El sentimiento de miedo invade por completo mi ser, mis piernas comienzan a temblar, como si de un par de finos hilos que son meneados por el viento se tratara, escuchar el retumbar de mi corazón y sentirlo cada vez más y más fuerte en mi cabeza, la preocupación es parte de mis pensamientos y uno de ellos es: -¿Logrará oír mis latidos?
Intento dejar de lado ese pensamiento, miro de frente pero nuestras miradas se topan, yo aprovecho para verte y apreciarte ya que no quiero perderme de ningún detalle de tu piel, poder apreciarte tan de cerca era uno de mis deseos desde hace mucho tiempo.
Cuando me doy cuenta las miradas no se desviaron en ningún momento, tu rostro se comienza a sonrojar, tu mirar se vuelve aún más intenso e inevitable.
Quiero grabarme cada detalle tuyo, el respirar la fragancia de tu perfume que por alguna razón hace que mi respirar se profundice. Poder observar el brillo de tus labios rojizos, ver como el brillo permanece ahí, y sentir tu aliento, tu aliento tan cálido chocando sobre mi pecho.
Me comienzo a inclinar sobre ti, tu me observas una vez más, esta vez tu mirada está perdida y entre más me acerco, tu comienzas a cerrar tu mirar lentamente, no hay nada que decir. Simplemente, sucede.
Cuando nuestros labios se topan, una explosión sucede dentro de mi. Mis sentidos, mi pensar y mi mundo cambian completamente, en un breve instante.
Las palabras están de sobra en este momento, no quiero que termine. Posas tus manos sobre mi nuca y me doy cuenta de que piensas y sientes lo mismo que yo.
Nos retiramos lentamente, abro mis ojos y apenas puedes respirar, te apoyas sobre mi pecho. Buscando un sitio en donde descansar, te tomo entre mis brazos y te envuelvo en ellos.
bip-bip bip- bip
Un sonido un tanto molesto hace presencia.
Tu lo ignoras y quieres continuar. Yo intrigado por aquel sonido investigo a los alrededores.
bip-bip bip-bip
Suena una vez más. Volteo a todas las direcciones. Nada.
bip-bip bip-bip
En ese momento, apago la alarma que esta a mi lado y dejo de escribir. La descripción me parece un tanto absurda y sosa. Elimino ese absurdo y pequeño fragmento que escribí, cierro mi computador y decido descansar un poco.
Mañana será otro día.
Mañana podré escribirlo mejor.
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