Ame ese beso que nunca me diste, tus caricias en mis mejillas que no sucedieron cuando me despedía, cuando en realidad quería quedarme. Ame esos te amo que nunca despertaron de mis labios, cuando estabas cerca pero parecian 1000 pasos mientras decías nos vemos. Ame ese silencio cuando ya no tenía que más que decir, y un te amo que nunca dije era la mejor forma de terminar cualquier frase. Ame tu sonrisa cuando te ame con la mirada. Aún así nunca supe si supiste que te amé, como probablemente no había amado a nadie. Te amé y amé esos momentos que nunca dije te amo.
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