Desde el mar escribo. Desde aquellos días . Hoy no sé si soy polvo ó un perfil de instagram que ya nadie visita. No sé si habito el fondo de un abismo, o soy una partícula en el aire o un perro callejero que retoza feliz sobre la hierba, no lo sé y deseo que al leer esta postal, ya hayan transcurrido años, viajes, rostros, almas y arboles y vistas al amanecer junto al mar, espero que tus pies estén cansados pero sin animo de detenerse aun, siempre vive y no te mueras, no pienses en el final. Tú viviste conmigo en ese mar. Juntos nos sumergimos y flotamos. Paladeamos el agua salada, nos arrastramos sobre las algas y los arrecifes, ¡Cuánto sol sobre nuestros cuerpos y cuantas risas en nuestra cara! Cuanta vida por vivir y ya vivida escribiera Paz, instantes frente al mar de Cozumel, como al de Veracruz o el de Sinaloa o el de Acapulco que ya has olvidado… cosas que quisiera retener o postergar, no sé puede, con el tiempo no se puede, ni con la vida ni con la distancia, recibe esta postal en el futuro, y sabe, amado hijo Aquiles , que aquel día yo viví para nunca morir.
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