¡Hola Sham!
Iba junto a mi mami, cogida de su mano para ir al cole. De repente, sonaron unas sirenas tan fuertes que tuve que taparme los oídos. La gente empezó a correr de un lado para otro. El osito de peluche se me cayó. No pude recogerlo. Al cabo de un rato, estábamos dentro de un agujero muy grande, junto a decenas de personas. Pensé que jugábamos al escondite. Se oían llantos y mami dijo en voz alta que aquel lugar olía a miedo. Sobre todo, cuando un silbido interminable dio paso a un silencio espantoso. Cuando parecía que todo se había calmado, la tierra comenzó a temblar al igual que nuestros cuerpos. ¡Boom, boom, boom! Yo me agarré a mami con mucha fuerza. Ella me acurrucó entre sus brazos.
Días después nos llevaron en un autobús, lleno de mujeres y de niños, hacia otro país. Los papás no podían acompañarnos. Nos dieron comida, ropa limpia y acabamos en casa de unos desconocidos que no hablaban nuestro idioma. Había muchas cámaras de televisión. Estoy segura de que a ti y a tu familia os tratarán igual que a nosotras.
Muchos besos.
Yaryna.
Para refugiada siria Sham
(22100) Chełm (Polonia)
OPINIONES Y COMENTARIOS