Viajando por tu ser, veo como me vas mostrando tu cielo, suavemente tocas mis brazos y los abres, no respetarás ningún espacio a menos que te mire a los ojos, le pareces tan familiar a mis universos que no tengo miedo en hacer mío tu sentir y es así como firme e intensamente consigues estar a gusto, y suspiras, suspiras profundamente, y si sientes que respiras es porque está todo bien, y esta vez te estoy mirando con ojos diferentes pues puedo sentirte aquí, en mí, dulce y abrumado espejo…
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