Supongo que he gastado mis palabras,

brindando a mujeres que no lo valían;

ahora no sé que decirte, para hacer algo único.

Ya que siento en mi alma, que te mereces lo más especial,

aquello que abarca una inmensidad, más longeva que mi sentir.

Es por eso que doy vueltas en mi cama

imaginando lo que podría decirte.

Tal vez pensaría en regalarte un gesto,

aquellos que hablen más que las palabras.

Aunque no sería suficiente, mereces algo más único.

Mereces mi tacto verdadero, como caricias eternas;

dejando marcas en tu cuerpo.

Yo merezco emborracharme con tus besos,

recostarme en tu abdomen, y ver las estrellas en tus ojos

mientras estés sentada.

Déjame seguir viendo esos ojos,

así sabré que decirte de especial.

Mi conciencia se recobrara en tus abrazos,

y seré capaz de decir una oda en tu nombre.

Puedo llegar a la conclusión,

que el mejor idioma para hablarte,

es aquel que no se dice con palabras,

deber ser uno que solo tu entiendas.

Por eso entraré en ti, con una suavidad inmensa;

mis manos serán un algodón en tu cuerpo,

en el que sentirás un placer y amor tan inmenso,

donde hablaremos con nuestros cuerpos.

Esas serán las mejores palabras que te daré,

ese será nuestro idioma, nadie lo podrá traducir;

pues es algo único, al igual que lo que eres.

Tan difícil de encontrar, pero tan divino de tener.

Solo déjame hablarte secando tus heridas.

Que mis abrazos sean tu cura,

Permite la dicha de tener un corazón,

compartido con el tuyo.

No olvides mis palabras,

por mucho que el tiempo pase,

ya que es lo más real que he dicho.

Solo quiero ser un hombre,

el cual sienta la gran dicha,

de tener al lado la mujer que ama.

Más allá de mis caídas,

más allá de tus derrotas…

Amémonos, así juntos,

Tendremos nuestra mejor victoria;

esa será nuestra palabra favorita,

ya que nuestro mayor orgullo, será estar juntos por siempre.

Etiquetas: amor poesía

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