Decidi no generar nada, decidí hacer lo que hace mucho no hacía : realmente descansar, disfrutar de la familia, ver el álbum familiar junto a mamá, enseñar a mi hijo varón a cocinar, darme cuenta de lo afortunada que soy, de tener a mi madre viva, suelo hacer deporte en días normales, 4.30 am empezaba mi día a día, decidí no hacerlo más, hasta que todo vuelva a la normalidad, por fin se lo que es dormir hasta las 8 am o más, sin tener otro apuro más que hacer, que despertar, trabajar un rato en mi laptop, cocinar para los míos y comer, ver una peli junto a los míos, había olvidado lo que era disfrutar, las cosas simples de la vida. No sé cuando esto acabará, solo se que Dios, jamás nos abandonará.
Semillero de historias de cuarentena
OPINIONES Y COMENTARIOS