Cinco líneas. El mapa de su vida.
Estaba aburrida de todo, nunca había pedido ser solista. Su libreta no le había hecho entrar en trance ni sentir hormigueo en los dedos. Aquel bolígrafo tenía otro cometido. Reflexionaba a la vez que caminaba por las calles sin saber como reaccionar y, de repente, paró su paso. Escuchó cada nota, las sabía de memoria. Una tienda de música, una canción en el hilo… «volviendo a su eterna canción«. Allí estaba la respuesta: lo sabía, siempre lo supo.
 
         Sin levantarse del sofá
                                    Sin levantarse del sofá                                 El viaje que aún no he hecho (concurso de microrrelato)
 El viaje que aún no he hecho (concurso de microrrelato)
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