupila para detectar a un hijoputa a diez kilómetros. Es un superviviente nato. Y sus radares le dicen que el Fiscal le da buen rollo. “Es mi maldición.” No se suele equivocar, pues tiene la profecía autocumplidora de los paranoides. Dentro del putrefacto mundo actual el Teniente Fiscal Ángel de Avalos es un buen hombre. No necesita sacar el genio, que lo tiene, para asumir sus responsabilidades. Se viste por los pies. Su voz es serena y firme, sin aspavientos.
-Pasen, pasen y acomódense, les dice. Tenemos mucho trabajo que hacer.
Mide uno ochenta, escasos, pero su Talla Moral impregna el despacho. “Por su edad debería estar jubilado”, piensa Montllor, porque ve Foto con el Rey dándole la mano. Número uno de su promoción. Fiscal con 21 años. Más fotos. Nueve hijos. Dos de ellos muertos en acto de servicio. Citaciones para parar un carro. Académico. Medallas y más chatarra.
-Caballeros, los informes que tenemos sobre éstos individuos. Estúdienlos. Como verán, no conocemos demasiado de ellos. La estructura piramidal y cenobial de las triadas se caracteriza por que sus comunicaciones son muy difíciles de detectar. No tenemos suficientes traductores. Para los mensajes importantes no usan celulares, sino el boca a boca. No se llaman por sus nombres, sino por apodos. Usan numerología y encriptan sus documentos, las pocas veces que lo hacen. Y encima hay dialectos del Sur de china que nuestros traductores, ni tan siquiera conocen. No tenemos más traductores, ni más medios.
Señala a los dos intérpretes: uno con cara de roedor y una chica ventiañera con buenas pantorrillas.
Los dos policías les saludan con una cabezada. Camarasa le mira el muslamen a la chinita. Montllor le da un codazo.
El Fiscal prosigue: les da unos dossiers parecidos a esos de “A-Z”.
-Cada miembro conoce a un número muy limitado de elementos mafiosos. Lean y documéntense y cuanto antes empiecen, mejor. Su enlace conmigo será Farnesio de Esteban, hombre de mi máxima confianza. Al resto de los agentes del Grupo los irán conociendo en los seguimientos y en los operativos.
Pueden quedarse aquí y disponer de mi despacho y sus teléfonos, el fax y lo que necesiten. Somos servidores públicos. Bienvenidos.
5 “La verdad oculta trae infortunio” (F. Nietzsche).
Existe también otro mundo, un mundo invisible, pero tan real como el nuestro. Ese mundo invisible que nos rodea está poblado de ángeles. Mía iba para novicia, fue su Padre, el Fiscal quien le pidió que se lo pensara dos veces. Que siempre tendría tiempo para recluirse en oración. Que viviese un poco antes de tomar una determinación.
Mía se recluyó delante de los libros. Y estudió del tirón su carrera, sin estimulantes, ni hostias. Ni tan siquiera tomaba café. Se levantaba a las seis y doce horas de machaque.
Anna sacó el número uno de los 367 de su promoción. Habla Chino nivel B2, Instituto Confucio. Está trabajando con las transcripciones de los interrogatorios a los detenidos de origen chino. Espera sacarse el C1 en dos años. Comenzó a estudiarlo al mismo tiempo que la Infanta Leonor, en la Época Pre revolucionaria, cuando había Monarquía. Pero los estudios no se los pagaron los contribuyentes, sino su padre haciendo horas extra levantando cadáveres a las cinco de la mañana, yendo con los guardias a redadas a horas infames. Mía adora al Fiscal. No sólo como padre, sino también profesionalmente.
Menudo envite: desarrollar el perfil psicológico de los detenidos orientales. Desentrañar su código de conducta. Su jerga. Sus acentos son muy variados. Los chinos del Sur usan expresiones tan diferentes de los del Norte que hacen tarea doblemente difícil el entenderse con ellos. Y la estructura cenobial y cerrada de las Tríadas es otra dificultad añadida. Cada miembro sólo conoce a los tres miembros de su célula y a su Jefe de Escuadrón. Casi nunca por su nombre, sino por un sistema encriptado alfanumérico.
– Alan Turing, -musita- ¿Dónde estás cuando te necesito? (NOTA A: Alan Turing fue el matemático que desencriptó el Código enigma nazi y ayudó a ganar la guerra). Acusado de homosexual, fue puteado vivo hasta que se suicidó, después de la guerra).
Vuelve a escuchar las conversaciones grabadas de los interrogatorios a los dos detenidos. Jerigonza ininteligible. Los minutos se hacen eternidades cósmicas. Apunta los giros, las frases. Los dobles sentidos.
Está en la habitación adjunta al despacho del Fiscal. Las cuatro paredes están forradas de corcho, con fotos de delincuentes entalegados por el Ministerio Público. Vuelve a ponerse los cascos y sigue anotando los códigos. Hay un lento parloteo de vocablos chinos en un ambiente cargado de estática. Toses eléctricas. Sobrecargas de electricidad que se confunden con fonemas.
Desde que Podemos alcanzó el Poder, las restricciones al uso de Fondos Reservados han aumentado considerablemente .Los ulemas de Chávez llaman a la oración. Dos veces al día la Biografía del Excelso Líder se repite como un mantra en los Centros de Re-educación. La revolución Bolivariana se extiende, despacio, pero imparablemente. Viva Simón. Viva Simón. Viva Simón. Son los tres gritos de soflama patriótica que se escuchan a las ocho de la mañana en los Institutos-madrassa de la Secundaria. Los escolares suben en fila india a sus clases mientras por los altavoces suenan los compases del “Tengo a Hugo en mi corazón”. Los supermercados tienen los productos básicos, los precios han caído a menos de veinte centavos del”bolo” (el Bolívar Hispánico, la nueva divisa).
Mía sabe que con un buen sistema de desencriptación avanzaría más rápidamente en su proceso de descubrir los códigos de los Orientales, pero ya no hay fondos para esas sofisticaciones y todo hay que hacerlo a mano. La Revolución tiene otras prioridades y la tasa de alfabetización empieza a subir lentamente. Y hay que ahorrar en corporativismos para cumplir el Plan Quinquenal de detenciones. Las líneas de teléfono están sobresaturadas de escuchas. Hay sobrecarga en las llamadas. Los pronósticos de Orwell en “Rebelión en la granja” se han cumplido. El cri mental mantiene su tendencia a la baja. Al igual que la Deuda Externa, que ya no se paga. El otro día corrieron a hostias a un comerciante sueco de la casa Electrolux que pretendía cobrar un cheque en un banco nacionalizado. ¿Estás loco, musiú? (musiú: extranjero, en venezolano)
Poco a poco, Mía avanza en su trabajo.
Le pasa el informe a Fiscalía.
6. “Al que tiene ideas pero no sabe expresarlas, no le va mejor que al que no las tiene” (Pericles).
-Parece miel, dice el agente de aduanas. Farnesio se masajea el cuello, agobiado. Pensó furiosamente: » Y ahora éste lerdo dirá que no debe de ser nocivo, con esa apariencia tan natural».
-Pues con ésta apariencia…no debe ser nocivo… si es natural, no debe ser malo, comenta el otro, rascándose la cabeza y matando a la única neurona que le quedaba viva. La neurona lanza un trémolo de balada antes de morir. Demasiado Sálvame de Luxe.
Farnesio mira al techo, sin decir nada. Venas que palpitan a punto de explotar. Le duele la cabeza. Va a reventar. El vial está lleno de una sustancia amarillenta, ambarina. Tiene el tamaño de la mitad de un cigarrillo. Han encontrado más de seis mil en el doble fondo del pelao. Ha prometido que uno de los contenedores de un carguero con bandera de conveniencia- Hoy toca Panamá, mañana Islas Comores.
La EADA no sospecha. Confirma. Tripulación hermética. Orientales y filipinos. Sólo el capitán, uno de Malta, de barba de chivo, habla inglés. Lleva gorra de marinero blanca, pantalón corto blanco, calcetines blancos y sandalias. Sólo los Hijos de la Gran Bretaña y sus adláteres pueden ser tan cursis vistiendo. Los de Laboratorio han detectado éxtasis líquido en el líquido ambarino. Droga de violación por cita. A Farnesio no se la pegan. Lleva diecinueve años en el Equipo Antidroga. Ha sobrevivido a las purgas estalinianas de los fachas de garrafón. Ha visualizado las purgas de flipantes neoconservadores. Ha sobrevivido a las filtraciones como la de la Comandancia M, donde un teniente y tres guardias estaban en connivencia con los chicos malos. El es un estajanovista que se limita, que no es poco, a cumplir en su trabajo y a dar trabajo a los fiscales. Especialmente a Don Ángel de Avalos, el Fiscal antidroga. Odiado por los pelotas, que saben que pasa de sus chanchullos. Farnesio imagina que, tarde o temprano acabarán con él, con el jacobino. Y ése día Farnesio mandará al Duque de Ahumada al carajo y se irá del cuerpo. De hecho, el único motivo por el que no se va es porque confía- como seis agentes EADA más- en el Fiscal antidroga. Ninguneado por los políticos, que saben que De Avalos no les baila el agua.
Ve el gabán que lleva el chino. Demasiado amplio: El oriental demasiado delgado. Raja con un cúter el doble forro y apareces las 10 bolsitas azules: OH LA LA. Peso: diez gramos. Envoltorio con el logo: Zhongyao Peifang. ¿Qué carajo será? Farnesio lo lleva claro.
–C´est fini: l´heroine, dije el zampolit, el agente Pelota, un “liberado” del sindicato vertical que cobra por horas guardias que nunca hace. Está con él, de carabina. Controlándole. Tiene la cara abotargada. Ojillos tristes de sacristán que mete mano a adolescentes. Pelota profesional. Frecuenta el amor mercenario, donde muchas chicas salvajes se han integrado a la cultura europea.
Farnesio ni le mira. Tiempo filtrándose en las paredes. La habitación destila una luz líquida. Ha aprendido a vivir con el NKVD, simplemente le responde:
-No es heroína, sino coca. Y dudo mucho que un chino mulero que probablemente sólo habla chino mandarín entienda el francés. Crucigrama, vertical. Tres palabras. Diez letras.” h-i-j-o d-e-p-u-t-a”, piensa en silencio.
Saca su equipo portátil. Maletín de aluminio de dos kilos escaso que guarda en el portamaletas. Dentro: espátulas, herramientas de incriminar, linterna, kleenex, guantes azules (los más caros del mercado: se tira con pólvora de rey), gafas de protección, mascarillas y espátulas pequeñas. Ganzúas de tungsteno: frasco y albarelos impecables. Reactivos de Marquis para el jaco y de Tiocianato de cobalto para la Cocaína. Saca cuidadosamente de la doble bolsa éste último, sin que se derrame ni una gota. Pone dos gotitas en un pocillo de cerámica y deja caer unos leves granos de polvo: AZUL. Micky ojos azules. Positivo. Coca de alta calidad. A primera vista y a ojo, más de un 70 %. Irá cortada con algo de cafeína, que les da subidón a los drogatas y Mepivacaína de dentistas sin fronteras. Para simular el adormecimiento en la lengua y engañar a los yonkarras. Haciéndoles pensar que la mierda que compran es de mayor potencia que la que realmente tiene.
Todos los ojos puestos en él. Farnesio mira al chino, que baja los ojos. Hace un gesto de no hablar. Falsa sumisión. Código Bushido. Antes muerta que sencilla. Autarquía. El Honor es mi bandera. Farnesio le suelta una hostia a bote pronto al chinito.
TFE: Terapia Facial Estimuladora.
El chino huele su cuerpo en formol y visualiza a los forenses metiéndole por las venas líquidos para embalsamar. Farnesio se pone el atril y le suelta todo el libro de guerra psicológica. Funcionó en Corea. «Tu mujer estará muy mona de luto, abrazada a tu ataúd», le dice al Chino. Se lo traduce Shuang. El detenido, hace como que se desmorona. Paripé de ataque al corazón. Pero es ganar tiempo y no habla. Farnesio sube la dosis TFE y le da con la Guía telefónica de Calusa en el calamar de las mejillas, y Chang actúa de vicetriple y canta Aída, sin los elefantes.
CONCLUSION: registro radioteledirigido a barco de bandera de conveniencia y 500.000 dosis de éxtasis líquido (droga empleada en las violaciones por cita) más seis contenedores de Nandrolona adulterada.
Charlie don´t surf, dice Farnesio. Charlie. Vietnam. Por el Vietcong. Un retruécano racista hacia los de ojos achinados.
Lo de la “Operación Emperador” y la fuga de los jefes de la banda no va a repetirse.
7. “El primer paso de la ignorancia es presumir de saber” (B. Gracián).
Huang en su cubil. Huang con los ojos cargados de tiempo. Zona Norte de Calusa. Casa de campo. Luz amortiguada. Miles de insectos celebran su noche de bodas.
Esqueletos de gatos. Chalet Rodeado de palmeras enanas. Alambre de espino y una tapia de ladrillo de dos metros de altura Descampado con múltiples pozos de grava de una construcción cercana. Huang vivía para correr y esconderse. Le gustó el cubil. Un “Wolfschanze”, el cubil del lobo. Los pozos de grava parecen cráteres de la luna. Permiten la diversificación a través de un sistema de fumarolas y chimeneas y derivan a más de seiscientos metros los humos blancos y tóxicos del pequeño Alto Horno de fabricación de metanfetamina. Si dijésemos que “Zona Norte” es Alboraya seríamos cómplices de revelación de sumario. El caserón del Odio está aislado. Recuerda el Campo 731 en la China ocupada por los japoneses. Alambradas, cámaras ópticas de visión nocturna con luces rojas en la oscuridad.
Huang sonríe, con los ojos aún más entrecerrados. Podría enseñar Química Orgánica en Heidelberg. Vuelve a estado sonrisas ON.
El rojizo fulgor se enmarañó en el vítreo. En su ojo salieron relámpagos rojizos. Era una morfina súper-pura. Al añadirle el reactivo de Marquis, con su olor a sulfúrico, pues estaba recién hecho, descendió a los infiernos rojizos del jaco de diseño.
Flash. Relámpagos. Chisporrotean sus neuronas furiosamente. Latigazos. Arranca el jaco.
Suave temblequeo del tubo de neón da un aspecto tétrico al tugurio donde se fabrican opiáceos y se destila nembutal.
Olor a pedo de clorhídrico. Huang serpentea entre los frascos, tergiversando su rostro de cariátide. Su imagen se imita en los espejos de azogue formados por condensación de los vapores de ioduro. Heroína de imitación versus Helado de anfeta. Interioriza tu dilema. Aliteración literaria. Follaje epifítico en medio de China. Recuerda el Campo de exterminio. Miles de chinos que son sacrificados probando como cobayas humanas las bombas de racimo que sueltan peste, ántrax o difteria. Recuerda imágenes: la de sus padres siendo asesinados en el infame campo de la Muerte 731. Huang no es un sensiblero, pero las vesanías del malvado General nipón Shiro quedaron impunes. Los cimientos del odio empiezan en 1937. Huang se salvó de casualidad. Los muertos se olvidaron rápido. China era gobernada por Chan Kai Check y estaba en guerra contra Mao. Los americanos apoyaban a Chan Kai frente al comunismo de Mao y no les interesaba desestabilizar el país y reabrir crímenes de guerra como en Nüremberg.
Huang sabe que podría imitar dunas de arena en el Sáhara o clonar camellos en el desierto del Gobi-y venderlos.
Pestazo a sulfhídrico. Olor a huevos podridos. Y no hay políticos cerca. Misterios de la Química carroñera.
¿De dónde le viene la sabiduría a Huang? ¿Que fue antes la gallina o el huevo? ¿Conoces a algún chino tonto? Si. Pues está muerto. ¿Quieres amigos? Cómprate un perro.
De uno de dos soxhlet (calderas), donde se maceran lentamente la Efedra salen los valeriánicos olores. Combustión espontánea. Emanaciones sulfúreas. Alambiques y retortas. Quizás Huang es un Fulcanelli moderno. Con la sabiduría de miríadas de años imbricados en su adeene. Sabiduría innata. Gentes listas. Hambre de siglos. Genes despiertos. Dinastías de alquimistas. Los franceses tienen al gremio de albañiles. Los chinos sobrevivieron a las hordas mongolas adaptándose al hábitat o muriendo a miríadas. Los padres de Huang murieron en el infame campo de exterminio 731 del general Shiro, el japonés que exploró armas biológicas sobre miles de chinos. Cobayas humanos. Y que se fue de rositas. Pactó no ser entregado a los rusos a cambio, el se fue a USA a vivir de sus archivos, vendiendo su información a los americanos y evitando a cambio ser ahorcado como criminal de guerra. Los padres de Huang no tuvieron tanta suerte.
Los productos en maceración de la fábrica de sueños de Huang son la calmosa sabiduría del Paracelso oriental. Obreros doblados sobre los matraces, recitando musiquilla de fondo pelma de laúdes y violines. Laboratorio clandestino. Aire cálido y húmedo. Transpiración tórrida. Vaho en los espejos de azogue. Un aire etéreo: neblina a la escena- sólo faltan vapores subiendo desde el suelo , dos sapos y un caimán enano metiéndose en maceración en los brumosos pantanos verdosos de los matraces burbujeantes y los serpentines de líquidos amarillos, violetas, espumosos y coléricos dentro de los matraces. Y lo que sobre, al canal cercano. Dentro de dos años aparecerán carpas gigantes de ojos estroboscópicos. Mosquitos del tamaño de un Mig 21. Cucarachas voladoras con autonomía de veinte mil kilómetros y gatos albinos con dentadura de jaguar. Son los vertidos ilegales del laboratorio sin franquicia de Huang a las acequias cercanas de Alboraya. ¡¡¡Coño, igual se afecta la horchata!!! Por si acaso, mejor beber alcohol de quemar en vez de zumo de chufa.
Dentro del habitáculo hay colchonetas tiradas. Ahí, en el suelo, duermen sus esclavos. Sin cocina, ni baño. Tres bicicletas oxidadas. Dos toallas ennegrecidas. Alfeizares manchados de cagadas de pájaros, sin cortinas.
Al igual que los buenos vinos, los mejores elixires son aquellos con los que Huang abarrota el mercado. Hierbas chinas. Ma Huang: ponga una efedra en su vida. Huang es un Premio Nóbel del mortero y de la espátula. Es un Galénico de pro. Moldea moléculas con la misma facilidad que los niños hacen estatuas de arcilla. Mezcla calmosamente hierbas centenarias, cartílago de tiburón y yemas de golondrina. Yohimbina, para dar caña a las geishas. Final feliz: corte de pelo y desatasque de tuberías. Módicos precios. Be water, my friend.
Huang ha encontrado el nicho ecológico; abarata el mercado y da a los yonkarras de diseño el soma de Aldous Huxley en “Un mundo feliz”. Happy New World. Ya no quedan curas ni confesionarios. La gente va a al psiquiatra en vez de irse de putas. Los pájaros toman alpiste con valium. Los urbanitas adoran a Aramis Fuster. Los magos de ultratumba, los hechizos africanos y las pociones amarillas de Huang mantienen a la plebe tranquila.
Huang se considera humilde: son los demás los que requieren de su experta maceración y cuidadoso tratamiento de sus hierbas, potingues y alambiques. La viruta que gana es secundaria.
Tiene en éste local a cinco “laborantes”, por así llamarlos a los pobres desgraciados que hacían turnos de dieciséis horas cocinando en el infecto laboratorio.
Pero éste laboratorio es sólo uno de los seis que tiene la organización que dirige. Es el Emperador naranja: el Cofrade de la Anfeta. El Sumo sacerdote del prive. El Domador del lagarto. El Aprendiz de brujo. Catedrático Numerario y por derecho propio, rey del Alambique.
Los matraces, cubetas y cubos semiabiertos con sustancia anaranjada se esparcen por doquier, con una falta absoluta de higiene. No importa: van a palmar los usuarios atontados empalmándose en una farola conduciendo bajo los efectos de su polvillo naranja. O van a morir diez meses después por un edema agudo del pulmón encharcado en aguachirle naranja, mientras los ojos exoftálmicos se les salen de las cuencas de los ojos a sus “usuarios” por la destrucción de sus cerebros. Huang moldea cerebros de los urbanitas. Le adoran. Cabildo sanitario. ¿Otro en la nómina de H?
En una retorta se cuecen lentamente, con olores fuertes, doscientos litros de pasta de anfeta; soma; melange de color naranja, semitratada con metoxifurano y traída de un carguero mercante que zarpó de Hong Kong hace 3 semanas. Huang le ha dado su toque de Subijana oriental de la anfeta: hecha por el llamado método nazi.
Poco importaba a Huang que, de vez en cuando, un petardazo mandase a tomar por saco a alguno de sus laborantes. Son material fungible y fácilmente sustituibles por otros aprendices de brujo. Si caía uno, Huang ficharía inmediatamente a diez más de su tríada. Diez mas, ansiosos de ganar 7 euros al día, un fortunón en las clases humildes del Sur de China.
El negocio era completo. Hung apenas toma riesgos. Ni gastos.
-Y la pasma. ¿Qué?
Atada de pies y manos por las reglas de las democracias occidentales: son los jueces los que deciden.
Y Huang ya ha fichado a Flequillo, para que le evite los golpes. Y que el Juez le avise de las redadas.
A su alrededor. Bidones con sustancia amarilla. Cucarachas mutantes que desfilan rampantes, como en Petavana. Cinco “empleados” que se afanan en sintetizar jaco de diseño, dulces de Mazindol, fresas de Meprobamato. Píldoras de anfetamina. Botellas azules con lagartos dentro. Polvos de Dower. Cocaína cortada con Buflomedilo. Orujo con bolitas de codeína para convertir a los diligentes urbanitas en adoradores del dios Morfeo a tiempo completo. En el taller se desparraman envases vacíos, latas a medio abrir. Saquitos de sosa en escamas. Bidones sin tapadera. En la santabárbara: pañoles de amoníaco comprado a granel en droguerías de tercera, donde no se hacen preguntas y donde se esquiva a la pasma. Con facturas más falsas que los papeles de Nóos. El piperonal es más difícil de conseguir, pero Huang lo saca de un canal legal, simplemente lo pide al mayorista en Guinea Portuguesa (ex), que, agobiado por la potente crisis, chulea a sanidad ya que Huang paga en metálico.
Don´t tell. Don ´t ask.
En las habitaciones del cuartucho inmundo los laborantes sudan como co-chinos; impregnándoseles la piel del polvillo amarillento de la efedrina de garrafón.
El sendero Ho Chi Min: ruta de infiltración chinarra a través de seis países. Anota esto: En Adén les dejan tres días de recuperación. Si los trincan en Dubai: trullo y mazo. En Yemen tienen a su contacto. En Sana´a, la capital, vive Ibn Fumeta, el topo infiltrado. En Europa: la decadencia. El hundimiento. Der Untergang, la burocracia cansina y plúmbea de las autoridades europeas agobiadas por la marea del Comercio ilegal de personas, apenas dan abasto para otras cosas más laxas. Resultado: es un coladero. Hoy día, con Internet, ¿para qué vamos a controlar las aduanas si pueden recibir los medicamentos tranquilamente en sus casas? Dejadles pasar. Hasta la cocina, Mr. Huang. Póngase cómodo. Y además lleva un salvoconducto firmado por Flequillo Loco, de la Audiencia Territorial del Cabildo Ancestral de Denominación de origen del Lánder cantonal de la Comarca.
-Pase, pase, Señor Huang: está usted en su casa. ¿Qué desea ahora?
Gotterdämmerung
8. “La Obra maestra de la injusticia es parecer justo sin serla”. (Platón).
Comisaría. Habitación de Interrogatorios. No hay panel de azogue o falso espejo. Están cara a cara y sin grabadora.
Farnesio y otro agente sentados ante el chivato Manuel Pena. FN: 3/3/81. Nacido en Michoacán. Red de chivatos del Comisario. Alías folla-mexicas.
Farnesio se tele transporta.
Jaculatoria policial.
“He pagado mi deuda con la sociedad. Soy un hombre libre”.
-Dinos lo que sepas de las mafias chinas, pregunta el policía.
-He pagado mi deuda con la sociedad. Soy un hombre libre.
Exhibición dental por parte de los policías.
-Vale, ¿quieres que hablemos de la denuncia por violación?
-Fue sexo consentido.
-Violaste a esa niña cuando aún lleva calcetines blancos.
-Pensé que era más mayor.
Nueva exhibición de los esmerilados dientes de ambos.
-¿Vas a decirnos algo o pasamos a Plan B?
-¿Cuál es plan B?
La luz de la tarde abandona la Comisaría.
Reunión en despacho del Fiscal. No está el horno para bollos. Han fracasado en el tema de los precursores. Las droguerías y mayoristas no aportan nada.
El mexicas da información manipulada. Callejón sin salida. Malditos chivatos. Faltan pruebas.
-No os desaniméis, -dice Farnesio, -que ya afronta cargos por tortura y detención ilegal. Mansamente, el Agente Armand, un pacifista, le suelta el mantra de “Pez que lucha contracorriente, muere electrificado”.
Las órdenes judiciales para grabar a los tres Jueces aún no están preparadas. Hay reticencias. Corporativismo espeso. Además, la filtración también puede venir de más abajo. Por ejemplo, los Secretarios Judiciales, los procuradores. Abogados. Cualquiera que pueda ver un sumario en pantallazo de ordenador es susceptible de ser comprado. Y, ya puestos, cualquier funcionario que esté por los juzgados, incluso los Agentes Judiciales pueden tener, en un momento determinado, acceso a un sumario, aunque se haya declarado como secreto.
El Fiscal recoge las transcripciones de las declaraciones de los dos detenidos. Y ha leído el informe preliminar que Mía, la Psicóloga profiler le ha mandado. Habla despacio y con cuidado:
-No tenemos nada concreto. Emplea los términos “Hermano Mayor” y “Hermano menor” muchas veces. Es un código. Están encriptando información, -dice el Patricio Fiscal, moviendo la cabellera perfectamente peinada con las canas impregnadas en gomina.
El Fiscal Antidroga está estancado. Sugiere al Sargento Farnesio que re-interrogue, a los detenidos sin pasarse en apretarles un poco las clavijas.
-Farnesio…
-Si, mi Fiscal.
-Farnesio. Sólo hay tres cosas que se hacen a mano: las pajas, los habanos y los interrogatorios. Caña al mono…que es de goma.
– ¡A la orden! Farnesio sale como una centella, alisando con la mano su porra de goma rellena de plomo.
Farnesio se ha escapado de una película de la Batalla de las Ardenas. Ex miembro de la BOEL, rompe las latas a golpe de kárate. Tiene un cuello de toro, unas venas que parecen mangueras que se hinchan como balones. Pero también tiene su lado amable, Escribió un libro, “Rapsodia zíngara a una mariposa” y otro de corte biográfico: La historia no autorizada de Walt Disney”, pero nadie se lo publicó. Como el Doctor Goebbels, que escribió su novela, “Michelle” sin que ningún editor se la publicase. Luego, se transformó en un cíclope exaltado. Lo ascendieron a Ministro de Propaganda, se cabreó más que un cojo después de un accidente jugando a la petanca que le fracturó el astrágalo por tres sitios y soltó su odio contra todo y contra todos: quemó libros, se cepilló a actrices, entre ellas a Lida Baarova la actriz checa y a cualquier aspirante a estrella que pasara por la UFA. Empezó quemando a libros, y terminó quemando a personas. Con más mala hostia que un cojo. En definitiva, que se vengó de las mil y un putadas, quemando libros judíos en la Alexanderplatz. Por favor, si es usted profesor de Bellas Artes o Editor de libros, y un buen día le llega un colgado pidiendo ser admitido a las Clases de la Academia de Dibujo o le dice que ha escrito un libro que nadie lo lee, asuma el riesgo: Lea el libro y acójale en su seno. Lance una edición de 500 ejemplares para que se le vaya el odio atávico, que nos sale más barato que enviarlo a un frenopático a alucinar viendo dibujos del Test de Roschard, ó a la horca.
Nos evitaremos una reedición de Adolfo Hitler o Joseph Goebbels.
El mundo será un lugar mejor.
Gracias.
9. “Las mujeres han sido hechas para ser amadas, no para ser comprendidas”.
(O. Wilde).
El Gauletier (Gobernador) mira a su equipo. Está empezando a agotarse. Las elecciones están a la vista. Su cargo y su carrera política dependen de éste caso. Quiere apretarle las tuercas a Das Komissar, pero sabe que el que realmente lleva las riendas es el Fiscal y ése no se presta a politiqueos.
Habla despacio y cuidadamente. Estudia las fotos que le envían de Quántico. Y la información de la DEA. Ordena la revisión de los expedientes de los sospechosos. Tendrán que hacerlo en su despacho. Ni un solo papel puede salir fuera.
Se decide por ésta última.
Da la orden de saltarse la legalidad y grabar a los chinos extorsionando. Le da al fiscal la ORDEN de intervenir.
Cadena de mando. Don’t mess with the Bragg. No juegues con la Autoridad, en cristiano, Fiscal. No te resistas y sométete. Me la suda la ley.
Envía a los dos recién llegados, Montllor y Camarasa a investigar una pista poco fiable.
Salen con la misión de recabar información sobre la extorsión a empresarios y a prostíbulos regentados por la Comunidad China de Calusa.
Lista de locales a vigilar: El LUAU-LUAU, El Patio de las Chuminas, Safo, mon amour; además en la Lista hay un almacén de ropa al por mayor en el Polígono Industrial de Calusa Norte, dos peluquerías, con Final feliz, My Fair Geisha y el Palacete del Polvete. Allí hay mujeres con los ojos cargados de tiempo. De todos ellos, todo apunta a que el Gran Shailo se centra en una casa en medio de la Huerta de Calusa. Al parecer bajo la excusa de ser un club de carretera: «El Paraíso del Sultán»; se celebran reuniones de la tríada. Las conexiones de la operación “Emperador” culminan con una subdivisión de la causa. Decide enviar a sus peores agentes, ya que los demás están montando / inspeccionando los chalets de los jueces donde van a montar equipos de vigilancia. Necesita cubrir todas las opciones. Se ha pensado instalar cámaras de TV en los juzgados. Fiscal se niega.
Los agentes asienten. Faltaría más. Saben que el Fiscal no hará nada ilegal sin tener todas las salidas jurídicamente cerradas.
– Camarasa, Montllor. Cojan el Magallanes (un GPS último modelo) y vigilen estas coordenadas. Oh, sorpresa. Es un club de alterne. Parejas. Lobos solitarios abstenerse. Lucecitas chinas y música pelma enlatada. En un país destino de turistas es fácil hacerse pasar por turista. Control y seguimiento de sospechosos. Sobre todo a los orientales.
Sale el binomio.
Luego se dirige a los demás.
-Tenemos que estudiar material probatorio antes de nuestra última opción, los micros. Abstenerse de sacar conclusiones preconcebidas. Lean todos los buro fax de INTERPOL. Actividades de la UCO en Madrid, Usera, Getafe y Torrelodones, tócate los…
-¿Qué toquemos qué?, dice el Agente Armand, un buda bonzo inofensivo.
-Cosas mías, siga a lo suyo, muchacho.
Decide igualmente, pedir las grabaciones de todas las cámaras no sólo las de la Autoridad portuaria, sino también la de los yates y barcos amarrados en la dársena del puerto.
-Repásenlas todas, la noche del 28 de Abril, cuando se produjo el robo de las seis toneladas de coca. A ver si cae la breva y aparece la furgoneta blanca.
-Necesitaremos tiempo, Mi Fiscal, le responde el Agente Santos.
-Lo sé.
-Recojan las ropas de los dos detenidos. Recupérenla en bolsas sépticas. Les sacaremos perfil de DNA y cotejaremos con los potentes ordenadores Clay que zumban debajo de éste sótano. Será un proceso lento, pero seguro. Si alguno de ellos es secretor, comprueben delitos sin resolver en los últimos cinco años. Y envíenselo prioritariamente a los de Mc Lean, a la DEA. Y a Europol. Frotis celulares de los sospechosos igualmente. En Hamburgo trabajan muy rápido. Podemos tener resultados en 72 horas.
Mía, entra en la habitación:
– Papá, el informe.
10. “Ojo por ojo y todo el mundo acabará ciego” (Gandhi).
Dos de la mañana. Camarasa lleva un parka de ante. De antes de la guerra, pues está plagado de remiendos y manchas sospechosas a nivel de las axilas. Lleva pantalones negros de algodón. Hace frío. Y los mocasines eternos, con calcetines blancos. Cumplen órdenes del Fiscal de vigilar el sitio. Montllor va etéreo y quijotesco. Un Arthur Rimbaud vestido de retazos de fondo de armario. Se le describiría como un sin techo en busca de una última ración de prive. Pantalones grises, arrugados. Botas claras hasta el tobillo. Veinte euros en los chinos. Camisa de pana marrón con una condecoración a la altura del pectoral. Mancha de grasa indeleble. Chupa de cuero ajada, tipo Inspector Flóres de las que llevaba con garbo Imanol Arias en “Brigada Central”. El de Juan Madrid.
-Bienvenido a Camelot, marinero, -le dice la chica de los tickets. Lleva una estola de armiño falso, sostén de pedrería oriental, pese al frío y el ombligo al aire.
El local – LUAU-LUAU- está muy bien situado. Tres rutas de escape a mano. Portero de la entrada. Tipo friiiiio y de negro. Pelo cortado a cepillo. Hombros infinitos: Gólem de músculos arcaicos, defensa de cipote de vaca forrada de plexiglás; lleva tatuado en la frente: “WHITE POWER”, y el inevitable pinganillo en la oreja. Controla el tránsito de ovejas que pasan a dejarse los ahorros con que padre se deja los cuernos en la Fábrica FASA Renault o madre, limpiando escaleras. Y todos van a la moda yenkera. Enseñan la raja del culo, pese al biruji polar.
Una cola de veinte personas. Noctámbulos. Frío siberiano. Faltan las alambradas de espino para que parezca la entrada a un Gulag. Arbeit macht frei, camaradas. La mayoría de los que están en la cola son veinteañeros, con acné refractario a tratamiento y un sentimiento de que les están tomando el pelo. Una sensación de vacío y desorientación de una sociedad que no les da opciones. Escribas de telebasura que se arrodillan frente al Televisor y mandan cartas para que les acepten a Gran Hermano.
El del pinganillo recibe órdenes de que ingresen nuevos reclutas al interior del garito: se le cae el pinganillo y los cables le caen encima de la faja del esmoquin del bouncer (portero de noche) de la puerta.
El súcubo suelta un grito y deja que pasen dos pardillos más dentro del local. Al abrirse la puerta sale una nube de Yperita, humo de tabaco mezclado con pedos violáceos y aroma de Ketamina recién reconstruida. Aire muerto y lentejuelas que se elevan a Plutón. Las cortinas de terciopelo fucsia de la contra puerta se bambolean por el efecto contracorriente venturi al pasar dos individuos de piel tísica. Adentro. Sale un tipo con una camisa de lentejuelas, acompañado de un tipo con cara de matón, que le dice:
-Vuelve dentro y fóllatela.
Se cierra la puerta. Los de la cola murmuran y esperan. Los del pinganillo reciben órdenes. La cola murmura y se apretujan intentando entrar en la boite. Tácita amenaza de los porteros de dejarles a la intemperie. La noche es húmeda y fría. Hacen cola una docena de personas, entre ellos dos friki-navajeros con pinta de cholos. Uno de ellos se saca la picha, entrecierra los ojos y descarga su vejiga, apuntando a las perneras del pantalón de dos niños pijos que están en la cola y riega con líquido amarillo a los dos Borjamaris. Marcando territorio. Los otros retroceden, acojonados. Uno alto y otro bajo. Los dos están rapados al uno. Cazadora marrón ajustada de cuero uno, con el logo, semiborrado, de un bulldog. No se distingue bien. El otro, el chaparro, se marca unos imaginarios pasos de baile para ahuyentar el frío. Saludos festivos a un coche que pasa tocando el claxon de la cucaracha, que no puede caminar. Efluvios de gasóleo que irritan a los de la cola, que se mezclan con el olor a almizcle de sus orines. Los dos neonazis se dirigen a un grupo de niñas pequeñas.Están cantando:
Wir tragen ein Licht durch die Dunkelheit,
Wir singen ein Lied um uns Mut zu machen.
Ist unser Lichtlein auch noch so klein,
Wir sind ein Lichtermeer.
Montllor ve como uno de ellos empieza a agredir sexualmente a una de las niñas.
Aún lleva calcetines blancos.
En un ejercicio de lógica espacial y en el despliegue de los puntos de vista subjetivos, el Agente Montllor sabe lo que va a pasar Es su trabajo. Lo afronta incluso con deleitación. Ha visto de refilón a la Parca.
Empieza a correr hacia los dos cabezas rapados.
A seis calles de distancia, un coche camuflado en el que Camarasa se entretiene tonteando con el dial de la radio,
BOOOM, BOOM, BOOM. Tres tiros. Suenan como petardos de feria.
Vuelve de su onírico estado y se encuentra a su compañero Montllor, que todavía está vivo, pero con la aorta rota dentro por el balín del veintidós corto que sale en forma estrellada a la altura del pecho. Otra estrella en la barriga, con entrada a nivel del botón de la bragueta. Dicen que la palabra héroe tiene efectos transformadores sobre la psique humana y que, cada uno de nosotros, en el fondo es un héroe en potencia. Camarasa ciertamente era la excepción a la regla. Un puto cobarde. Pero le entra el valor. Lleva una Colt Python del 44. No sólo mata, tumba paredes y cambia de sitio el tabique de una casa. hace agujeros de salida del tamaño de una pizza grande en los cuerpos ajenos. ¿¿¿QUIEN HA SIDO; JOPUTAS??? Han frito a tiros a su binomio mientras él estaba en el coche, aterido por el frío y sus cruzadas de cables. Camarasa se arrodilla al lado de su moribundo compañero y le coge la cabeza. En la lejanía, ladra un perro. La Atropa corta el último hilo de vida. Montllor cruza La Laguna. Panta re. Todo fluye. Especialmente la sangre mormona que se le escapa por sus heridas. Montllor ve el fenómeno autoscópico: Visualiza como sale de su propio cuerpo y se eleva hacía arriba, deslizándose hacia arriba como un globo de gas. Ve su cuerpo como una carcasa despreciable y sube a un nivel de energía superior. Le echa un último visual a la figura del gordo, que le echa babas y lágrimas en su cara. El barquero Caronte le mira con ojos líquidos y señala al frente. Un perro grande ladra. Se detiene el tiempo. No hay luz al final del túnel, ni hostias. Sólo ladridos. Camarasa le pone dos monedas de plata en los ojos.
-Me llevo tanto…amor, logra decirle al gordo Camarasa.
El sirimiri le empapa lentamente y las lágrimas de Camarasa se confunden con las gotas de lluvia dejando regueros salados en su rostro. Parece el replicante de Blade Runner, Rutger Hauer. La obra de Philip K. Dick en “¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?”
El cadáver de Montllor empieza a enfriarse. Era su destino.
Camarasa se seca las babas y mira con ODIO a su alrededor.
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