Puchis la zorra

2012, no me acuerdo de que día o mes era pero del año si me acuerdo. Acá en mi estado todo el año parece verano, no hace frío ni bailando la danza del tecolote. Agarré un trabajo en una fábrica donde se hacen diversos productos derivados del coco. Trabaja mucha gente allí, de todos colores y sabores., allí hay de todo y allí se paga por destajo, es decir… se te paga por la producción que hagas ( aunque siempre sentí que me robaban jajajaja ) el caso es que había gente por doquier.

Yo estaba en el área de perforado, pagaban 70 centavos por coco, si había materia prima suficiente y no había paros, podría ganar algunos 2000 pesos por semana, ah pero eso si, bien cansada.

Ese lugar no es muy diferente de los demás, todo el mundo te juzga sin conocerte, hablan de todos, supura la envidia, los noviazgos extramaritales, etc. Es un cochinero, PUNTO.

A menudo veías como llegaban nuevas cosas para aligerar el trabajo y por ende hacer subir la producción pero era un arma de doble filo, porque las viejas chismosas del peladero usaban eso para poder quedarse más tiempo en el baño a estarse riendo como chachalacas, al fin y al cabo podrían recuperar el kilaje de siempre. Otros no se bajaban ni al baño, para aprovechar al máximo de la tecnología que llegaba.

Un buen día llegó una chica nueva al trabajo, la verdad no me acuerdo de su nombre pero se que le decían «la puchis». Ella era muy bonita, delgada de tez blanca con frenos en los dientes, ojos grandes, cabellos largo, negro y lacio. Hizo confianza muy rápido porque es de esas personas que se te acercan a hacer plática. Como siempre las envidias no se hicieron esperar, y más de una le dio comezón la llegada de la chica bonita. Rápido comenzaron los rumores de su «pasado», que si bailaba en la zona de tolerancia, que si se metía en la casa de no se quién, etc. Me consta que trató de sobrellevar toda esa mierda porque se limitaba a escuchar y no a devolverles las groserías.

Una vez nos tocó hacer aseo juntas, era el turno vespertino y al terminar debíamos dejar todo limpio…bajamos a limpiar las tolvas y  en ese lugar tan pequeño y un tanto oscuro, se comenzó a desahogar conmigo.

– Si fui bailarina (puchis)

– ¿ Y que? Yo no te estoy preguntando (yo)

– Si pero ellas hablan por mí y no saben que es lo que sucede en mi casa. Mi mamá no sabe que lo fui y si se entera no se si me vaya a correr de la casa. Estoy viviendo con ella porque mi esposo Hugo se fue a no se donde y ya no podía tener a mis hijas así… mi mamá es peladora, aquí mismo, está aquí al otro lado (puchis)

– Entonces, ¿ doña Idalia es tu mamá? (yo)

– Si, y ella me tiene en un altar, ella me ha traído aquí para poder estar juntas y juntar los sueldos (puchis)

– Pues entonces ¿Qué te preocupa? ya estas con ella, ya tienes trabajo (yo)

– Pues ese es el problema… en este trabajo no  creo sobrevivir. Pagan muy poco y mi hija tiene problemas de salud… Necesita una operación de corazón y no me pienso quedar aquí esperando a ahorrar el dinero por la vía «derecha», en la zona puedo ganar mucho mas y es solo por la noche, aunque lo difícil será mantenerlo en secreto por mi mamá, los demás que se vayan a la vrg… (puchis)

– Uhm, no sabía lo de tu hija… yo de ti mejor mantengo informada a tu mamá (yo)

– No, porque se moriría de la vergüenza y se saldría de trabajar… a su edad ¿en donde más podría trabajar? Aquí trabaja tranquila y a su ritmo (puchis)

– Bueno, no soy persona que da consejos, no sé que decirte, pero ojalá puedas ahorrar lo suficiente y que tu hija este bien (yo)

-Gracias Isa (puchis)

Fue una charla corta pero que a mí me tocó mi corazón de pollo.

A los días llegué a la fábrica y como de costumbre me dispuse a sanitizar mis botas antes de entrar; sorpresa mía cuando escucho hablar a las cacatúas sobre mi compañera de trabajo.

-¡ Deberían correrla! 

– ¡ Qué vergüenza para su mamá! etc. etc. bien persignadas las viejas.

Trate de ignorar lo que oí pero apenas me puse de pie y una de ellas me preguntó : ¿ Ya sabes lo de tu compañera? a lo que le respondí: ¿y a ustedes que les importa? ¿en que les afecta? ¿Cómo saben eso?

Si no la has visto tú bailar… seguro te lo contó tu esposo que si se ha de dar sus vueltas a un lugar donde no estés tu. ¡ Ese es tu coraje! por gusto o necesidad, no nos debería de importar; o acaso ¿hay alguien de aquí que sabe si sus hijas ya comieron? ¿saben si tienen algo para cenar hoy? no lo creo, ustedes NO SABEN NADA, y como yo no le doy ni un centavo para que sus hijas coman, no tengo por qué andar opinando… tampoco deberían ustedes «señoras» ¿Qué se ganan por andar de argüenderas? son feas, son viejas, son gordas, son infelices… mínimo ya no sean mitoteras. 

Obviamente lo que yo dije no hizo que pararan los chismes.

Puchis dejó el trabajo muy pronto. Espero que le haya ido muy bien, que todo se haya logrado como se esperaba. 

Ahí y ese trabajo lo deje después de haber estado allí casi dos años… la licenciada de recursos inhumanos es una perra… me dijo que si no renovaba mi contrato de seis mesesotes en otra área me haría correr; así que tuve que renunciar allí mismo. concentrémonos en trabajar y crecer, ¿Por que ir a hacerle la vida imposible a  alguien?