Estaba lloviendo, el frío se colaba por las ventanas, el invierno había llegado, tarde perro con ganas.
Y hay estábamos mi mamá y yo, debajo de una manta ella viendo la novela y yo cotilleando en el facebook.
Las horas se hacían lentas y de repente como un murmuro lejano, nos vino el recuerdo de otras épocas, la curiosidad nos llenaba…
Con apenas esperanza puse mis dudas en la red y como si nos leyera la mente Google nos dio las repuestas.
Pasaron los minutos y en cada pregunta encontrábamos una historia nueva, nuestras dudas se resolvieron y a la vez se nos abrieron puertas nuevas.
Le enseñe a mi madre fotos de mi facebook, le mostré todo lo que podías hacer, hablar con las amigas sin gastar saldo, a los antiguo amigos que podías encontrar, las muchas paginas bonitas, todo lo que sabia..
Que invento el del facebook¡
Se unió a la pagina, y desde entonces el facebook nos a traído mil y una aventuras, momentos bonitos con las amigas, muchas risas, viejos amigos, romances de cuento chino, y conocidos en cada rincón de este mundillo.
Actualmente este cuento continua, cada una en un rincón de España, desde nuestro sofá tapadas con una manta cogemos el ordenador y conectamos.
Nos mandamos enlaces bonitos y nos decimos lo mucho que nos echamos de menos, nos contamos todos los malos y bonitos momentos, por que lo mejor de este invento es que desde cualquier parte del mundo puedo contactar con la gente que quiero mandarle una sonrisa o una foto llena de recuerdos…
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