Después cuando se replieguen las alas en tus manos
cuando el canto visceral de las estrellas se duerma en tu pecho calmo
después
dormirán los infiernos su letanía
dormirán las tormentas su sueño eterno
dormirán los oscuros cuervos su triste elegía
Antes dormirá la lluvia el destiempo sus nubes agoreras
brillarán tus pupilas antes ciegas al ocaso
abrirá tu boca el zumo de la hidromiel
despertará con sigilo el sol diurno
Antes hambre y sed
antes
palabra hecha humo en la contienda de batallas imposibles
antes
espejo deforme que distorsiona las verdades del roble
antes fango huidizo en la cara de los pueblos vírgenes
antes
palabra huidiza
cielo
que no calla
ahora
y en el porvenir
tus labios
tu sueño
tu alma encantada por el ámbar
tu alma cielo encantada por la poesía
tu bello rostro moreno
ceñido en la certidumbre del ayer
tu espíritu inquieto de abejas
tu canto
tu poema
de música
y prismas
tu poema de arco iris después de la lluvia
tu poema lleno de historias de campos y de ciudades
tu cielo de noches abiertas a espejos quebrados
tu realidad de mocedad en la juventud del día
después
de la lluvia
tendré palabras y libertades
tendré tu
beso rojo en mi mejilla de mármol
tendré tu cielo de nuevo
tendré tu alma encantada
bajo la brisa
y seremos tiempo
seremos esa lluvia finita que refresca en el verano
seremos los hipocampos bailarines del mar en la profundidad del océano
seremos calma
después de la larga noche de cielos quejumbrosos
después del largo laberinto de monstruos procaces
y hablar poesía sería la positiva preñez de la sequoia
será el porvenir tranquilo de cielos lustrosos
a pesar de la noche de otros pretéritos
a pesar de otras noches de pasados angustiosos
después de la lluvia
vendrá la luna con sus giros
a danzar en tu alma noctámbula llena de escondrijos
después de la lluvia
vendrán otros arcos iris
sin tristezas
con el alma regocijada llena de belleza
con tu canto de pájaro
enhebrado en el cielo
calmo
después de la lluvia
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