Piedra y papel

Parece que fue ayer cuando los vi pasar y me deleite de la felicidad que irradiaba entre aquellos dos que tanto se amaban. Te juro que verlos me hacía creer que el amor en verdad existía, no se que pasó pero el tiempo ha pasado y tal  parece que en el corazón de él, aquel sentimiento se apagó como si fuese una vela en una repisa, me da coraje ver como ella lucha por ser para él ese bálsamo de amor y dulzura que le ayude a llevar sus días de manera en la cual los problemas del día a día sean más pequeños. 

Ay si la vieras con mis ojos y con ternura vieras la tristeza en aquellos ojos donde aquel a quien ella amaba tantas veces hizo nacer un brillo tan grande capaz de iluminar el camino de un corazón que latía solo para él. Me da coraje ver como la hace pagar heridas y traiciones que ella nunca le causó y con ello matarla en vida pobre pequeña tonta. Es un papel suave tratando de cobijar a una piedra 

Creo que sabes de quién hablo verdad. 

¿De quién me hablas?

¡De una tonta!

¿Cuál tonta?

¡Tú!

¿Yo?

¡Si tú!

Es duro aceptarlo verdad. Ver a través la realidad y darte cuenta que esa tonta soy yo.

Si. yo, una pobre alma que ve con sus propios ojos como el amor fingido de un hombre es capaz de caerse y acabarse de manera espontánea sin siquiera dar aviso a quien más ama de los dos. Esa soy yo, una ilusa que creyó en cada palabra que ahora él con hechos y actitudes me muestra que no fueron ciertas. Y me pregunto, ¿quién te dio el derecho de hacer con mi corazón lo que haz querido? ¿Quién te dijo que podías llevarme al cielo para después estrellarme contra el suelo sin importarte que eso podría matarme? Me da coraje verte tan campante como aquel ser que va por ahí tranquilo como si no hubiese hecho nada para herirme, mientras en mi garganta se atoran las palabras que a grito callado te expreso en un silencio que día a día acaba conmigo. ¡Quiero gritar! Quiero hablar de lo que me duele acá dentro, necesito entender como fuiste capaz de sacarme de tu corazón sin siquiera decírmelo, déjame comprender como tu maldita indiferencia no te deja ver lo que haces conmigo. ¡Ay corazón mío! Como es posible que decidas traicionarme al latir por alguien que ha decidido caminar lejos del ritmo que tú con cada latido has marcado dentro de mi. Acaso no te das cuenta que aquel que un día prometió cuidarte ahora como témpano de hielo duerme cada noche a tu lado sin siquiera cobijarte un solo momento en sus brazos. Detente corazón y te redirige tu marcha y ve al encuentro de aquella dueña del pecho donde habitas ya que sola la has dejado por correr tés el, ayúdame a sentir nuevamente tu latir y con ello saber que eres nuevamente mío y no de él, ¡no le ruegues corazón! Ya que el ha decidido llevarte al abismo del olvido sin siquiera tener el derecho, déjame demostrarte que aquel amor de él fue fingido, ¡escúchame por favor! Sé que lo amas ya que yo también lo amo pero entiende que él a nosotros no, debes de entender que para él solo fuimos una salida fácil a su infierno anterior y en el afán de salvarlo del dolor él sin duda alguna nos mató, créeme que lo veo corazón y te juro que no lo reconozco ya que él ser que habita en él es un reflejo de lo que siempre fue y que por tu culpa no vi. si vieras corazón mío cuantas veces me he metido entre sus brazos buscando aquel maldito amor que con lágrimas fingidas él me juro sentir, no puedo contar las tantas veces que mis ojos han tratado de verse en los de él y en ese espejo del alma solo puedo encontrar a un ser vacío y frívolo incapaz de tan siquiera entender lo que está haciendo con nosotros, ¡no le ruegues corazón hazme caso! Te juro que es caso perdido seguir insistiendo te sea brindado un amor que te juraron era solo tuyo y al parecer prefiere dárselo a alguien más, ¡déjalo corazón no llores por el! Te aseguro que yo puedo darte la felicidad que tú mereces si prometes volver a latir por tu dueña, déjame demostrarte que en mi interior puedes encontrar ese calor y la ternura que necesitas para sentirte vivo y así puedas volver a creer en la belleza de un amor limpio como el que tú eres capaz de dar.

Escucha el llamado de este pecho que es tu hogar y vuelve a mí y deja que el camine por el valle que decidió ir sin ti y sin mí, déjalo corazón mío y permítele vivir lo que él crea bueno a su vida ya que puedo jurarte que cuando quiera algún día encontrarte a como tú tantas veces lo has querido tú y yo estaremos muy lejos de él camino obscuro donde él decidió dejarnos, por hoy duerme sabiendo que el dolor algún día terminará para esta tonta que no sabe nada más que amarlo y que ferviente en su estupidez sueña con el regreso de aquel que él algún día fue. Cerraré mis ojos para soñar con el regreso de aquel que tanto me amaba y que en sus brazos pueda perderme lejos de esta cama donde un fantasma que usa su rostro duerme de espalda a mi, duerme corazón ya que mi amado cada noche nos espera en sus sueños y prefiero dormir eternamente al lado de él que vivir un día aquí sin amor.