Carmen habla de su vida en el estanco y su afición a los habanos. Reyes es doctor y tímido. Vicente tiene una fábrica de lámparas y Adrián es un crío. Migue se escucha cuando habla y se agrada. Josué arroja su mirada por encima de las gafas y Rosa escribe con pluma. Conecto con el mundo, me siento personaje, saco mi libreta y repaso quién soy. Rebeca está a mi lado y es restauradora y de repente mi turno: ¡ahora! Soy Martina y he venido a disfrutar.

Tu puntuación:

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS