La primavera ha llegado con sus días más largos; el sol, con su luz plena; las noches, todavía frescas; y la luna, llena.

Los campos reverdecen y los árboles vuelven a brotar con mañanas de luz que a la gente hacen soñar.

Los pajarillos, con sus alegres trinos, las mañanas nos alegran. Barruntan el buen tiempo y los días que nos esperan.

La primavera es la estación del año más bonita, ya que a vivir la vida invita.

Incita a seguir soñando y que algunos nubarrones, en forma de virus, se vayan pasando.

Por eso hemos de vivir con alegría esta estación que nos espera, pues no se dice en vano que la primavera la sangre altera.

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