The Reaper Save he light I

-ha pasado mucho desde que todo ocurrió-dice un hombre encapuchado

Absolutamente todo alrededor era un negro completamente oscuro exceptuando algunas partes que aún no se consumían por el negro

*****

-ya es tarde Sebastián – dice una chica de pelo rizado de aproximadamente 22 años

-lo se Mónica- dice su novio mientras esquivaba un auto

Ambos sujetos iban recorriendo una extensa calle con autos transitando

-y encima tú no te esfuerzas para esquivar los autos – regaño Mónica

-tienen que frenar como de que no- dijo Sebastián mientras apresurada aún más el paso

-¿Qué acaso no te preocupas por tu vida? – dijo Mónica con un tono más serio

-tu eres mi vida, mientras tu vivas yo viviré – dijo Sebastián con un tono romántico para quitar un poco la seriedad de su novia, pero en ese momento su pie derrapo, provocándole una caída mientras caía rápidamente se percató que su cabeza quedaría al lado de un coche obviamente provocándole la muerte, pero el rápidamente presionó su palma con sus dedos anular y meñique para sacar de un artefacto parecido a un reloj una cuerda algún tipo de líquido viscoso la cual el extremo sobresaliente quedó adherido en un semáforo, Sebastián se dispuso a tirar de la cuerda para así salvar su vida y seguir caminando normalmente

-estás loco “spiderman” – se burló Mónica

-estoy loco por ti- dijo

-¿Cómo rayos obtuviste esa cosa? – preguntó Mónica

-me los ha fabricado el profesor de ciencias, el sr. Richard- dijo Sebastián

-el fan de marvel-dijo ella

-¿quieres que te explique cómo funciona? – dijo Sebastián

-está bien – dijo ella sin más remedio

-tu mano tiene tendones en la muñeca los cuales al hacer ciertos movimientos tu “antemano” altera cierto musculo, así -dijo mientras realizaba el movimiento con la otra mano – el cual presiona un botón debajo del dispositivo el cual libera el líquido en forma de cuerda el cual al dejar de hacer el movimiento causa que se enfríe y se tensa, ¿ya entiendes? – preguntó Sebastián

-no, pero bueno – volteo a ver una tienda de cómics para ver un solo peluche – oye, ¿no es ese el superhéroe del cual me hablaste? – dijo ella

-si – dijo con emoción – es un peluche de Daredevil, es bellísimo- dijo mientras lo admiraba a lo lejos – oye ¿por qué tanto interés? – pregunto

-bueno con ese encapuchado, “the reaper” – dijo ella –

-oh si, él estaba el día del colapso del puente-

-Sí, él es un ¿superhéroe? – dijo algo confundida

-Es más como un justiciero o un vigilante él no tiene poderes-

-¿Cómo lo sabes? –

-bueno – dijo un poco nervioso – nunca lo he visto volar o alguna cosa por el estilo-

-bueno tienes razón, llegamos-

El sitio en sí era un parque algo abundando de gente, en el cual había una gigantesca escuela la cual estaba conformada por 4 edificios de forma hexagonal

Al entrar los esperaba una sala gigantesca donde había una recepcionista, un par de escaleras y un ascensor

-¡ascensor! – dijo ella

-¡escaleras! – dijo el

Ambos lo dijeron al unísono

-¿Una carrera? – reto Sebastián

-está bien, pero ¿y el premio? – preguntó ella

-lo que quiera el otro- respondió Sebastián

-aceptó-dijo ella

Enseguida Sebastián comenzó a subir las escaleras demasiado rápido, mientras que su novia presionaba con gran rapidez los botones del ascensor, por cada escalón que Sebastián subía. Esté intentaba no perder el equilibrio, el elevador se había abierto al fin así que Mónica se decidió a entrar para su suerte no había nadie, a Sebastián solo le faltaban dos pisos para llegar a su destino: el laboratorio, esquivo a un par de alumnos para lograr pasar

-oye-dijo una chica la cual se estaba tomando una foto

-lo siento, pero no eres el centro del universo – respondió Sebastián

La chica solamente quedó viendo a Sebastián mientras este seguía subiendo, ya había pasado un piso más, su destino cada vez estaba más cerca, entonces resbaló, pero gracias a los “lanza telaraña” que llevaba, pudo sujetarse a la pared para evitar caerse por unos instantes antes de que la cuerda se rompiera, pero fue suficiente para ponerse de pie agitando los brazos para evitar volver a caerse

-bien – dijo antes de volver a retomar su carrera

Siguió corriendo a través de la escalera, pero un sonido le llamó su atención, era el ascensor el cual comenzó a abrirse a Sebastián nada más le faltaba una hilera de escaleras para llegar a su piso así que subió en el barandal de la escalera tomó impulso y se sujetó del siguiente barandal para llegar al siguiente piso antes de que el elevador se abriera avanzó unos pasos para quedar enfrente del ascensor, prosiguió a tomar aire, finalmente la puerta se abrió mostrando a una bella chica

-hola – dijo ella

-ho..Hola – dijo mientras recuperaba el aliento – gane – dijo con una sonrisa

-bien ¿Qué quieres como premio? – cuestiono ella

-yo solo quiero complacerte – dijo el con un tono pícaro – pero con un chocolate me basta –

-¡ustedes dos! – dijo el señor Richard – ¡al laboratorio! – no parecía enojado sino más bien apurado

-¿Qué pasa doc? – preguntó Sebastián mientras se volteaba. Pero una toalla intersecto su mirada cubriéndole todo el rostro

-quítate el sudor y hablamos aquí adentro – dijo

Ambos jóvenes prosiguieron a entrar, el salón era un típico laboratorio de universidad, eso era lo bueno de esta escuela, el contar con diferentes talleres aparte de las materias según tu carrera, aparte de que el lunes lo tenían completamente libre solo para los talleres

-¿Qué pasa? – pregunto Sebastián

-bueno en primer lugar, Sebastián tengo lo que me pediste – dijo el sr. Richard

-¿Qué le pediste? – preguntó Mónica

-es personal – respondió Sebastián

-Y segundo, el señor Félix de industrias TecWorld está aquí en la escuela – dijo, al parecer eso lo tenía tan apurado

-¿quién es él? – preguntó Mónica

-es un científico reconocido dueño de su propia compañía, el cada cierto tiempo busca algún invento que pueda ayudar al mundo – dijo con algo de orgullo

-Oye Mónica porque no vas a ver si por ahí viene – dijo el señor Richard

Mónica hizo caso a la orden del señor Richard y se dirigió al pasillo

-Bien chico esto era lo que te quería mostrar – dijo mientras sacaba una caja de madera de su escritorio

La caja contenía un par de muñequeras con agujeros en el borde superior del tamaño de un lápiz con puntas de algún tipo de metal

-Podrás columpiarte por los edificios, ya que la telaraña apenas soporta tu peso, y también se pueden usar como látigos – dijo mientras le daba vuelta a las muñequeras – si quieres te enseñó a usarlas

-No, gracias doc pero prefiero aprender por mi cuenta – dijo el

-por cierto el Dr. Elías esta en los laboratorios subterráneos por si quieres pasar a verlo, esta con Stella-

-Quizás después doc., ahora tengo clases – dijo el

-No sé por qué Mónica y tu siguen viniendo a clase los lunes, si es un día inhábil deberían de aprovecharlo, como ir a la feria de los barrios por ejemplo – dijo el sr. Richard

-Si voy a los barrios, seguro quedaría desprotegida parte del centro, además Mónica fue la de la idea – dijo Sebastián

-Y ¿ya le has dicho? – preguntó

-No, ella está más segura sin saber qué soy the reaper – dijo

-Ay chico ¿por qué dices que haces esto? – preguntó con un tono algo paternal

-por qué si no lo hago yo quien más lo hará, la gran mayoría de los policías no hace nada para detener a los criminales – dijo Sebastián con un tono serio

-Solo cuídate y deja de matar – dijo con un tono fulminante

En eso Mónica regresa, rápidamente el chico guarda la caja en su mochila

-Él estaba hablando con el profesor suplente de baile, supongo que ahora está subiendo – dijo ella

-Maldición – pensó Sebastián al oír que el profesor suplente era el que daría su clase – oiga doc ¿de casualidad que le presentaremos a Félix? – preguntó el

-Bueno, es algo que estado elaborando como un proyecto aparte – dijo mientras colocaba otra caja en el escritorio en esta había cuatro píldoras pero había seis espacios – se trata de una píldora que hace que tus heridas sanen por un pequeño lapso de tiempo el problema es que hace que las personas a tu alrededor sufran de pequeños dolores de cabeza. Si hubiera alguna manera de quitar los dolores de cabeza –

-¡lo compro! – dijo una persona detrás de todos, era el señor Félix un hombre con unos 32 años aproximadamente, con un cuerpo trabajado lo suficiente pero sin llegar a la exageración el cual vestía un traje de color blanco, un sombrero estilo antiguo y unas gafas de sol

-Señor Félix – dijo Richard – siendo sincero esto podría ser peligroso –

-Un gusto señor soy Sebastián, ayudante del laboratorio y alumno del señor Richard – dijo Sebastián el cual no podía dejar de estrechar la mano de aquel genio

-Patrañas Richard, en TecWorld podríamos arreglar ese problema – dijo mientras le entregaba su tarjeta de presentación

-Que honda, soy Mónica – dijo con un tono algo de calle

Los dos genios y mini genio voltearon a ver a la chica hasta que la risa del señor Félix acabó con el silencio

-Richard esta muchacha me agrada –

-Está bien, dijo Richard –

-Cualquier cosa, ahí tienes mi numero – dijo para después marcharse con una sonrisa

La sala quedó en silencio por unos cuantos segundos

-¿Cómo rayos hiciste eso? – dijo Sebastián

-Encantó femenino – dijo ella

-Eso no fue para nada femenino –

-No importa lo que fuera, lo importante es que logramos impulsar un invento –

En eso la alarma del reloj de Sebastián comenzó a sonar

-Oh, doc nos tenemos que ir. Yo voy para baile y ella a poesía –

-Les contaré como me fue con la píldora –

-Bien doc, solamente no invente brazos robóticos –

Ambos se despidieron del sr. Richard para dirigirse a sus clases correspondientes

-Oye, ¿crees que le venda esa píldora a Félix? – preguntó Mónica

-El señor Félix es una buena persona el solo busca hacer un mundo mejor, ayudaría a muchas personas, al igual que el sr. Richard así que si supongo que se la venderá – dijo el mientras veía su reloj

Ambos llegaron al salón de baile así que Sebastián se despidió de Mónica, para después adentrarse a los casilleros, varias hileras de casilleros yacían en la sala, Sebastián se dispuso a abrir su casillero para sacar de él algo de ropa más cómoda

-maldición, supongo que mi maestro de baile se enfermó. Así que ese estúpido de Andrew lo va a sustituir el idiota se la pasa a cada rato coqueteando con Móni… – pero sus pensamientos fueron cortados por un golpe en la pared

-Sé que estudias aquí calaverita – dijo una voz algo familiar

Sebastián se acercó al borde de los casilleros para ver como un sujeto con un traje acorazado, con propulsores en la espalda un casco que le cubría la cara con forma de ‘T’ en el cristal y unos “zapatos” tecnológicos en forma de garra había hecho un gran hueco en la pared por el cual había entrado, Sebastián actuó rápido y se puso su traje el cual era un sweater con capucha, con una máscara de tela con forma de calavera, unos jeans, sus brazaletes recién adquiridos y también unos guantes también de calavera que él había diseñado, rápidamente se colocó a unos cuantos metros atrás del casillero para tomar carrera y golpear con sus puños el casillero este salió disparado contra aquel sujeto, los guantes se habían iluminado en el diseño de esqueleto

-¡me buscabas! – dijo the reaper

-¡así es! – dijo el sujeto para empujar con sus pies los casilleros

The reaper hizo un movimiento para esquivar el ataque, para después correr hacia la puerta, el sujeto lo comenzó a perseguir por el pasillo con su propulsor

-¿Quién mierda eres? – preguntó the reaper

-Yo soy skyscraper –

-¿a qué viene el nombre? Ósea incluso eres más bajo que yo – dijo con sarcasmo

-¡no te burles! – dijo skyscraper para después alcanzar a the reaper y tomarlo con los brazos

Ambos quedaron frente a frente por lo cual the reaper le dio un puñetazo provocando una honda de choque haciendo que el casco de skyscraper se rompiera para dejar expuesta parte de su cara, Sebastián no lo podría creer

-¿Andrew? – dijo al seco

Algunos jóvenes escapaban del lugar. The Reaper sabía que no podía luchar aquí o muchas mentes brillantes se perderían.

-Me llamo ¡skyscraper! – dijo para sacar unas manos metalicas las cuales se veían bastante filosas

-Oh mierda –

Un zarpazo fue dado hacia un cuerpo pero no era el de Sebastián. En el suelo yacía el sr. Richard con parte del pecho desgarrado

-¡No! – grito Sebastián para después golpear a skyscraper mandándolo lejos

Sebastián se acercó al cuerpo con escasa vida de su maestro

-T.. Toma esto – dijo el sr. Richard entregándole a Sebastián un pend drive para después presionar un botón en uno de los brazaletes, de estos salieron seis cables que terminaban en una especie de placa con un tamaño menor a las huellas de los dedos – siempre… Te quise como a un hijo, estoy… Muy orgulloso de ti- dijo con su último aliento para después cerrar los ojos

Los ojos de Sebastián se llenaron de lágrimas empapando parte de su máscara pero aun así podía ver, para dejar el cuerpo sin vida de su mentor en el suelo, prosiguió a colocarse las placas en sus dedos pero sobraba una así que decidió ponerla al lado del pulgar, una embestida de skyscraper hizo que saliera disparado contra la ventana del edificio rompiéndose y cayendo al vacío, sabía que tenía que actuar rápido así que presionó su palma con su dedo meñique en dirección a una ventana, del brazalete salió un extenso cable el cual llevaba un pico en un extremo con el cual logró sujetarse a una parte del edificio, pero su cuerpo había quedado colgando de este ventaja la cual skyscraper uso para tomarlo con sus patas por medio del cable, Sebastián volvió a presionar con su meñique devolviendo así el cable y quedando a pocos metros de su adversario, este lo dejó caer

-Feliz viaje reaper –

-Oh vamos amigo creo que volar no es lo tuyo, porque no te muestro una coreografía en la que estoy trabajando – dijo para soltar otro cable esta vez dándole a su propulsor para después hacer un movimiento y colocarse arriba de él – ¿Cómo dije que era? Bajabas los brazos – golpeando el propulsor con ambos puños perdiendo así el control – después un paso hacia adelante – soltó un cable hacia el edificio estrellándose así contra este cayendo los dos dentro del edificio quedando skyscraper en el borde del edificio – das una patada – prosiguió a patearlo tirándolo de la ventana – y vuelta – lanzó un cable hacia el propulsor jalando a skyscraper cuál trompo adentro del edificio

Andrew no se contuvo y vómito en el piso

-¿Quién te envía? – grito Sebastián su cara a través de la máscara mostraba odio e ira

Andrew solo lo miró para después caer desmayado

-¡maldición! – exclamó Sebastián

Sebastián procedió a quitarle su traje, para después comenzar a llorar por la pérdida de su maestro. Aquel que lo había visto con orgullo.

****

Un auto se detenía después de una línea policiaca que rodeaba una escuela, varios soldados S.W.A.T. rodeaban el edificio, del auto salía un joven de unos 27 años aproximadamente, pelo castaño oscuro de piel blanca. Este observo como al rascacielos le faltaban algunas ventanas.

-¡oh dios mío! – El chico se acercó hacia una chica de pelo rizado – Mónica ¿estás bien? –

-Si – dijo Mónica

-¿has visto a Sebastián? –

-Él no ha salido – dijo con un tono preocupante

En eso un chico con una bolsa de gimnasia sale del edificio destruido pero corta el paso cuando el grupo SWAT lo señala con sus armas

-Esperen es mi hermano – dijo aquel chico

Rápidamente las armas bajaron

-No se preocupen, Reaper se encargó – dijo Sebastián

Todos los miembros del equipo S.W.A.T. entraron al edificio en ruinas, Sebastián se acercó hacia su novia

-¿no estas lastimada? – preguntó algo preocupado

-para nada – dijo ella

Los jóvenes se quedaron observando el edificio ahora en ruinas, segundos después una honda de choque había golpeado el aire, esta parecía provenir de la zona subterránea del edificio. Por lo que algunos soldados comenzaron a bajar, de un momento para otro Sebastián había desaparecido dejando solo la bolsa en el suelo.

****

The Reaper se encontraba de camino a los laboratorios subterráneos, usaba un camino diferente al de los soldados para pasar desapercibidos, encontró a los soldados en el ascensor, uno de estos lo había visto así que no le quedaba de otra más que acercarse a ellos

-hey, hola-

-¡quieto!- dijo un hombre el cual le apuntaba con su arma

-tranquilos, solo quiero ayudar-

-tenemos el testimonio de muchos sobrevivientes de cómo no ayudaste a nadie en el puente-

-crees que puedo salvar a todos, evitar que un puente colapse y pelear contra un villano al mismo tiempo- dijo mientras contaba con sus manos

El soldado solo regreso su vista al elevador el cual se empezaba a abrir. The Reaper se acercó hacia el soldado que lo había visto y este estiro su mano en forma de saludo.

-The Reaper- se presento

-Josh Rogers- dijo aquel joven soldado

-así que eres pariente del capitán-

-¿Qué?-

-nada-

Los soldados comenzaron a subir al ascensor, pero The Reaper se quedó afuera

-¿Qué haces?-

-iré por fuera-

El elevador comenzó a descender y la puerta fue detenida por The Reaper. Por un momento este soltó unas lágrimas por su perdida pero esto no lo freno, y se subió al techo del elevador, comenzó a ver como todo el sistema de elevadores parecía cada vez más descuidado y viejo con oxidación incluso le pareció ver como una rata crecía hasta la madurez siendo que esta se veía bastante joven. Pero sus observaciones fueron cortadas cuando los cables que sostenían e elevador se rompieron haciendo que su descenso fuera más rápido y con sacudidas.

-¡maldición!-

Por lo cual este tomo parte del cable y lanzo uno de sus ganchos hasta un elevador que se encontraba contrario y muy alejado por lo cual hizo que el que ya portaba se fuera en contra de la pared dándole una sacudida, ahora la parca hacia la función de esos cables así que llevo al elevador hasta el último piso donde se encontraba la fuente de esa ráfaga.

Este tomo un respiro puesto que había usado la fuerza de la armadura bajo su traje y parte de la suya. Finalmente bajo con los solados.

-¿están todos bien?-

-sí, ¿Qué paso haya arriba?-

-parece como si el cable se hubiera oxidado de un momento para otro-

-pues parece que tiene que ver con lo que sea que pase aquí, este sitio parece como si lo hubieran abandonado desde hace un tiempo-

En efecto el lugar se mantenía en pie pero se encontraba bastante roído, una voz se escuchaba dentro de la sala, el grupo entro hacia aquella sala bastante vieja y vio como dentro de un tanque se encontraba una joven y cerca de ella estaba un hombre algo ya mayor y con una bata rota, cerca se encontraba una silla de ruedas decramada.

-el Dr. Elías- pensó Sebastián

-admiren- dijo percatándose de la presencia de los hombres – pude devolverle el andar a mi hija-

Por la altura era obvio pensar que el doctor no se había percatado del derrumbe de la escuela

-por favor señor pare la máquina, acaso no se da cuenta de lo que le hace al lugar, de lo que le se hace a usted – dijo Josh mientras señalaba la frondosa barba que ahora tenía aquel doctor

-no, ¡no! – dijo este sin escuchar lo que había dicho Josh puesto que veía como Stella comenzaba a envejecer

De pronto, una explosión tuvo lugar. El laboratorio no presentaba daños, sin en cambio aquel tanque había desaparecido.

-no, ¡no!- decía Elías – esto es su culpa – dijo mientras volteaba

De sus manos emanaba una especie de energía de colores neutros, otra explosión se sintió pero esta solo paralizo el tiempo exceptuando a Josh y a The Reaper,

-por favor doc., solo queremos ayudarle-

-ustedes me quitaron a mi hija- grito y apunto su mano hacia una pared la cual se colapso

El cambia tiempos salió por el agujero por lo cual el héroe y el soldado lo comenzaron a seguir. Ahora se encontraban en las vías subterráneas del metro. The Reaper se columpiaba por el techo cargando a Josh. Parecía como si Elías corriera más rápido a pesar de su avanzada edad

-por favor, podemos ayudarle- dijo Reaper pero este sintió como su aliento empeoraba por lo cual decidió salir por uno de los respiraderos del metro que estaba cerca.

Afuera, estaban en un callejón por lo cual ambos descansaron.

-¿Por qué hiciste eso?-

-mírate y mírame-

Josh se dio cuenta como el traje de su compañero se encontraba bastante rasgado, como este tenía las uñas más largas, la voz más ronca y al parecer en su cuerpo había pasado alrededor de dos años pues su cabello ya era bastante extenso.

-¿quieres que te lleve?-

-no, volveré a la estación a pie, ¿hay manera de comunicarme contigo?-

The Reaper le entrego un pequeño teléfono y se marchó columpiándose por los edificios.

****

Sebastián activo una función en su máscara para llamar a su hermano.

-¿Dónde estabas?

-hay problemas aún mayores-

-lo sé – una especie de gato mecánico muy grande invadió la parte superior de la escuela, no te preocupes, se fue desde hace un rato. Eso abatió a la policía sin problema alguno. Pero dime ¿cómo te fue esta…. – pero fue interrumpido por el llanto de su hermano

-lo mataron… Lo mataron Omar, mataron al sr. Richard – dijo entre llantos

-Ya ya tranquilo ¿Qué fue lo que pasó? – preguntó Omar

-Estaba combatiendo con ese idiota y el dio un zarpazo. Pero el sr. Richard se puso de escudo y…. y le desgarro el pecho – dijo con llanto

-No fue tu culpa, el decidió protegerte ahora has que valga la pena, ¿Qué hay en la bolsa? – pregunto

-partes del traje de Skyscraper – dijo con un par de lágrimas en los ojos

-no necesitas pensar en eso ahora, supongo que suspenderán clases por esa destrucción –

-Podría investigar para quien trabaja Andre…- pero se escuchó un golpe en seco

– ¡que sucede! –

-solo choque con unas palomas

– ¿Andrew era Skyscraper?-

-así es, al parecer alguien le dio esa tecnología y yo voy a descubrir quien fue –

****

-Perdónenos padre que hemos pecado – dijo una única voz femenina

-No tienen que hacer esto si quieren hablar – dijo el padre de la capilla el cual era un poco mayor

-Está bien, nosotras queremos ayudar a the reaper, sabemos de lo que él es capaz él quiere ayudar

-Dile lo de la escuela hoy – dijo la voz más grave en su mente

-Hoy en la escuela central ayudó a muchas personas a atrapar un monstruo volador, y pensábamos que podríamos ayudarlo – dijo la chica mientras tocaba uno de sus dos cuernos en su frente

-Está bien pero prométanme que se cuidaran entre ustedes, por algo comparten el mismo cuerpo –

****
La cara de Sebastián estaba frente a su computadora portátil, en su cuarto mientras sostenía el pend drive que le entregó el sr. Richard

-¿Qué es eso? – dijo señalando el pend drive

-el sr. Richard me lo dio

Antes de irse –

-y ¿Qué es? –

-averigüémoslo-dijo insertando el pendrive en su computador

La pantalla de este abrió una página con códigos encriptados

-maldición – dijo Omar

Ambos voltearon a ver la bolsa de partes de skyscraper puesto que comenzó a emitir un pitido

-que mierda-

-¿un rastreador? – dijo Sebastián mientras se ponía de nuevo su traje

-¿Qué harás? – preguntó Omar

-panteón de juegos – dijo haciendo un juego de palabras

Pero antes de salir alguien entró a la habitación por lo que Sebastián se ocultó en otra sala más pequeña donde estaba su ordenador

-¿Qué mierda están haciendo los dos? – Preguntó la madre de Sebastián – te recuerdo Sebastián que aún me tienes que ayudar en la casa y no me salgas con esa excusita de que tienes tarea, esa escuela no deja tarea.

-¿Por qué no le pides a Karina que te ayude?-

– dije que tú me ayudaras y punto, estas castigado por esa pregunta. No iras a la fiesta de Karla- dijo alzando la voz sin motivo alguno

Omar veía como su hermano se quitaba el traje mientras que en su rostro había una cara de odio. Finalmente la madre de ambos salió del cuarto. Sebastián salió aliviado pero esta vez si el traje así que se apresuró a salir de la casa con aquella bolsa

-ni siquiera necesito su permiso-

****

-señor, el dispositivo de rastreo se activó—dijo un hombre frente a un computador

-Bien, que envíen a nights –

****

Finalmente The Reaper se encontraba en las alcantarillas con aquella bolsa, así que la dejó en el suelo de una parte ya conocida por él. Comenzó a buscar algún rastreador hasta que al fin logró encontrar uno entre el planeador de Skyscraper, el objeto en sí era una placa de metal plateado, The Reaper lanzó el objeto al aire para después golpearlo con su puño cargado, destrozando así el aparato, The Reaper estaba apuntó de irse pero una figura negra lo tacleo haciéndolo caer a un lado

-Yo me llevaré esto – dijo la figura la cual era una persona con unas botas de color negro como las de los marines, un pantalón negro, una gabardina abierta del mismo color, un chaleco antibalas y una máscara en que el color que más abundaba era el negro

The Reaper rápidamente se incorporó, pero el hombre había empezado a correr así que comenzó a perseguirlo, pero el calzado de este compenso a emitir luz de unos pequeños focos y comenzó a acelerar más rápido, por lo cual The Reaper cambio su estrategia de persecución, disparando uno de sus ganchos a el enmascarado logrando tirarlo y tomando la bolsa, pero se dio cuenta que se encontraban en las vías del metro puesto que unas luces fueron vistas. Así que tomó al sujeto y se pegó a un costado de la pared, para después recibir un golpe de este golpeándolo contra el tren haciéndolo rebotar de nuevo a la pared así que mejor lanzó otro garfio al techo The Reaper se mantenía en el techo, para después dejarse caer en el techo del último vagón mirando como aquel tipo de negro recogía la bolsa

-oh no, no lo harás.

The Reaper lanzó dos garfios al calzado del sujeto, sujetándolo así para después estrellarlo dentro del vagón, rompiendo así la pare de este, después el entró mirando a toda la gente asustada

-no se preocupen, solo avancen a los demás vagones – dijo mientras intentaba calmar a las personas

Pero un joven de piel blanca sacó un arma y le apuntó

-imbécil, tu mataste a mi hermano en el puente – para después disparar

Pero The Reaper esquivo la bala haciendo que saliera del vagón.

-ay amigo no sabes con quien te metiste – él le lanzó un garfio, apuñalado su estómago, para después tirarlo a las vías

Las personas se quedaron estupefactas al presenciar tal hecho

-¡MUEVANSE AHORA! – dijo la parca

La multitud se movió deprisa, así que The Reaper volvió hacia donde había dejado al oscuro, pero este ya no estaba ahí, solo yacía la bolsa

-¿me buscabas? – dijo mientras salía del techo columpiándose y dándole una patada al héroe.

Este se hizo hacia atrás ante aquel ataque.

-sabes que, ya me hartaste – dijo el oscuro, para después extender sus brazos haciendo que el exoesqueleto que las recubría se hiciera de un tamaño proporcional convirtiéndose en garras parecidas a las de Skyscraper pero de un tamaño mayor

El ser de negro dio un zarpazo rompiendo parte del tren, pero la parca logró esquivarlo, el tren había llegado a la superficie, ahora las vías estaban en una calle, por lo cual The Reaper, salió del vagón evitando los ataques y comenzó a escalar un edificio, pero la persona de negro estiró una de sus garras robóticas logrando llegar al edificio para después contraerla y quedar a pocos metros del héroe, ambos comenzaron una carrera por escalar el edificio, hasta que llegaron a la cima, un logo de la televisión era lo que adornaba aquella azotea, ambos subieron a este pero fue The Reaper el que dio el primer golpe después de escalar, tomando con sus garfios a la persona de su chaleco, para después lanzarlo al centro de la azotea

-¿sabes por qué escale este edifico? , porque en realidad odio este canal de chismes de celebridades – dijo mientras se tiraba de pecho a la azotea con uno de sus puños al suelo – espero que funcione – pensó golpeando la superficie

Mientras está se rompía, la parca se impulsaba por los aires por aquella potencia en su golpe, para después dejarse caer en el sujeto de negro así golpeándolo, a él le gustaba la idea de destruir un edificio de noticias insignificantes con todos sus empleados adentro, para evitar que ese cáncer se propagara, por cada piso que se derrumbaba él se veía más feliz

****

-Creo que lo encontré – dijo la joven mientras observaba como un edificio se derrumbaba

-Vámonos – le contestó la voz

****

Cuando finalmente los pisos dejaron de caer aquella figura de noche se levantó algo moribunda observando como a su lado estaba The Reaper sentado en un escombro adornado con la sangre de saber que gente

-Son tan inferiores, ¿no crees? – dijo la parca

-maldito enfermo – dijo la persona de negro – pero esa fue una buena pelea – dijo sin asco alguno – pero no ha acabado – mientras tomaba con sus garras a la parca

El oscuro giraba haciendo que este golpeara las columnas que habían quedado, tirándolas así para después arrojarlo al aire pero este fue más rápido volviendo a engancharse a su chaleco, para después propinarle una patada en el pecho, el sujeto misterioso antes de caer le dio un zarpazo rompiendo así su sweater y quedando al descubierto su piel con las heridas del zarpazo

-Eso no es nada – dijo mientras se colgaba de una columna y tomaba una piedra para usarla como martillo hacia la cabeza del oscuro provocando que este se desmayara

(Quita la música)

*****

El ser hecho de noche se despertó para ver una Grand Island en la hermosa oscuridad de la noche, este intento levantarse pero estaba atado de pies a cabeza con un cable de luz

-Gracias por la pelea – dijo la noche

-¿cuál es tu nombre? – dijo The Reaper

-Mr. Nights, ¿cuál es el tuyo? Hablo del real, te prometo guardarlo –

-Mike – mintió The Reaper, no puede confiar en nadie

-¿te puedo preguntar algo? – Dijo Mr. Nights – ¿por qué sólo matas a ciertas personas?

-verás, no crees que el mundo está sobre poblado de personas, algunas son personas malas o estúpidas, si matas a las personas estúpidas cuando son pequeñas evitas que sigan haciendo estupideces, mientras que aquí estaban dando noticias falsas, infectando la mente de los televidentes o cuando pasaba algo importante ellos ponían un maldito programa de chisme que a nadie le importa acerca de famosos, me parecía repugnante –

-wow, eso es interesante, por cierto me gustan tus cuerdas –

-y a mi tus garras, por cierto, ¿Quién te envió?-

-no puedo decirte, mi comprador pago mucho por mi silencio-

-enserio necesito esa información-

-solo te diré que es la persona que está detrás de ti-

De pronto un puño golpeo la nuca de Sebastián, pero esto no lo desmayo. Rápidamente The Reaper se incorporó. Lanzo un garfio hacia una columna, para sostenerse en esta, mientras una ráfaga de balas lo seguía. Este se pudo colocar sobre una columna para ver a su atacante. Este era un hombre blanco. Con una musculatura exagerada incluso para un físico culturista, portaba una máscara algo extraña, estaba rapado, llevaba un traje negro anti balas, lo cual dejaba a la vista sus musculosos brazos, los cuales llevaban unas pulseras negras, al igual que un pantalón negro con calzado del ejército. Junto a el yacían dos hombres con trajes parecidos a los S.W.A.T. los dos hombres comenzaron a dispararle a The Reaper, mientras que el líder se dedicaba a lanzar escombros, The Reaper apenas podía esquivar los ataques. Este se alejó por un momento, quitándose de la vista de sus atacantes, los tres sujetos, mas Nights quien seguía atado visualizaban los alrededores.

-jefe, por favor suélteme, le podría ser de ayuda-imploro Nights

Pero este no tuvo respuesta alguna. En el polvo se veían unas luces azules a las cuales les disparaban. Dos llantas de un auto salieron del polvo para golpear a los dos soldados, pero la figura en esteroides tomo ambas llantas y con un fuerte apretón las estallo, así que las volvió a arrojar hacia la niebla, la única opción de The Reaper se había acabando, pero vio como aquellas figuras estaban bajo un techo apenas sostenido por tres míseras columnas, por lo cual comenzó a correr hacia estas, mientras las ráfagas de balas intentaban tocarlo, algunas impactaban contra el pero parte de la armadura que poseía bajo su traje lo protegían. Finalmente se logró colocar sobre la primer columna la cual no había sido afectada por el derrumbe a diferencia del estado de las otras dos columnas.

-ustedes no hablan mucho cierto-

The Reaper tomo un escombro de un tamaño algo grande el cual arrojo hacia aquellos hombres, no sin ates destruir la primer columna. La persona de gran tamaño tomo aquel escombro antes de que le impactara y rápidamente lo arrojo a la columna. Pero The Reaper fue más rápido, saliendo de su escondite golpeo la otra columna con su puño ya cargado para después salir de la periferia de ese techo, dejando así que cayera sobre sus enemigos, el monstruo en esteroides tomo parte del techo dejando que cayera sobre sus compañeros, después de esto lo arrojo hacia The Reaper el cual recibió el impacto

-maldición-

Yacía tirado en el suelo y sobre su pierna un escombro de gran tamaño, sin esperanzas. El enmascarado se acercaba poco a poco a la parca, como si disfrutara su sufrimiento, tomo a The Reaper con su gigantesca mano, lastimando más la pierna del héroe y de los brazaletes, el monstruo en esteroides tomo al héroe como una muñeca de trapo y lo estampo contra el piso, apunto de darle un zarpazo The Reaper logro quitarse pero su capucha fue arrancada, este apenas podía moverse, pero aun así se levantó para después observar su mano y ver aquel botón extra, este lo presiono rápidamente lanzando una llamarada, que apenas hizo retroceder a su adversario, el cual ataco subiendo sus manos y bajándolas rápidamente. El golpe fue recibido por los brazos de The Reaper, rápidamente el hombre tomo al héroe de los brazos mientras un propulsor como el de skyscraper salía de la parte trasera de su chaleco, este comenzó a ascender hasta que llego a una altura bastante alta incluso que los rascacielos, The Reaper ya no podía hacer nada ese hombre era mucho más fuerte que él así que solo sintió como su cuerpo caía al suelo, lo único que hacía que no muriera era la armadura debajo del traje, ahora maldecía esa armadura, puesto que gracias a ella no tendría un eterno descanso en esos momentos, puesta después del puente. Aquel joven solo veía como su cuerpo era tomado de nuevo por aquel monstruo de esteroides. Quien diría que así llegaría su fin.

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