
No me lo pediste pero yo te besé. Era la hora violeta en la «cala de los muertos» de Formentera. Todo fue en silencio y con el solo ruido de nuestros corazones desbocados.
club de escritura Fundación Escritura(s)-Fuentetaja

No me lo pediste pero yo te besé. Era la hora violeta en la «cala de los muertos» de Formentera. Todo fue en silencio y con el solo ruido de nuestros corazones desbocados.
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