La chica del café

Sinopsis

“Quieres un café?»

“Si por favor”

“ya te lo traigo”

“Espera, te quieres sentar conmigo?”

I

Ahí está sentada en la misma mesa como todos los días y tomando el café que siempre le llevo. La observo y veo a la chica perfecta, es de tez blanca, cabello castaño claro con hermosas ondas, ojos marrones, unos hermosos labios rosados y carnosos, es tan hermosa. El primer día que la vi entrar a la cafetería que fue hace 8 meses, desde ese día no dejé de pensar en ella desde ese día supe lo que es el amor, llevo enamorado de ella todo ese tiempo. La hermosa chica terminó su café y un poco del libro que siempre lee, se levanta de donde está sentada y llega donde estoy para pagar lo que consumió.

– Gracias Federico –dijo al ver mi nombre en el gafete.

– Para servirte… –hice una pequeña pausa para que me pueda decir su nombre.

– Skyler, me llamo Skyler –lo dijo con una hermosa sonrisa para luego despedirse se mi e irse de la cafetería.

Es un nombre muy hermoso para una hermosa mujer como ella. Como me gustaría decirle que estoy más que enamorado de ella, saben que no me voy a rendir voy a ganar su corazón para así decirle lo mucho que la amo.

El día siguiente se hizo presente, otra vez está ahí sentada tan linda como siempre, se encuentra leyendo el libro que siempre lee; me la quedo viendo como bobo hasta que ella levanta la vista y nuestras miradas se conectaron, me sonrió y yo claro que se lo devolví. Deje de verla para ir donde ella se encuentra.

– Hola Skyler, quieres un café? –le sonreí tiernamente.

– Hola Federico –me devolvió la sonrisa –si por favor, con una galleta de… –la interrumpí.

– Manzana.

– Si, de manzana –hizo una pequeña risa –veo que no se te ha olvidado.

– Nunca se me olvidaría algo tuyo –se sonrojó como un tomate –te ves muy linda así de sonrojada.

– Ay haces que me dé pena –río leve.

– Que no te de pena, eres muy hermosa –sonreí coqueto –voy por tu pedido –fui a preparar lo que pidió para luego llevarlo a su mesa –aquí tiene bella dama.

– Gracias –me estaba retirando de ahí cuando siento que unas manos delicadas me agarra el brazo así que volteo y veo esos hermosos ojos café –siéntate conmigo no quiero estar sola.

– Estas segura de lo que dices? –asintió haciendo pucheros –está bien lo que la bella dama diga –me senté frete a ella.

Es tan interesante hablar con ella, es una mujer que sabe de todo y eso me gusta ya que quiero una mujer con la que pueda hablar de todo un poco y esa mujer es ella.