Que aun tengo esa sed insaciable de esos besos que me dabas incluso cuando te hacia enfadar. Ya nadie me ha vuelto a sacar a bailar. Ni tampoco espero que lo hagan. Solo podría bailar contigo nuestra canción. Y llegar a casa con unas copas de más y acabar con menos ropa hasta el alma desnudar y hacerlo hasta la madrugada aunque se nos apodere el sueño. Aunque tú siempre te apoderabas antes de mi, mirándome a los ojos proclamandote mi dueño, pues lo eras. Ahora soy objeto perdido que nadie reclama pero mi corazón sigue esperándote. Yo que me quejaba de nuestra mala vida ahora se que era mi única forma de vivir. Te cogería de la mano y no te soltaría nunca aunque eso significara caminar por los mil infiernos y cumplir las mil condenas solo por amarte. Ya no soy luz sin tus tinieblas. Me partiste las alas y te las llevaste contigo, ahora vuelas con ellas sin mi. Cada noche le pregunto a las estrellas si ellas te traerán algún día de vuelta. Que necesito volverte abrazar pero esta vez despierta. Que te he querido te quiero y te querré porque amarte era la única cosa que se me daba bien hacer.

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS