Amor nómade

«Soñaba con tocar el cielo con los pies sobre la tierra»

El nómade está cansado de ser nómade.

De emborracharse en un millón de bares,

De llorar en los hombros de desconocidos,

de coger con todos los colores del arcoíris.

.

La sabiduría que aprendió de la soledad

le otorgó una habilidad; quererse,

tanto, que subestimó al destino

y un día le agarraron los remos de su balsa

.

y se la dieron vuelta

Descubrió el cielo después de tanto pisar la tierra.

Le gustó aferrarse de las nubes

Y jugar con el sol

.

Se sintió tan querido cuando la luna le hablaba.

Las estrellas le contaban de historias añejas,

Con sabor a abuelo y gusto ancestral

Que hermoso era eso!

.

Volvió a girar el molinete 

Y esta vez el nómade aterrizó en su tierra

Que vida de mierda! Repetía

No le importaba más la libertad que le envidiaban

Ni su autoestima elevada.

.

Solo quería volver a jugar con el cielo

Encolumnarse en las filas de su clan

Y llorarle solo a la luna

Coger con el sol

Y emborracharse con sus amigas, las estrellas

.

Volver a volar no era tarea simple

Solo un legado de herencia,

O un profundo amor comunitario

Que le transfiera la destreza

.

El nómade vivió toda su vida buscando una peña de

hermandad

Que le enseñe a volar.

Adolecer

Madurar

Y envejecer

Con un mismo objetivo

.

Sus viajes por el mundo fueron postergados.

La sensación de volver a tocar el cielo era impagable.

Un viejo y su familia lo acogieron

Y le cumplieron su deseo

.

Mientras la técnica se afilaba,

Había noches de risas en familia

Y humildes pucheros.

Fusiones de abrazos

Y sedientos besos.

.

Una raíz empotrada en la tierra le creció desde su talón derecho

Y los brazos de una pasionaria envolvían su pierna

El nómade se olvidó de mirar al cielo como hacia todos los días

Y pasó el resto de su vida contando los pétalos de las flores que le llegaban hasta el cuello