El Poder del Amor

El Poder del Amor

Ana Gimena

24/01/2021

Cada noche velo tus sueños, beso tu frente y te canto al oído. Durante el día me transformo en tu sombra, en una sombra blanca que te cuida y te ampara. Quisiera poder sentirte y que me sientas. ¡Mi alma necesita a mi cuerpo! A ese cuerpo que nos da la existencia material.

Concentro mi energía en ese deseo casi imposible; canalizo mi luz, con ferviente pasión, para concretarlo. De pronto me encuentro cerca de ti. Voy caminando lentamente, a pesar que los latidos de mi corazón parecen una gran tropilla de caballos salvajes. Solo yo soy consciente de ello. Me siento extraordinariamente feliz. Ya estoy a tu lado, ya miro tus ojos, ya puedo rozar tu piel. ¿Bailamos? Nos entendemos sin palabras. Somos un solo ser. Un imán invisible nos hace levitar. ¿Será nuestro interior quién encierra tamaña fuerza capaz de hacernos volar?

Hay gente alrededor, mas nada vemos. Existimos en otra realidad. ¡Al fin nos tenemos!

Pequeña mía, no hagas caso al infame Miedo. Él, pretende eclipsarnos. ¡Mírame! ¡Confía en mí! Soy yo… Nuestros brazos se entrelazan nuevamente y, como si fueran puentes entre dimensiones diferentes, nos conectan. Magia. Hechizo. Sortilegio. Milagro. No lo sé. Gocemos de este fascinante regalo.

Nuestros ojos se cierran buscando retener el mundo que somos. En este instante te tengo. En el mismo instante me tienes. El “Espacio” se viste de entrañable amigo y nos invita a disfrutar. Mientras que el “Tiempo” nos acecha, cual verdugo insoslayable. Cada compás, cada nota musical se balancea en un delgado hilo de fantasía que puede romperse en cualquier momento.

Te beso, sin prisas, con amorosa dulzura. Percibo el perfume a jazmín que parece vestirte con los delicados y blancos pétalos de esta soñadora flor. Tus labios se dibujan en los míos y tu aliento penetra en mi ser. Tu halo de calidez sin par nos circunda, dando vueltas y vueltas, simulando un espiral sin fin. Tu respiración y la mía escriben, con letras invisibles, palabras de amor. En tu piel se tatúa “Me quedo contigo” y mi alma ríe porque te llevo conmigo.

Nuestro beso es eterno. Basta con cerrar los ojos para volver a sentirlo. Basta con abrir el alma para volver a encontrarnos.

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