El beso atrapado.

Cuando sus ojos se abrieron, su mente todavía luchaba por llegar a esas ventanas,  atravesando una niebla morada, logró  asomarse y ver la luz, en ese momento supo, que algo estaba mal. Es normal que a veces el subconsciente nos traicione, pero que se independice, es algo intolerable. Entonces despertó.      Tenía una laguna en su memoria reciente, pero era una  laguna muy poblada, lo que hacía difícil reconocer algo real,entre tantas variedades de sueños y recuerdos nadando revueltos detrás de sus ojos, él no sacudió la cabeza, hizo bien.     Decidió levantarse y al hacerlo, se dió cuenta de algo inusual, él se había levantado,pero él, también se había quedado acostado, los dos, que eran él, se miraron y sin ganas de monologar, el que estaba parado salió, el otro, al que llamaremos Sub, permaneció acostado  sonriendo.       El que salió a caminar, comenzó a experimentar cosas  que al principio le parecieron divertidas,  hormigueo en los labios como después de un beso apasionado y eso no existía en su memoria, tenía  hambre, pero no de comida, era un vacío en la boca de su mente, entonces dejo de parecerle divertido y comenzó la metamorfosis. Agazapado y vigilante, convertido en un depredador hambriento, logró cazar , al vuelo , un beso lanzado por una muchacha a un galán, y de ahí en adelante no pudo parar, devorando indiscriminadamente todo tipo besos, soplados, escondidos, forzados, hipócritas, besos callados o ruidosos, todos ajenos, a él nunca le gustaron los besos, incluso le desagradaban, pero hoy despertó, y todo era distinto.                    Todos los besos que no dió ni deseo recibir, ahora lo atormentan, se pregunta, qué beso busca con tanta desesperación, la respuesta llegó con tal contundencia, que no  tuvo tiempo de sorprenderse, un beso que nunca dió.          Corría y pensaba, decidido se lanzó hacia atrás en su memoria, tropezando con todo tipo de recuerdos, por fin, llego a una sala oscura, donde su primer beso se quedó atrapado en su boca, viendo una película, por tres horas. No fue timidez ni miedo, ella lo rechazo, tres veces. Así que, éste muchacho ni beso ni vió la película. Pensó que, esta vez sería distinto y se dispuso a besar a la chica sentada a su lado, y antes de ser rechazado por cuarta vez, en la cara de la chica apareció Sub recordándole que el pasado, como el final de las películas, NO SE PUEDE CAMBIAR.           Ahora están como empezaron, él parado y Sub acostado sonriendo, pero ya no le dolía el beso que no le pudo dar al muchacha, su única y gran equivocación fue que, sin saber, escogió una película, que al parecer es muy buena. Ya que la responsable de lo ocurrido fue la película y no él, ellos van a verla por primera vez.         

                     Fin