¿EVOLUCIÓN O NO EVOLUCIÓN?

Mirando las fotos me parece increíble lo que ha cambiado Valencia centro en sólo unas décadas. Me imagino la ciudad de los años treinta, con carruajes, vestidos de época, las calles ligeramente vacías, la estación saliendo trenes a ciertas horas para los habitantes de los pueblos aledaños, los señores con sus pipas de fumar, las señoras comprando flores para adornar los interiores de las casas, los niños y niñas jugando en la calle con plena libertad … Sin embargo en pleno siglo veintiuno, ha llegado la tecnología y la modernización, ahora observas al gentío con los móviles, disfrutando de la vida a través de una pantalla táctil, perdiéndose todo lo que ocurre alrededor, la evolución a pasos agigantados a los que estamos siendo sometidos, sin ningún tipo de respiro, sin poder disfrutar del algarabío, obligados a la extensión de nuestros teléfonos móviles y a la compra compulsiva cuando antes con poco se vivía dentro de lo que cabe medianamente. Cierto es que si pudiéramos mezclar ambas épocas en una, con todo lo positivo y dejar a un lado lo negativo de las dos , puede que alcanzáramos la perfección … ¡pero sí!, ¡lo sé! eso sería una soberana utopía a la par de una soberana gilipollez, a quién le importa rememorar aquellas horas que nos tirábamos en la calle jugando, aquellos plantones erróneos cuando quedabas con los amigos a través de la voz, aquellos olores de los obradores haciendo pan, aquellas cocinas de todo el día, trabajando entre el fuego haciendo maravillas, al zapatero haciendo remiendos, a la costurera haciendo los trajes a mano de falleras …. sí que es cierto que todo quedó atrás.

Ahora con tan sólo un ¡click! lo tenemos todo aquí, pero sólo si te lo puedes permitir, si no, tendrás que vértelas con gran astucia para aquello que deseas poderlo tener, pues puede que en la tienda no esté. Lo sé , porque trabajo en el sector logístico y parecemos duendes navideños, haciendo todo lo posible para que en menos de cuarenta y ocho horas se pueda tener en casa, si no, reclamación al canto, somos cada vez más insatisfechos y exigentes.

Por eso me pregunto todo esto, vale que si no, no tendría trabajo estaréis diciendo, pero se puede combinar la tradición con la modernidad, sin olvidarnos de los principios, la tecnología nos ha robado lo básico, y ahora lo estamos buscando fuera, cuando lo tenemos realmente dentro, pero no nos damos cuenta de ello, con la excusa de la «comodidad» nos estamos poniendo en letargo, para ser cada vez más dominados.

Puede que suene como una bruja agorera, pero creo que no miento cuando digo que la evolución material nos ha hecho olvidar la evolución emocional da igual mientras nos podamos vender , corromper, hipotecar y a los demás machacar para poder alcanzar lo último sin ningún tipo de escrúpulos.

Bajo mi punto de vista, me quedo con la época de los años treinta, no había «comodidad» pero sí esperanzas, sueños, risas, lucha, principios por mejorar.

Te voy a hacer una pregunta : ¿ con qué época te quedarías tú? ¿evolución o no evolución?, ¡he ahí la cuestión!