EL ÚLTIMO TREN DE MI VIDA

…Vamos a ver Juán, los números no salen, si no hacemos más producción la competencia nos comerá. …Yo te entiendo Xavi, pero esto es un trabajo delicado y complicado y la producción no es compatible con la calidad, tu que prefieres hacer mucha producción y que lo devuelvan por no detectar los fallos o menos producción y que el trabajo esté bien hecho? Tu mismo …Llevas muchos años aquí trabajando y ya tendrías que saber como llevar esta máquina sin cometer ningún error …Todas las faenas no son iguales, unas se pueden correr más y otras no tanto.

Xavi Bartomeu 51 años, es el gerente de una empresa textil cercana a Barcelona, la empresa pertenece a un grupo compuesto con un total de 13 empresas repartidas por varios países de Europa: Bélgica, Francia, Polonia, Rumanía y esta de Barcelona. Últimamente el grupo está invirtiendo en países del este, supongo que la mano de obra es más barata y les genera más beneficios. Xavi tiene un buen sueldo y además tiene participaciones de la empresa, por lo tanto le interesa mucha producción para ampliar su ya majestuosa remuneración.

La vida de Xavi está muy ocupada con la empresa, visitas a clientes, reuniones, muchos viajes a la central del grupo, etc, etc. Todos estos quehaceres hacen que Xavi tenga poco tiempo para dedicarse a su familia compuesta por su esposa Cristina de 46 años y sus tres hijos; Jordi 12 años, Xavi 16 años y Mireia 19 años. Cristina también está muy ocupada, tiene un alto cargo de directiva en RENFE, se encarga de que todo vaya bien en las líneas de rodalíes “cercanías” de Cataluña.

La relación entre ambos ya hace tiempo que se está enfriando, posiblemente a causa de sus ocupaciones.

…Papá, ni tu ni mamá me entendéis y tampoco os preocupa mi problema, la única que me comprende un poco es Carla “empleada de hogar”y eso que no es familia mía pero se preocupa mucho más que vosotros …No digas tonterías hija te queremos y nos preocupamos mucho por ti, pero nos falta tiempo, tienes que entenderlo y poner un poco de tu parte, por favor tienes que comer más, no estás para nada obesa, eres guapísima y lo tienes todo, no te falta de nada pero

ada vez estás más delgada, tienes que reconocer tu enfermedad y no darle tantas vueltas a ese absurdo pensamiento de que estás gorda y hazme el favor de quitarte esas vendas de los pies.

Mireia ya se ha intentado suicidar en 2 ocasiones, los 2 intentos fue con pastillas; la primera las cogió del dormitorio de sus padres, su padre y alguna vez su madre toman pastillas para dormir. Mireia pensó que si ingería varias de golpe quizás se dormiría para siempre, pero Carla, vio que Mireia no despertaba después de una larga siesta y observó que había un frasco vacío de esas pastillas; en la segunda ocasión se tomó unos cuantos comprimidos de paracetamol sin saber muy bien que efecto tendría. En las 2 veces fue descubierta y llevada urgentemente al hospital para realizarle un lavado de estómago sin más consecuencias.

Aquel día fue el fatídico. Después de jugar más de una hora en el móvil a su juego preferido “Subway Surfers”, un juego en el que se trata de esquivar trenes y en el que corre la protagonista del juego que en si para Mireia era ella. En esa larga hora de juego Mireia se metía dentro del juego y se ensayaba dejándose estrellar con el tren.

Sus pensamientos luctuosos no paraban de girar en su linda pero reducida cabecita …Ya no puedo más, hoy sin duda lo haré, a la tercera va la vencida, nadie me entiende, nadie me escucha, nadie me quiere, mi vida no tiene sentido, solo veo un agujero negro en forma de espiral en el que caigo al vacío dando giros y vueltas sin llegar nunca al final; pero esta vez si que llegaré. Lo siento mamá si mi muerte te duele y más por ser con alguna de tu amada línea de RENFE, igual te jode más el retraso que voy a provocar en tus queridos trenes que mi final.

En aquella tarde del domingo en la que su madre salió con unas amigas y su padre estaba en su despacho concentrado en el ordenador, fue el momento idóneo para escaparse y hacerlo, sus hermanos tampoco estaban en casa, salieron ese fin de semana a la montaña con el esplai al que pertenecían y Carla tenía fiesta los fines de semana.

Eran las 19:43 cuando ocurrió, Mireia andaba con la cabeza gacha por aquellas infinitas vías que se entremezclaban y cruzaban en la zona de Bellbitge en Hospitalet del Llobregat, en su mente había muchos pensamientos de desespero, de su vida, de sus amigas o no tan amigas ya que se burlaban de ella, muchas cosas pasaban por su cerebro y no podía ni siquiera clasificarlas y menos ordenarlas, pero la que más fuerza tenía era la del suicidio.

El tren se acercó con una velocidad óptima y Mireia sin pensarlo se puso en ese mismo momento a unos 5 metros frente a esa bestia de hierro, el maquinista la vio y puso los dispositivos de frenado de emergencia pero no hubo ni la más mínima oportunidad de impedir ese atroz impacto.

En el armario de los utensilios de limpieza, Carla encontró una nota: “Por fin lo he conseguido Carla, me he liberado de esta pesadilla y de este infinito sufrimiento. Que sepas que has sido la única que me entendía y se preocupaba de mi, te quiero no te olvido y te llevo dentro de mi.” Una firma a bolígrafo donde la tinta estaba corrida por alguna lágrima caída en el papel

https://youtu.be/PyHvSHxu1Es?t=129