Mi viaje comenzó el día en que me anunciaron su próxima partida. Justo ahí mi mente voló a aquellos espacios, desconocidos para mi, pero que a partir de aquel 23 de junio albergarían mis afectos en sus calles y casas.
Llegó el momento y ahí estaban, listos para partir, como alfombra la obra de Carlos Cruz Diez, como música en mis oídos la dulce melodía compuesta por una sola palabra: abuelita!
Y en ese avión volaba mi mente y en mi recodo imagino los nuevos lugares donde se escuchará tu risa!
OPINIONES Y COMENTARIOS