¡si! es verdad, estoy aguardando por mis ilusiones haciendo caso omiso en ocasiones, a todos esos temores, cediendo mis disgustos, sosteniendo mis miedos, otorgando a mi aliento el valor requerido para no desviarme en el camino, Por que mis pensamientos siguen siendo dóciles entre la esperanza y el dolor. ¡Si! aqui me tienes de nuevo esperando a que algo suceda y aunque ya no tenga sentido el hablar, el escribir y el interpretar, no perderás la fuerza ni la autocomplaciencia que caracteriza tu existencia, si, a ti, que casualmente limitas mi actuar, mi comprensión y capacidad; entre las muchas luchas de la sociedad me esmero con total libertad, para algún día en calidad de inoportuno asumir con gallardía la ausencia que deja tu partida. Tú ancestral condición que entre líneas y frases te hacen mención, cual necesaria e indispensable se ha convertido tu recuerdo y aúnque no llegamos a un estado de acuerdo, siempre existirá este vacío inédito. Vacío no detallado, no escrito, no divulgado; en situación coherente, es inefable con palabras recalcar el privilegio de haberme concedido una oportunidad. Espero volver en su momento a ti descripción de monotonía, benevolente circular del sentimiento, a ti, aún cuando hay quiénes te definen como el causal de los malos momentos o como el verdugo de muchos sufrimientos, tambien como la constante afinidad entre placeres y ansiedad, para mí, el titular de cada vida latente, por tu nombre correspondiente, eres tú. AMOR simplemente.



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