CUCHARAS Y SÁBANAS

Fue motivo de romántica discusión
Por alterar masculinas fragilidades
Que sofocan mi pasión.
Para mi dormir con una persona
No incluye dormir con esta
Es aburrido. Es tétrico.
Es inseguro. Es meloso.
Aburre tener que permanecer
Quieta hasta poder irse,
Para no interrumpir
El sueño del otro.
Es tétrico ver un cuerpo dormido
Porque aun sin la palidez
Post-mortem o el rigor mortis
Es símil a mirar un cadáver
Como si practicaran
Estar muertos al lado nuestro.
Es inseguro porque cuando uno
Es el que duerme
Esta entregando
Su vulnerabilidad completa.
Podrían imprecarnos
Y no podríamos defendernos
Por estar en estado REM.
Es meloso por la cursilería
Innecesaria del roce
Ya pasados los orgasmos
Es un extra fútil el dormir
En cucharita o tijeras con alguien.
Es como un intento de intimidad
Sobrante y forzado.
Cuando en realidad
La autentica reserva conferida
Está más orientada
A las confesiones
Al ver al otro sin reveces
Verlo desprovisto
De sus versos.
La genuina desnudez compartida
Es ver al otro sin disfraces.
Y a nivel paraverbal
La intimidad es
Ver al otro en situaciones
Que realizaría solo
Como bañarse,
Rasurarse o masturbarse.
Conversaciones honestas
Para parejas transparentes
En almas desnudas,
Es el privilegio de quienes logran
Tener la verdadera intimidad.
No requiero pasar por el
Aburrimiento, la tetricidad,
La inseguridad o la cursilería
Para compartir y deleitarme
De la entrega ajena de confianza.
Porque todo esto ya lo pasé
Sigo sosteniendo que
Dormir con alguien
Nunca incluirá
Dormir con esa persona
Y solo débiles vínculos
Esta postura amorosa
Concluirá su celo risueño.
Los compañeros de sábanas
Nunca serán cuchillos, tenedores
Ni cucharas del mio sueño.

JULIETA IALLORENZI

PATENTADO EN SADAIC Y DNDA

DERECHOS DE AUTOR RESERVADOS

URL de esta publicación:

OPINIONES Y COMENTARIOS