Cartas de un poeta lunánico

Cartas de un poeta lunánico

Dayanis Dominguez

21/07/2017

3:00am «Sin poder dormir»

Me encuentro sentada a un rincón de mi cama; frustrada, cansada y sin sueño. Con un monstruo inmenso de una fusión de pensamientos en el cabeza, que se creen mi dueño: Escuela, familia, amores; personas, alegrías, decepciones. Ya no distingo si las lagrimas que lloro son por tu partida o porque sólo me quedan dos horas para «dejar de soñar» e ir a la escuela. Ya no distingo si mis sueños son sólo cartas o si mis cartas son solo sueños. El insomnio no deja de cantar… y a diferencia de sus cantos con los de un ser humano, el de él es para no dejar soñar, pero no se ha percatado de que yo sueño despierta y los escribo para no permitirme olvidar. ¿Cómo podría olvidar? Si luego me delata el rostro, si luego releo las cartas, si luego… si luego vuelve a caer la noche. ¡Cómo podría olvidar! Si vivo en el silencio de mi pluma y en el grito de mis hojas. ¡Cómo podría olvidar! si son las 3:00am y sigo sin poder dormir…

«…me canso en la arena del sufrimiento.»

Mirando a los lejos el horizonte…

pensando en la inmensidad del sentimiento…

queriendo soportar otro retoque…

buscando olvidar este momento.

sintiendo a paso suave el olvido…

sin llegar al final por ser tan lento…

los pies del recuerdo vivido…

se cansan en las arena del sufrimiento.

POSICIÓN ANTE EL MUNDO

Me encontraba en la «X» del tesoro perdido, y era una gran montaña con vista al mundo.

me senté a observar mi famoso nido, donde estamos atados con un odio rotundo.

Se podía escuchar las vidas cantar

se podía ver el mundo decaer

y empecé a llorar por esta tierra de tan silencioso ser.

Gritaba a los cuatro vientos lo que estaba mal

pero eran impulsos por humano ser

yo ya sabía que nadie iba a escuchar

porque nadie sabe lo que es el bien.

Entre gemidos y sollozos me acosté en su riqueza

pero en esta X solo habían huesos rotos

era el valle: cementerio de personas presas

era el valle: cementerio de todos nosotros.

Se consumieron sueños, como ahora sus cuerpos

y se consumirá la tierra más rápido que el tiempo

porque sus cadáveres son la muestra del querer sin poder

y deque si no haces parte del mundo… morirás.

No hay tesoro más perdido que olvidar nuestra propia esencia.

No hay peor pirata que el que pierde su visión al mundo.

QUE ES LA MUERTE.

Revisé mi álbum de fotos pasadas, donde vestía de niño, y donde me sonreías y yo te sonreía.

Revise mi álbum de fotos pasadas, donde lloraba por ti cuando no estabas y dormía a tu lado.

Revise cada momento, cada detalle, cada sonrisa, cada lagrima, cada pequeña parte de ti y de mi.

vivía creyendo que nunca te irías y que cuando yo te necesitase estarías aquí, conmigo.

Hoy te busco, porque te necesito. Me estrello y vuelvo a llorar como niño.

Hoy te busco, porque te extraño. Me retuerzo e imagino volver a dormir a tu lado.

Veme aquí, asustada y presa de los recuerdos.

Veme aquí, inquieta por tu ausencia.

Veme aquí, suplicando al viento que me arrope como lo hacías tú.

Veme aquí, esto es la muerte…

Amor.

¿Quién no ha tenido un amor pasado por el que aun suspira?

¿Quién no querido saber qué es lo que al poeta inspira?

¿Quién niega al amor o lo bautiza como pecado?

Si el poeta eres tú cuando estás enamorado.

Si alguna vez amaste y sufriste por amor

Y te utilizaron como el “sí o no” de una flor

¿Quién te da derecho para juzgarlo con record?

Fue solo un intento sal de esa zona de confort.

Si fueron tres, cuatro o cinco veces

¡Qué desventura has sufrido!

Pero después de tantas experiencias, creces

Y llegará la hora en que sonría cupido.

Si te encierras en ir en contra del amor

Y libertino juegas por querer

El mundo jugará en contra de tu favor

Y hoy vas a sufrir más que ayer.

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