Las cosas que tiene una vida, con sabor a sal.

Mientras yo miraba el agua, la vida se movía,
un poco de la tuya y otro poco de la mía.
Aquí desde la otra  orilla con el agua se extendían,
pensamientos hacia una amiga,ella
que dentro del agua sin yo ver ella se movía. 
Sin saber, desde la arena yo sentada,
en otros mares ella se adentraba.
Un ferry, entre olas ya nadaba,se movía,
y en sus fauces a mi amiga llevaría.
Casualidades,algunos otros dirían,
pero yo eso no lo admitiría.
Firmamento, tierra, agua, aire, allí concurrian,

todos los elementos en un solo día.
Y en mi alma, el fuego de la vida ardía,
por una amistad a la que aún yo quería.
Gracias mar, gracias vida, 
por dar luz a cada uno de mis días!!!!..
En una tarde perdida, entre ideas aturdidas,
pensaba en querida amiga la cual siempre reía,
y hoy como en caída libre,ella me despedía.
Que pasaba en esos días, de escenas sin sonrisas,
que sucedió en esa despedida, que la amistad se perdía.
Siempre el aire nos unía, el fuego nos mantenía,
y lo más importante,con la tierra,el agua,
algo entre nosotras germinaria, 
algo que yo no podría olvidar, en toda una vida.
Una amistad verdadera, más allá de las fronteras, 
más encendida que una hoguera.
Más solemne que la luna, mas amigas que ninguna.
Más noches, más días, más soles y espigas.
Más sales, mas salidas,mas nosotras, trotando
por las vías de los días.
Como una lágrima que rueda de mi cara la amistad secaba.
Amiga miremos los cuencos vibrar,sonido aún podemos bailar.
Bailes que ya no haremos, aunque ellas,nuestras almas
al pasar no dejen de bailar.
Marcas de magias olvidadas, que hemos de contemplar,
de nuestra vidas ya pasadas,y aun no dejamos de admirar.
Tu mi querida amiga,tu camino has de andar,
pero hay caminos que ya andados, no los podremos borrar.
En un lugarcito de ellos, alguien se sentó a esperar, 
que un día de gloria, te pueda volver a ver pasar.
Así es la vida, veces linda, y otras mordida,
un poco escarlata, otras jodida.
Como bellezas puras, como puras las amarguras.
Todo empieza y todo termina en una cinta de seda roída,
o como una perla,de un poco de lodo teñida.
Sentidos abiertos, de dulces momentos,
como azúcar ardida, dulce amargo en toda medida.
Planes surcados, sin un arado, dudas volando,
en lo recién topado.
Rancias las olas de vida que sin saber allí olían,
que en sus días perdían, la luz que a ella la alumbraria.
Sueños no permitidos,como trabas de un cerebro herido,
cosas no realizadas,a causa de esas pavadas.
Como se puede sentir con un corazón encerrado,
como se puede respirar,con los pulmones encharcados.
Negación a la vida, por cosas de un pasado está claro,
como quien ve, y todavía no ha mirado.
Dónde está el cielo, cuando se está abajo?
Donde, el nido que se ha abandonado para volar
en un suspiro, sus sueños no narrados.
Con sabor a sal me he quedado, en mi paladar he degustado,
el respirar de los días tantos buenos, como mal logrados,
de amistades limpias, de buen grado,
de torbellinos de risas y mucho más salado.
Vida amiga, tu no me has dejado, y
respirando en sueños todo va pasando,
imágenes remotas de aquel bello pasado.